One-Shots ; NSFW ; Robarca

2- Calor.

Puff... ¡Amor!.- Le grité a Diego, hace un calor del infierno.

Creo que el está en su oficina... Espero me haya escuchado.

Hace ya cinco meses empezamos a vivir juntos, vaya que es un martirio tener a semejante hombre frente a ti pero por culpa del calor no poder tener sexo.

¿¡Qué!?.- Escuché como gritó desde su computadora.

¿¡Hay hielos!?.- Aún con el aire acondicionado prendido mi piel está completamente sudada, deberíamos darle un buen mantenimiento a esa cosa.

¡No sé pendejo checa!.- Ya me tienes hasta aquí Diego.

Me levanté de la cama enojado, el puto calor de mierda me tiene hasta la verga.

Abrí la puerta y caminé hasta su oficina.

Estaba haciendo un directo.

Me hiciste enojar pendejo.- Vi como aparecí en el cuadro, sudando y enojado.

¿Ora? ¿Qué traes o que?.- Sin decir una palabra me acerqué a él para morderle un cachete.

Dos años de relación y seguimos peleando por las mismas cosas...

¿¡Que te pasa!?.- Cubrió mi boca con su mano, el chat estaba riendo a carcajadas.

Dame hielo.- Le saqué la lengua, burlonamente.

Ya pues, vamos.- Se levantó de su cómoda silla. La verdad no sé porque quieres que vaya contigo.-

Para golpearte si no hay.- Ambos reímos.

Como sea, chat, regreso en un ratito ¡No se vayan!.- Me tomó por la mano para ir a la cocina.

Abrió el congelador, dentro había varios cubos de hielo, le mostré un vaso a Diego, el entendió y colocó una buena cantidad en el.

¿Feliz?.- Me preguntó, yo estaba metiendo uno de los fríos hielos en mi boca, asintiendo.

Mmhm.- Le dí un pequeño beso en sus labios.

Ah...estás frío.- Diego me tomó por el mentón para besarme.

Sentí como poco a poco metía su lengua, está mezcla de temperaturas es tan excitante.
Al final Diego quedó con el hielo en su boca.

Gracias por el hielo.- Besó mi cuello.

¡Ah!.- Se sentía tan frío que dejé salir un gemido, sus cejas se levantaron.

¿Roberto?.- Me sonrojé, el estaba sonriendo, ¿Está burlándose de mí?.

¿Debería apagar directo?.- Acarició mi trasero, masticó el hielo cerca de mi oreja, después la lamió. ¿Mmh?.-

Si... Tienes que hacerte cargo.- Tomé una de sus grandes manos y la coloqué en mi erección.

Ve a la habitación, espérame, y llévate los hielos.- Me dió un último beso, algo apasionado.

Vi como subió las escaleras bastante feliz.

Verga.- Suspiré profundamente, este hombre me trae muy mal.

Cómo pude subí las escaleras, con el vaso en la mano, uno que otro hielo ya se estaba derritiendo.

[•••]

¿Esperaste mucho?.- Diego entró a la recámara quitándose la playera.

No fue tanto...- Me acerqué a él para besarlo, así estuvimos bastante tiempo.