Mi aventura (One Piece)

Capitulo 47

Después de haberse duchado, Andaira se vistió con una ropa diferente y se puso otra túnica de las que había comprado en Nanohana para después perfumarse con el perfume que Ace le regaló antes de salir y seguir comiendo mientras Ace y Sabo se duchaban juntos, tal y como habían hecho hacía más de diez años cuando eran pequeños, desde el comedor se podía escuchar la risa de los dos hermanos. 

Después de haber comido y de haberse duchado los tres salieron de la ciudad montados en el lagarto morado, el cual arrastraba una tabla donde habían colocado varias frutas y trozos de carne y pescado junto a un barril lleno de agua, todo eso se lo habían proporcionado los impostores que se hacían pasar por la armada rebelde.

-¡Si eran ellos! ¡Heeeey! -Ace alzó la mano y la sacudió al aire sonriendo ampliamente, Andaira, quien iba sentada delante de él en el lagarto morado, se tuvo que tapar los oídos mientras hacía una mueca debido a los gritos del pecoso. 

-Pero no hace falta que grites tanto. -Sabo negó con la cabeza sonriendo estando sentado detrás de Ace, quien soltó una pequeña risa al ver como la pelirroja se tapaba los oídos. 

-¡Ace! ¡Sabo! -Luffy, quien había estado caminando junto a sus compañeros, empezó a correr hacia donde ellos se encontraban mientras sonreía de forma amplia. Cuando llegó a donde ellos se encontraban el lagarto paró de correr y los que iban montados en el se bajaron mientras sonreía al chico del sombrero de paja. -¿Qué demonios es eso?

-Bueno bueno, dijeron que venían los piratas de la arena, pero al final erais ustedes. -Ace se acomodó el sombrero en la cabeza y sonrió de forma amplia mirando a su hermano pequeño.

-¡Andaira-chaaaaan! -Sanji se acercó corriendo a la pelirroja con una gran sonrisa en los labios, detrás de él se vio como venían sus compañeros, aunque estos no corrían. -¿Qué tal estás? ¿Quieres agua? ¡Que olor más agradable!

-Hola Sanji. -La pelirroja soltó una pequeña sonrisa al ver como el rubio olfateaba el aire a su lado intentando disfrutar lo máximo posible el dulce olor de su perfume de lavanda y ella no podía culparlo. Todos estaban sucios y sudados después de caminar por el desierto por varios días, seguro que un olor como el de su perfume debía de ser reconfortante. -Estoy bien, venimos de aquella aldea. Mirad lo que os hemos traído. 

-¡Agua! -Luffy y Chopper corrieron hacia la tabla donde se encontraba la bebida y la comida que habían traído para poder beber del agua que había en el gran barril. 

-Muchas gracias, Andaira-chan, Ace, Sabo. -Sanji sonrió de forma tranquila observando todas las cosas que habían traído, con eso y con la carne de lagarto que habían conseguido hacía un par de días podrían comer y sus compañeros no tendrían que pasar hambre. 

-Parece que no tendremos que preocuparnos por la comida en un tiempo. -Zoro, quien estaba detrás de Sanji, sonrió de forma leve observando toda la comida que había, aunque hubiera agradecido algo de Sake. 

-Sois geniales. -Usopp miró algo impresionado a los hermanos de Luffy. Sabo sonrió de forma tranquila a los compañeros de su hermano y después giraba la cabeza para observar a Luffy y Chopper. 

-Chicos, sé que tenéis sed, pero hay que racionar el agua. -Al escuchar a Sabo decir esto Luffy frunció el ceño de forma leve mientras se separaba un vaso de los labios. 

-Pero tengo mucha sed Sabo... Y ahora tenemos mucha agua. 

-Pero aún nos queda mucho para llegar a Yuba, debemos de guardarla bien. -Nami puso los brazos de jarra observando a su capitán con una expresión seria, Zoro asintió de acuerdo con ella. Luffy y Chopper soltaron un pequeño suspiro y se separaron del agua algo cabizbajos, lo que sacó una pequeña sonrisa por parte de Andaira.