Amigas Solamente (JENLISA G!P) (editando)

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— ¿Segura que sí podemos hacerlo aquí? ¿No es algo incómodo para usted señora Kim de Manoban? — La rubia tenía escondida su cabeza en el cuello de su novia.

— Que me llames por tu apellido me enciende mi amor — La castaña tomó las mejillas coloreadas de su novia para acercarla y besarle los labios con demasiada ternura. — Y jamás me incomodará el lugar mientras seas tú la que esté conmigo haciendo que vea las estrellas — Siguieron con el beso.

Como era un lugar donde cualquiera podía entrar y verlas en completo chaca chaca, Lisa se brincó todos los juegos previos para calentar el cuerpo de su castaña novia, de todas formas sus cuerpos estaban ardientes de excitación.

— Mi amor ya no aguanto más — La castaña la tomo del cuello para acercar su cara al suyo mientras que la rubia desabrochaba su cinturón y bajaba el cierre para después sacar al aire libre su miembro erecto y venoso.

— Entra de una vez por todas Manoban — Jennie dijo pues la necesitaba con urgencia dentro de ella.

La rubia ya no sentía preocupación pues sabía que no pasaba nada si mantenía relaciones se cuales con su novia, ya que al bebé no le podía pasar nada.

Así que si tanto rodeo subió la falta negra de su novia hasta su cintura e hizo hacia un lado las magras que ya estaban húmedas igual que su rosada vagina.

La rubia sonrió con un toque de picardía al ver cómo la castaña estaba de excitada. Con uno de sus dedo tocó el botón de nervios de la linda y sonrojada castaña haciendo que ésta gimiera de lo sensible que estaba.

— Te vez muy hermosa — Dijo con ternura la rubia y se acercó a besarla en los labios mientras movía su dedo en la parte sencillez del cuerpo de la castaña.

— Lo se siempre me veo así — Muy altanera que salió. — Por favor Lili entra.

— Como usted guste señora Kim — Dicho esto la rubia bobeó su tronco erecto llenándolo de los líquidos que desprendió el cuero de su novia para poder lubricarlo, aunque eso no iba a ser necesario ya que estaba sumamente húmeda de ahí.

Lo paso por toda la apertura húmeda y rosa sacándole unos cuantos gemidos de satisfacción a su novia y luego entró de una estocada, hasta donde topó.

— ¡MIERDA! — Dijo la rubia — Estás muy estrecha mi amor — Comenzó a moverse al mismo tiempo en que le besaba y daba leves mordidas en su hombro.

— Así cariño, así — La castaña agarro el cabello rubio de su novia y lo jaló, separándola de su hombro y acercarla a su cara para besársela.

— Señora Jen... — Nuevamente la puerta era abierta por la misma persona que descubrió a las otras dos. Las mujeres detuvieron su movimiento y la que estaba arriba del escritorio volteó a ver a Nayeon mientras que la rubia escondió su rostro en el cuello de su castaña mientras hacía leves movimientos. — Lo siento Jennie lo siento — Dijo cerrando la puerta de la oficina de su jefa — Hoy las hormonas están muy despiertas, a ver si también las mías— Pensó.

Al girarse la castaña hacia su novia la encontró dando besos en su abdomen abultado ya estando fuera de ella.

— ¿Qué es lo qué haces?

— Estoy hablando con el bebé, pidiéndole perdón por moverlo — Dijo volviendo si atención a la barriga de la castaña.

— ¿Por qué saliste ya de mi? -— Preguntó con la ceja alzada.

— Porque ya terminé — Dijo sin interés la rubia.

— Pero yo no lo he hecho, así que te pido que por favor entres y hagas que me corra sobre ti — Le dijo tomándola del cuello de su camisa para besarla y volver a encenderla.