Cap 13

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" Aome "

Un pequeño grupo de exploradores llegó a la entrada de la cueva dónde dieron inició a la escolta hasta el reino vecino de carmín, Kikyo mantenia un rostro sereno pero en el interior estaba nerviosa, Aome no había regresado desde hace dos días, Naraku no dejaba de verla con su mirada fulminante siempre lo ignoraba o lo que mas podía pero sabia que tarde o temprano tendria que afrontar la verdad, aunque su hermano ya estaba al tanto, Kagura sobrevolaba los alrededores protegiendo el extenso campamento que se movía con tranquilidad, el aire era calido casi sofocante, el paisaje se tornaba más anaranjado casi pareciendo otoño maravillandolos, los exploradores portaban el emblema de su Rey y los guiaban con seguridas directo a las termas sagradas cortesía de un arreglo entre hermanos.
Kikyo suspiró apretando la correa del caballo,su mirada se mantenia abajo, la aungustia estaba carcomiendola lentamente mezclado con la carga de conciencia y si ¿ Aome se perdió de regreso ? ¿ habría caído por la tormenta al barrando ? ¿ Fue ataca ? No... Eso... Era poco probable confiaba en que su hermanita estaba sana y a salva en las termas esperando por su regreso, su piel se erizo y sintio un cosquilleo en todo su cuerpo cuándo atravesaron la barre de la proteccion y tiempo, su mirada se dirigió hacía el sendero que habían recorrido, algo la llamaba, tan débil como un susurro agonizante, mordió su labio, el pánico la estaba invadiendo, su pecho se oprimio y dejo de respirar, un nudo nacio en su garganta empeorando su ataque de pánico,sus ojos lagrimeaban ¿ Y si envió a su pequeña hermanita directo a su muerte ?

-. Kikyo.

La voz de Naraku la saco de ese horrible transe, apenas miro a su hermano se lanzó sobre sus brazos llorando, apretó con fuerza sus vestimentas y oculto su rostro en su pecho como cuándo aun era una niña y se refugiaba en sus brazos cada vez que mamá la regañaba, luego llegaría Aome ofreciendole una flor y diciendo cuán hermosa era para luego abrazarla pero esos cálidos brazos llenos de inocencia ya no estaban más por que muy en el fondo sabia que su hermanita se accidentó cuando iba de regreso a ellos.

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Sesshomaru se sentó en su respectivo asiento mirando la gran ceremonia en su honor, todos convivían resaltando sus riquezas y poderes, tan superficial, tan hipócrita como mediocre, una figura alta femina se le acercó con coquetería, la demonesa se recargo a su lado acariciando su brazo, su busto se frotaba con descaro contra su brazo, apretó el descanso del asiento con ira, esa mirada tan cargada se lujuria como deseó de poder le repugnaban, por mas que mirara a cada doncella dentro de allí en ninguna podía distinguir una mirada tan pura y llena de amor, inconscientemente busco a Aome, cuando parecía encontrar a alguien con sus características cualquier cosa, gesto u acción lo traían a la asquerosa realidad, esas demonesas eran rameras, con un gruñido que juraba una muerte lenta u dolorosa empujo a aquella femina lejos de su lado, inevitablemente cayó atrayendo la atención de todos a su alredor sin embargo ninguno pudo mantenerle la mirada, los murmullos se hicieron presenté.

-. Su alteza no se ve bien ¿ Que le habrá ocurrido ?.

-. Fue prisionero de guerra, eso te cambia

-. Yo oí que fue tomado esclavo de salvajes, que verguenza que seres tan inferiores lo superarán.

-. ¿! tal vez fue hechizado ?!

-. ! No digas tonterias ¡ pss acerquense, uno de mis mensajeroa dijo a verlo visto con una humana demasiado cercanos.

-. ! imposible ¡ lord Sesshomaru desprecia a los humanos.

Corona caídaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora