POV ANA.
Ya habían paso cuatro días desde que llegamos al centro, y hoy podría integrarme a las actividades normales que se hacen aquí, antier me habían aplicado una prueba para ver que estudiaría, nos educarían con forme a lo que sacamos en ese test, yo me había quedado en el área de inteligencia en comunicaciones, por lo que me habían contado a Tamara sería doctora, Mafer química y Ale ella estaba en el área artística, nos dijeron que después de esto necesitaríamos rehacer la sociedad y eso implicaba no solo procrear, si no también rescatar las artes, la ciencia, y reestablecer la comunicación o el resto del mundo, porque aunque los primeros meses tuvimos acceso a internet, eso ahora ya no existía estábamos totalmente incomunicados, así que toda la ayuda que pudiéramos dar era indispensable para este lugar, este lugar era básicamente una ciudad.
-Ana amor, por fin saliste del hospital, ¿Cómo estas?
-Estoy bien Ale, la verdad es que me trataron muy bien estos días, pase bien todas las pruebas que me hicieron y van a poder empezar a hacer la vulcana con las muestras que me tomaron.
-Eso es muy bueno amor, eso quiere decir que ya no te tendrán que hacer más pruebas.
-No exactamente eso significa que ya pueden empezar con las primeras experimentaciones.
- Pero ya te vas a poder quedar conmigo ahora ¿Verdad?
-Si amor ya me voy a poder quedar contigo.
-Que bueno porque ya te extraño demasiado.
-Y yo a ti, por cierto me dijeron que nos vamos a casar.
-Si bueno, eso lo dijo Mafer para que nos dejaran vivir junta eso no quiere decir que lo tengamos que hacer justo ahora.
-No se si me quiero casar, lo que si se es que quiero pasar toda la vida contigo.
-Yo también quiero pasar toda la vida contigo.
-Bueno, vamos a comer, tengo tanta hambre.
-Jajajaja, esta bien vamos a comer.
después de la comida Ale y yo nos fuimos a nuestro pequeño departamento que no tenía baño para bañarse, solo pera hacer nuestras necesidades, Ale me dijo que las duchas eran comunitarias, no entiendo por qué pero supongo que es porque este era un centro militar antes de que l pandemia llegará, y no es que me molestara bañarme con ella, pero si me incomodaba que nos vieran mas personas, cosas a las que nos tendríamos que acostumbrar, esta era una nueva vida que estábamos espesando, y quien diría que en medio de todo este caos me sentiría más libre antes cuando éramos físicamente libres.
-Sabes, amo poder dormir contigo, me haces tanto bien.
-Yo también lo amo Ana, amo que aquí podemos ser libres que ni tus padres, ni los míos están aquí para separarnos.
-Lo se, mira que la pandemia nos hizo un gran favor ahora estamos juntas.
-Ana, ¿Qué va a pasar cuando volvamos a ver a nuestros padres?
-No lo se amor, pero no voy a permitir que nos vuelvan a separar nunca.
-¿Me lo prometes?
-Es una promesa amor.
-No pensemos en eso ahora, falta mucho para verlos de nuevo.
-Ale en realidad.- me estaba poniendo nerviosa, cómo le digo que Olmedo traerá a nuestros padres pronto.
-No me asustes Ana, ¿Qué pasa?
-El doctor Olmedo me dijo que buscaría a nuestros padres y los traería aquí.
-¡¿QUEEEEE?!! PERO CÓMO?!!
-Amor yo solo le pedí que viera si estaban bien, y el intuyo que los queríamos ver.
-¿Qué vamos a hacer chiqui?
-La única forma de que no nos separen es si legalmente estamos casadas, ambas tenemos 18 años, y podemos casarnos sin su permiso.
-Nunca pensé que me casaría tan pronto y de esta manera.
-Ni yo, es más ni me quería casar, pero si es la única forma en la que nuestros padres nos dejen vivir en paz nuestro amor, lo tendremos que hacer.
-¿Sabes cuando llegarán?
-Me dijo que en una semana, estaban en refugios diferentes, y los vana juntar a todos para traerlos aquí.
-¿Quienes más van a venir?
-Los padres de Tam, ella si quiere verlos, presentarles a Mafer, a veces la envidio, sus papás aceptaron muy bien su sexualidad.
-No todos los padres son iguales los nuestros no nos supieron entender, pero eso nos hizo fuertes.
-Lo se y precisamente por eso es que no podemos permitir que nos separen de nuevo.
-Entonces casémonos, no me molestia ser tu esposa, tal vez no sea lo que queríamos pero no es malo.
-Tienes razón.- estaba nerviosa y no sabía porque si en realidad no le estaba pidiendo matrimonio por gusto, y aun así sentía que después de eso nada nos iba a poder separar.- Alejandra Rocha Villaverde, ¿Me harías el honor de ser mi esposa?
-Si acepto ser tu esposa, Ana Cristina.
-Bueno, ahora tenemos que ir al registro civil para solicitar nuestra boda.
-Si pero mañana ahorita ya es tarde.
-Jajajajaja esta bien peque, mejor vamos a dormir.
Esa noche descanse como hace mucho no lo hacía, pero ahora podía estar tranquila, porque estábamos seguras en este lugar, y podríamos empezar una nueva vida, por fin íbamos a poder ser libres, y nadie nos iba a separar, ni siquiera nuestros padres, estaba nerviosa pero no tenia miedo de mi futuro con Ale, sabía que quería estar con ella, y que haría lo que fuera por que eso pasara.
Pov Ale
Esa noche no pude dormir tan bien, a pesar de tener a Ana a mi lado y sentirme protegida por sus brazos, no podía dejar de pensar en lo que podía pasar cuando nos reuniéramos con nuestras familias, porque aunque no pudieran hacer nada si nos casamos, sabía que no iban a reaccionar bien con la noticia, y lo que menos quería era enfrentarme de nuevo con la mamá de Ana, la ultima vez no fue nada lindo lo que me dijo y como me trató. lo que más miedo me daba es que cuando fuéramos a solicitar nuestro matrimonio seguramente se darían cuenta que tengo una orden de alejamiento, y que no puedo estar cerca de Ana, me aterraba pensar que nos alejaran por eso y todos nuestros planes se fueran a la basura, no quería decirle a ella esto, no aún tenia que ver la forma de resolverlo.
Bueno aquí les dejo otro capitulo, disculpen que el fin de semana pasado no actualice pero estuve muy ocupada con la universidad, pero ya volvimos a la programación habitual.
ESTÁS LEYENDO
Cuarentena
FanfictionEsta es una historia original mía se me ocurrió por la situación por la que estamos pasando, y pues las protagonistas son dos chicas bastante talentosas que hacen vídeos para YouTube, se llaman Ana y Alejandra, quiero dejar claro que todo es ficción...