Corona caída

Cap 34

Sesshomaru había empeorado en cuestión de dos días, las agujas ya no lo mantenian dormido si no que solo empeoraba su agresividad al grado que tuvieron que encerrarlo en un calabozo, claro que provisto de todas las necesidades de un lord.

Susuki miró a su padre atraves de la celda, gruesas barras trenzadas entre sí, runas en cada esquina, sello y talismanes decoraban en su mayoria el nuevo cuarto de Sesshomaru, odiaba verlo de esa forma como en el pasado (futuro para él) cuándo fueron prisioneros de guerra en el fondo de él deseaba que no asociara está medida con aquellos días lo último que necesitaba era que Akatsuki estuviera en peligro peor aún siendo que no podia usar sus poderes y su avanzado embarazo, cerro sus ojos suspirando antes de girarse y alejarse, Darrell lo esperaba en la entrada del calabozo con una mirada tan neutral como siempre, una vez que paso a su lado el infernal de inmediato lo siguió en un silencio cómodo hasta cierto grado, los sirvientes los saludaban a medida que avanzaban por los extensos pasillos hacia su despacho.

-. ¿ Akatsuki no ha terminado su trabajo ?

-. No, sigue descansando .- cerro sus ojos -. Mi Anhelo se siente cada vez mas agotada y hambrienta.

Susuki miro de reojo como los amarillentos ojos del demonio brillaban en molestia tal vez, después de todo Akatsuki era " Su anhelo ". Recuerda cómo un día tuvo un ataque de celos por que Darrell se dirigia de forma tan... Cariñosa a su mujer ( sin mencionar que le decia Dulce a la hermana de akatsuki ) ese día su rosa se rió, ambos estaban en su cuarto despues de una gran ronda de s3x0, ella acarició su torso y le respondió.

" es fácil, todos los hermanos de Darrell que cuidan a los herederos apodan a estos "
" a mi me dice Anhelo por que soy el anhelo que él tanto desea y busca, anhela una vida como la mía "

-. Si estas recordando el pasado tendras tiempo para encargarte de otros asuntos .- gruño.

-. ¿ porque no me dices Anhelo ?

Darrell casi se atragantó con su propia saliva, Susuki volvió en si mismo percatandose de su pregunta, la incomodidad envolvió a ambos una vez que entraron en el despacho, a solas y en privado en el despachó.

-. Me ocupare de los deberes de Akatuki.

-. Me... Parece bien....

Cada uno se fue por su lado después de eso.

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Sesshomaru estaba encadenado a la pared pero con la suficiente libertad de moverse, su cabeza colgaba de su cuello apenas y era consciente del sudor que recorría su cuerpo como de los murmullos que soltaba, su memoria era un caos, tenía tantos recuerdos de su ¿ primera batalla ? ¿ la guerra en que conocio a Aome ? O ¿ la guerra en que la casa Taisho cayó ? Solto un gruñido de dolor cuándo alzo su cabeza, le dolía, le punzaba apenas y podía ver bien pero reconocio con irritación los barrotes frente a él, el suelo de piedra con una alfombra de piel, en si el cuarto estaba arreglado y acomodado para su uso aún así se sintió desorientado.

-. ¿ donde.... ? ¿ Aome ? ¡ Aome ! ¡Cachorros !

Las cadenas sonaron, crugieron y lo sujetaron cuándo se levanto e intento arremeter contra la puerta, sus muñecas fueron dolorosamente cortadas por la insistente fuerza que utilizaba creando hilos de sangre, soltó un rugido lo suficiente fuerte que hizo temblar la infraestructura inferior, pasos, pasos de soldados moviendose a su posición para contenerme hicieron eco en su ya destrozada mente. ¿ Donde estaba su familia ? ¿ acaso ellos...? No...no,no,no.
Intento usar su agudo olfato para encontrarlos pero solo percibió la tenue casi nula feromona de Susuki en la celda como el último en estar allí, ni un solo rastro de sus hijos ni de Aome empeorando su desesperación al creer que había pasado meses u años desde que ellos se los arrebataron.

La celda fue abierta en la que ingresaron soldados y otra figura allí presenté que lo miraba en silencio, su vision era borrosa y muy distorsionada pero aún así nunca olvidaría los cenizas y rubios cabellos de ese demonio que los entregó a la entidad.

-. ! Te mataré juró que lo haré ¡ ¿¡ Donde está Aome ?! ¡¿ mis hijos ?!

Darrell hizo una mueca de desagrado al oirlo gritar tanto detrás de él se hayaban algunos soldados en compañía de sirvientes y curanderos para intentar tranquilizar al descontrolado perro allí, primero debía ser él quien lo inmovilizara para reducir los daños, respiró profundamente antes de moverse con agilidad detrás del Inu para sujetar su cabeza y arremeterlo contra el suelo, creando un cráter.

Darrell sonrió satisfecho por su venganza interna, respiró profundamente acomodando sus ropas con una gesto de su cabeza ordenó a todos a moverse, rápidamente y con bastante agilidad atendieron, sanaron y durmieron a Sesshomaru nuevamente para luego irse, él último en hacerlo fue Darrell quién se aseguró que todos estuvieran a salvo, miro de soslayo al perro inconsciente en la cama antes de irse.

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Susuki bufo impaciente e irritado los documentos se acumulaban cada vez más sobre su escritorio ¿ Como su mujer los terminaba antes de tiempo? Su estado de ánimo cambió notablemente cuándo paso su mirada al otro puesto vacío, una pequeña sonrisa se dibujo en su rostro al recordar la razón de su ausencia, su pecho un cálido sentimiento, sería padre, tendría pequeños cachorros rosados y pálidos entre sus brazos mientras Akatsuki descansaba a su lado, después de un largo día de trabajo materno,plasmó en su imaginación a su rosa con un vientre abultado a días de dar a luz era sin duda una imagen adorable que moría por ver.

-. Hmp....- murmuró perdido en sus pensamientos -. No, ella solo volverá a su trabajo de emperatriz hasta que cumplan la mayoria de edad .- sonrió complacido.

Fue lento y doloroso cuándo una punzada atravesó su pecho provocándole angustia y temor, ahogó un gruñido de desesperación antes de levantarse y llevar su mano hacía su cuello dónde estaba la marca de su mujer, algo le pasaba a Akatsuki para la unión reaccionara asi.

-. Akatsuki...

Habían momentos en su vida en que se sentía perdido, angustiado y temeroso de lo que lo rodeaba como un cachorro pero muchas de esas veces Akatsuki extendía su mano entre toda esa oscuridad para envolverlo en sus brazos ( que pese a ser fríos ) que se volvían cálidos para él, esta era una de esas veces que a medida que corría por los pasillos se sentía asfixiante la interminable extensión, se extraño de no ver a nadie en estos pero lo paso por alto al ver la puerta de su habitación entré abierta y el fresco olor a sangre.

-. ¿! Akatsuki ?!

Susuki Taisho perdió todo rastro de color en su rostro cuándo ingreso en su habitación matrimonial, tembló y se horrorizo con la visión frente a él.

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*Blep ha pasado un largo tiempo desde que he pintado en el pc.
Jsjs T.T