One-Shots ; NSFW ; Robarca

160- Lápiz.

-Hey... Tengo algo que pedirte.-

Aparté la vista de mi sandwich, para mirar a mi amigo.

-Dime, Dieguin.-

-Necesito un modelo para mi clase.- Sonrió, sin vergüenza alguna.

-Oh... No, no... Realmente no.- Negué repetidamente con mi cabeza y manos.

Soy demasiado tímido para esas mierdas.

-Beto, por favor.- Hizo puchero tratando de convencerme.

-Diego, si voy a estar en frente de toda tu clase posando por más de una hora harías mi mayor pesadilla real.- Dije seriamente.

Diego carcajeó por mi seriedad.

-Okey, pero no estarás frente a nadie más que a mí, entonces...- Sonrió apretando los dientes.

Medité un poco.

Estaré posando frente a mi amigo, dos o más horas... Conozco a este imbécil, tarda un chingo en dibujar pero le queda increíble.

-Mmmh...-

-Beto...- Me rogó, tomando mis manos, poniendo cara de perrito regañado.

-¡Okey! Pero solo dos horas, así que tienes que apurarte.- Solté sus manos, tomando mi café para beberlo.

-¡Gracias Beto! En serio te debo una.- Me sonrió.

-Mjum.- Volteé mis ojos.

Esta mierda me da miedo, carajo, odio que me observen detenidamente y ahora... Diego lo hará.

Mierda, solo me pone más nervioso.
Si, me gusta, no tiene nada de malo ¿Verdad?.

Apreté mi cara a mis manos, deseando que por favor esto pase pronto.

‧ֺ․۬‧ ⊹ ⋆ ﾟㆍ୨୧ㆍ ﾟ⋆ ⊹ ‧ֺ․۬‧

-Bien... Tienes que ponerte esto primero.- Me dio una camisa enorme de color blanco.

Lo miré confundido.

-Solo eso, nada de pantalones ni nada.-

Lo miré aún más confundido.

-Solo... házlo ¿Si?.- Se volteó, dándome un poco de privacidad.

-Me tienes que dar bastante dinero por esto.- Le dije, quitándome poco a poco la ropa que llevaba puesta.

Quité mis tenis y calcetas para después, ponerme la camisa, solo llevaba mi ropa interior.

-Ya, ya me cambié.-

Diego me volteó a ver, sonriendo un poco.

-Te miras bien.- Acarició mi brazo. -Okey, siéntate en la mesa de allá.- Señaló una mesa pegada a una ventana que reflejaba la luz más linda que haya visto.

Me senté, con las piernas cruzadas.

Diego llegó, para ayudarme con la pose.

-Pon tu cuerpo así...- Mi amigo volteó mi cuerpo, dejándome de lado, recargado a la pared.

Acomodó mis piernas con sus propias manos, una doblada y la otra totalmente estirada.

Mierda... Su mano está tocándome suavemente, casi como si quisiera tentarme con sus caricias.
Pero sé que no es eso, para nada.