1. Internado Ritmasen

2K 93 10
                                    

Internado Ritmasen, escuela de excelencia, donde prima la disciplina y experiencia. Formamos personas íntegras y futuros líderes mundiales.

Vaya, esa sí que es buena publicidad, nótese el sarcasmo, el panfleto que habían dejado mis tíos en mi habitación no decía mucho más. Tenía bonitas imágenes del internado, su piscina interior, sus salones de clases, el comedor y la biblioteca. Todo se veía realmente precisos, pero es no me decía mucho sobre el internado en sí.

Sabía que quedaba en Copenhague y que hijos de reyes y gente importante iban a estudiar allí, pero no sabía nada respecto de su curricular o de su misión como órgano educativo, ¿qué pasa si esta escuela se enfoca más en el lado científico y yo prefiero el lado humanista? No estoy diciendo que ese sea el caso, solo que me gustaría saber a qué me voy a enfrentar.

—Mírale el lado bueno —me alentó Isa—. Podrías ser como Poppy de Wild Child y encontrarte a ti misma y quizás hasta encontrar amor.

—Primero que todo, no necesito encontrarme a mí misma, sé quién soy, jamás lo he dudado, y segundo, ¿encontrar el amor? Vamos Isa, no digas tonterías.

Isa, mi mejor amiga desde que tengo uso de razón, estaba acostada conmigo en mi cama mirando el techo, era nuestra última semana juntas antes de irme a Copenhague, teníamos que aprovechar estos últimos momentos y qué mejor forma de hacerlo que haciendo nada.

Mis tíos me habían ofrecido matricularme en el internado Ritmasen para que terminara mis estudios. Al principio yo no había querido, como iba a querer si mis amigos estaban acá, en casa, pero después de haberlo discutido seriamente con la almohada y con Isa, había decidido que lo mejor sería que sí asistiera a este internado. Para que de esa forma pudiera empezar a superar el accidente de mis padres, después de todo, estar en la ciudad en la que había sucedido el accidente no me hacía bien.

—Tampoco eres rubia, así que creo que descartamos la posibilidad de que tu estadía se parezca a la de Poppy —giró su cabeza y pude sentir su mirada en mí—. ¿Qué otras historias suceden en un internado?

Nos quedamos mirando unos minutos mientras lo pensábamos, pero no se nos ocurrió nada.

—Está bien, me rindo, por qué no mejor vas y creas tu propia historia, eres la protagonista y puedes hacer lo que quieras.

—Aprecio tus intentos por hacerme sentir mejor, pero no están funcionando —esta vez giré yo la cabeza hacia ella—. Mejor terminemos de ver nuestra serie antes de que me vaya.

Nos levantamos de mi cama, ella fue a la cocina a buscar comida y yo coloqué en Netflix la última temporada de Gilmore Girls, después me senté en el suelo a esperar a Isa.

—Tu tía está preparando esos fritos de patatas que tanto nos gustan, obviamente me quedo a comer con ustedes.

Llevaba solo tres meses viviendo con mis tíos y en este tiempo con Isa habíamos descubierto que mi tía hacía unos fritos de patatas que estaban de muerte. Por lo general yo no era de comer cosas fritas, pero esto era la excepción a esa regla.

—Voy a extrañar la buena comida cuando esté en Ritmasen —todavía no podía creer que me iba a otro país a estudiar.

—Siempre puedes escaparte y comer en algún restaurante.

***

El resto de la tarde pasó rapidísimo, avanzamos cinco capítulos de Gilmore Girls, eso hasta que tuvimos que ir a comer, después vimos dos más e Isa se tuvo que ir, ya que al día siguiente tenía que salir con su mamá a ver unas cosas para un desfile en el que ella participaba.

Una vez que estuve sola en mi habitación, me eché sobre mi cama y me quedé mirando fijamente el techo, ¿por qué a veces la vida tenía que ser tan cruel?

Besos de una mentiraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora