Cap 17

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" la calma antes de la tormenta "

Sesshomaru sintió su garganta arder cuándo finalmente fue arrastrado por las corrientes subterraneas hasta una pequeña cascada, rodeando firmente la cintura y pegando su fragil cuerpo a la de él, Aome tosio entre jadeos desesperados provocando arcadas, sus dedos se enterraron en el cesped y se arrastro más allá del río a sus espaldas, Sesshomaru la siguió de cerca para luego terminar recostados uno al lado del otro mirando el azul cielo.

-. ¿ Estas bien ?

-. Eso... Creo...¿ y tu ?

-. Hmp...tambien lo creó...

-. Por cierto ... ¿ Donde estamos ?

Lentamente se sento mirando a su alrededor todo le era desconocido pero percibía cierta energia a lo alrededores, el agua chapoteo dejando ver a la sirena recostada en parte en la orilla mirando a la parea con cierto aburrimiento.

-. Eres tu ... ¡ Él que me drogo !

-. Am.. Si, hola.

-. ¿Que quieres ?

Irrumpió la rabieta infantil de la azabache hasta acercarse y ponerse frente a Aome en señal de proteccion, La sirena elevo sus manos en señal de paz a la vez que relajaba su expresión facial, Sesshomaru mantuvo su ceño intimidante y neutral, Aome se sonrojo ligeramente desviando su atención hacia cualquier cosa a su alrededor.

-. Siguen en tierras de mi señora, esposa de vuestro hijo en el futuro .- sincero.

-. ¿ Nuestro...hijo ?

-. ¿ no te lo ha dicho ?

-. No lo recuerdo... No muy bien...

-. ¿ Como volvemos a las tierras del Oeste ? .- gruño interrumpiendo la curiosidad de la azabache.

-. Si siguen ese sendero llegaran al reino animal, por suerte para ustedes, allí existe un portal tiempo que los llevara devuelta a su hogar.

Sesshomaru se giró elegantemente, recogió a Aome y continuó con el viaje por el sendero antes nombrado, mirando por sobre el hombro de demonio, distinguió la figura humanoide uniéndose a otras de sus especies para posteriormente perderse, Aome suspiró acomodadose mejor, el silencio del bosque le era perturbable como tambien relajante aun asi mantenia una neblina en sus recuerdos que le causaban ansiedad, la cual el demonio noto.

-. Habla.

-. Tu... Y yo...

Sesshomaru suspiró deteniendose,alzo una de sus manos a una manzana cerca para retirarla y extenderla hacia la azabache que acepto gustosamente, ambos se sentaron bajo las raices de un gran árbol la brisa era calida lo suficiente para secarlos.

-. Nada es seguro y no quiero ilusionarme.

El dulce sabor de la fruta se convirtió en una agria con esas palabras, su ceño se fruncio y desvío la mirada hacia el paisaje.

-. ¿ ese supuesto hijo ?

-. Tal parece que esas tierras poseen portales del tiempo con diferentes eras.

-. Eso significa que nosotros .- murmuró insegura de sus acciones.

-. No te ves sorprendida.

Aome sonrió con nostalgia desviando su atención a la rojiza manzana de pronto perdio todo apetito para luego extenderselo a Sesshomaru quien la acabó por ella.

-. Como te dije...mi gente y yo viajamos y con el tiempo ves todo tipo de cosas que hacen de esto algo trivial.

-. Descansa...

Corona caídaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora