✦•Haru Haru.•✦ (KookTae)

❀ » Décimo séptimo capítulo.

52 días

Me siento preocupado porque Jeon, comenzó con un retroceso con el tratamiento, ni hace el intento de comer, sin contar que se comenzaron a notar cada día más rasguños en sus brazos, me duele que el mánager hiciera algo tan cruel.

Se alejo de mi, no comprendo la razón, aunque a veces me llaman, para calmarlo y brindarle un abrazo, es extraño, pero le gustan, tengo la pequeña teoría de que se siente solo y le dolió que le hablaran de esa forma, porque es directamente alguien que considera cercano.

Al entrar a la habitación, lo veo totalmente cubierto, aunque logro escuchar bajos sollozos, con cuidado me acerco a la cama y dejo mi mano sobre la manta, tomo aire, creo que es hora de hablar.

-Kookie, sé que es difícil, créeme, te comprendo más que nadie -tomo aire para continuar- viví algo similar, a tal punto que intente quitarme la vida, por eso llora todo lo que quieras, no te avergüence, eres humano, tiene derecho de sentir.

Puedo lograr percatarme de como poco a poco me muestra su rostro cubierto de lágrimas, le sonrío e intento prepararme para continuar:

-Yo amaba a mi familia, a tal punto de querer dar todo por ellos, pero me traicionaron, soy homosexual y al enterarse, ellos no lo tomaron bien, me humillaron y comenzaron a insultar sobre mi peso, que nadie querría a un gordo -intento reprimir mis lágrimas al recordar las miradas de despreció por parte de mi madre y hermana-, fue difícil seguir, ya no quería comer y comencé a cortarme, odiándome, pero un día me mire al espejo luego de mucho tiempo y dije, no puedo dejar que la presión social continúe destruyéndome, quien te quiere no te daña. Ese mismo día pedí ayuda en psicólogo, fue un largo proceso, era un niño de 17 años, recién estaba descubriendo la vida, pero me esforcé y gracias a una beca pude continuar mis estudios, no me rendí, aunque me dieron fuertes recaídas.

Intento limpiar mi rostro, ya que notaba como sus ojitos me miraban con algo de pena. No puedo dejar que continúe de este modo, es hora de dejar todo lo toxico en el olvido, merece ser feliz, ya que no es un buena persona y a la gente le gusta dañar a los angelitos.

-Jeon, sufre todo lo que quieras, pero no te destruyas, debes continuar, todo esto luego será un experiencia nueva, no todo en la vida es gris, tú no mereces estar así y aunque nadie de algo por ti, hazlo por tu propia cuenta, busca tu propia felicidad. Eres increíble, créeme.

Limpió algunas gotas saladas y siento como algo me jala, en unos cortos segundo unos delgados bracitos me tenían prisionero.

-Gra-cias por cre-er en mi .

Sonrió levemente muy emocionado, para luego decir:

-Gracias por existir, Kookie.