Corona caída

Cap 5

" Bosque llorón "

Los platinados cabellos se resolvieron con fuerza ante la ventisca ocasionando que las orejas se aplanaran contra su cabeza, Inuyasha suspiró, odiaba este día, odiaba la luna nueva dónde pasaba a su versión humana, frente a él se extendió un largo bosque que danzaba conjunto al viento, se vio a si mismo corriendo entre los árboles la desesperación, inquietud y miedo estremeció su cuerpo, los recuerdos de su infancia eran un doloroso recuerdo de supervivencia, maldijo en voz baja pateando el suelo, el campamento se estaba levantando, todos guardaban sus pertenencias y se preparaban para el largo viaje, sus sentidos fallaban poco a poco, su instinto lo alertó de un posible peligro una amenaza latente pero él más que nadie sabia que ese sentimiento de paranoia era el cambio.

-. Tomatelo con calma Inuyasha, yo te protegere.

La cariñosa sonrisa de Kikyo bastó para esfurmar sus temores, junto a esa mujer y su manada estaría a salvo, todos contribuirán para proteger a los híbridos.

-. ¡ No temas bestia ! Que yo también te voy a proteger, dejarle este trabajo a una dama es de mala educación.

La carcajada cargada de burla resono a espaldas de Inuyasha éste respiró profunsamente en un vano intento de calmarse aún así la risa aumentaba en vez de disminuir.

-. Mas te vale que comiences a correr Koga o no tendre piedad contra ti.

-. Eso me gustaría verlo Bestia.

-. ¡ Señores, Señores ! Por favor calma, no hay necesidad de una pelea ahora mismo.... Pero si me lo preguntan, mi humilde opinión esta con el joven Koga.

-. ¡ Ja ! En tu cara Inuyasha.

-. ¡ Maldición ! ¡ Podrían callarse todos de una maldita vez !.

El pequeño grupo rió divertido, Koga molestando a Inuyasha, Miroku insinuandose ante Kikyo y Sango golpeandolo, era tan acogedor verlos interactuar sin prejucios que Sesshomaru sintió incomodidad, desde su altercado con el hibrido y su castigó hasta ahora había tenido una diferente perspectivas de lo que se sentía ser humano y lo tanto que se esforzaba por sobrevivir, todo pensamiento se vio interrumpido por la presencia de Aome sujetando las mano de ambos niños, rápidamente fue acogida por el grupo iniciando otra agradable conversación, en algun momento la azabache desvío su mirada hasta el, Dorado con Café hicieron contacto, Aome se sonrojo.

-. No sabía que te interesaba la señorita Aome.

-. No lo hago.

-. Por como la miras diria que si .- suspiro -. Pero yo me cuidaria de Naraku, es muy cercano a ella y la sobre protege.

-. Dice ser su cortejo.

El silencio de Kaede lo hizo desviarse de su atención para concentrarse en la figura de esta no obstante la piel de orangután blanco se hizo presente ante él, Naraku estaba próximo a su persona mirandolo con una cínica sonrisa de forma inconsciente busco su espada para percatarse la ausencia de esta, aún cuando poseía sus sentidos mas agudos la presencia y mirada del azabache lo alertó, el ojo rojo rió en voz baja antes de pasar a su lado, él caminar de este le decia que algo no estaba bien al igual que con los demas hibridos que tenían un comportamiento errático y temeroso.

Sesshomaru

Apenas era medió día cuándo terminé de preparar los peces, dos abundantes sacos de estos descansaban a mi lado, suspire aliviado limpiando el sudor de mi frente, si fuera demonio esto sería mas fácil y rápido quiero pensar que mi forma humana es un reto para volverme mas fuerte, el pequeño recipiente chocó contra el suelo, Rin sonrió feliz extendiendome pescado con algunas semillas, agradezco con un gesto de la cabeza al recibirlo y comenzar a comer, la niña me hace compañía.