NECESITAMOS VACACIONES

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POV ALE

Ya han pasado dos semanas desde que pusieron la antena de comunicaciones y después de eso se logró contactar con otro campamento de refugiados, en Mazatlán, eso nos puso muy felices a todos, sabíamos que no podíamos ser los únicos sobrevivientes pero después de casi un año de no saber de nadie más las esperanzas se pierden un poco, desde que nos enteramos que hay un campamento en el puerto, Ana quiere ir, extraña la playa y yo también, pero el Capitán  Arenas nos dijo que por ahora es básicamente imposible viajar hasta allá, estamos a casi dos horas de Culiacán y a casi cuatro de Mazatlán, antes un viaje así lo podríamos planear para un fin de semana y ahora es un viaje suicida.

-Ale, ya llegué  amor, no sabes lo cansada que estoy.

-Me lo imagino amor, mi día estuvo igual, tenemos una presentación para el centro dentro de dos días, nunca pensé que terminaría dando shows para 5
Quinientas personas, para las únicas quinientas que viven aquí.

- Me gustaría que hubieras podido cumplir tu sueños como querías, pero todo esto pasó.

-Lo se pero es lo que nos tocó  vivir, y no me quejo, al contrario estoy agradecida de estar viviendo contigo todo esto, aunque  a veces me gustaría poder salir de aquí.

-Lo sé  necesitamos vacaciones, me gustaría ir a la playa pero ya nos dijeron que no se puede, estoy cansada y con mucho estrés encima, y estoy harta.

-Creo que todos estamos así amor, pero no podemos hacer nada, digo no podemos salir y eso.

-Bueno en realidad si podemos, Mafer me dijo que encontraron un pequeño lago cerca y que el Capitán Arenas les dijo que era seguro ir ahí, nos invitó.

-Me parece una buena idea, ¿Cuándo iremos?

-Pues en dos días, así que prepárate amor, es la primera vez en casi un año que vamos a a salir por diversión.

POV ANA.

El resto de la semana nos la pasamos hablando de ese viaje al que iríamos, bueno decir viaje es algo muy grande por que al lugar al que iríamos estaba a menos de 15 minutos, pero igual estábamos emocionadas por ello, pasar en el encierro un año es lo peor que le puede pasar a las personas, el encierro hace cosas horribles con la mente, y muchos de esos estragos se empezaban a ver en la población del centro, en lo que iba de la semana tuvimos más de veinte reportes de intentos de suicidio, lo cual se estaba volviendo un problema, por eso es que decidieron hacer el área del lago en un lugar seguro, para que la población pudiera salir a distraerse, y los primeros en ir seriamos nosotros, el pelotón de Pineda, Ale y yo. El día por fin había llegado eran las seis de la mañana y yo ya estaba más que lista para salir aunque saldríamos hasta las ocho, nunca  me había levantado tan temprano, pero estaba muy emocionada, levante a Ale, pero ella es de sueño pesado así que decidí intentarlo de nuevo.

-ALEEE!!! ALEEEE!, AMOOORRRRR, YA DESPIERTAAAA!

-Ay Ana, ¿Qué pasa?, ¿Por qué tanto ruido? déjame dormir a gusto.

-No amor ya no puedes dormir más salimos a las ocho y mira la hora que es.- ale vio el reloj para posteriormente matarme con la mirada.

-Ana Cristina, son las seis de la mañana, quedan dos horas.

-Lo se pero necesitamos terminar de alistarnos y además tenemos que reparar comida para llevarnos, no creo que quieras comer la comida militar empaquetada.

-No esas comida no esta para nada buena, mejor vamos a preparar sanwiches.

-Si amor pero ya levántate, si no nos dará tiempo.

-Ya voy, amo verte tan emocionada, aunque me despiertes tan temprano.

Preparamos la comida que nos llevaríamos, y  tomamos las mochilas, eran las ocho en punto y ya estábamos en camión con los demás chicos, y ahí me di cuenta que no era la única que estaba embocinada por salir, también éramos como los conejillos de indias, pero no importaba todos aquí eran letales, estaríamos a salvo si nos manteníamos juntos, viajamos al rededor de quince minutos y llegamos al lago, era algo hermoso de ver tenía mucho tiempo que no veía la naturaleza sin tener miedo de que un infectado nos atacara o sin el miedo de morir de hambre.

-Este lugar es hermoso, hicieron un excelente trabajo limpiando este lugar.

-¿Es normal que llore por ver un paisaje?- dijo Mafer con unas lagrimas en los ojos.

-Yo también estoy llorando, respirar aire fresco es la mejor sensación de mundo. comento Pineda.

-Bueno ya estamos aquí vamos a divertirnos, ¿Trajeron la parrilla?

-Claro que si Ale, vas a armar una carnita asada.

Bajamos las cosas del camión y empezamos a acomodar todo, teníamos sillas plegables y una mesa todo estaba listo para que pasamos un increíble día.

-Bueno yo no se ustedes pero yo me voy a meter al agua.- dijo Tamara.

POV NARRADOR

Los chicos se estaban divirtiendo, tenían mucho tiempo sin comportarse como personas de su edad, tenían apenas dieciocho años, y se tenían que comportar como adultos, todos tenían responsabilidades, pero este día podían volver a ser niños y divertirse sin ninguna preocupación, Tamara fue la primera en meterse al agua, y descubrió que el agua estaba muy fría así que salió corriendo del agua.

  -NO MAMES ESTA HELADAAA.

-Jajajajaj, ay Tamara, que pedo no aguantas nada.

-Muy vergas tú, a ver metete tu Ana.

-Claro ya voy, a mi no me va a dar frío.

Ana corrió al agua y se colgó de una cuerda que estaba amarrada a un árbol, y se aventó un clavado y cuando se dio cuenta de que el agua si estaba fría, solo pudo gritar.

-AHHHHHHH SI ESTÁ FRÍA.

-Jajajajjaja , te lo dije Ana, pero tu nunca me crees.

-Amor si tienes tanto frío mejor salte, te vas a enfermar.

-No, ya estoy aquí, voy a nadar un rato, la verdad después de un rato ya no se siente tan fría el agua.

-Bueno pero si te enfermas yo no te voy a cuidar.

-Si me enfermo si me vas a cuidar porque me amas.

Después de un rato los demás se unieron a Ana en el agua, y jugaron voleibol, cuando les dio hambre salieron para hacer la carne asada, se la estaban pasando bien, y por un momento se olvidaron que estaban en medio de un apocalipsis, y es que después de un tiempo a todo te terminas acostumbrando.

-Oigan ya casi son las seis tenemos que regresar.

-Esta bien Pineda, tú mandas, ¿Subimos las cosas al camión?

-Por favor, Ana me puedes ayudar por favor, hay un tronco que esta tirado y no me deja darme la vuelta con el camión.

-Si, no se si lo pueda mover, pero lo voy a intentar.

Ana jaló el tronco de un lado y si lo pudo mover, así que intento levantarlo y lo logró, Ana en verdad era muy fuerte, y mientras más entrenaba su habilidad más fuerte se volvía, cuando llegaron al centro de nuevo se sentían renovados con mejor animo y con ganas de volver a ir a ese lago.


Espero que les guste este capitulo, ya se que no actualizo tan seguido pero se me había ido la inspiración, y no quería escribirles algo nada mas por escribir así que hasta ahora decidí escribir, les agradezco que sigan mi historia y bueno ya le quedan pocos capítulos.  






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⏰ Última actualización: Apr 03, 2022 ⏰

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