Capitulo 48

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Después de hablar un poco más con la tripulación de Barba Blanca y de haberles contado acerca de Luffy y su tripulación, Ace y Andaira fueron a comer junto a los demás cuando Sanji terminó de preparar la comida. 

-¡Quiero más! ¿Dónde está mi segundo plato? -Luffy alzó su plato y su tenedor y empezó a golpearlos para hacer más ruido. -¡Quiero m...!

-Ya basta de su egoísmo de mierda. -Sanji, quien había plantado su pie en la cara de Luffy, miró con seriedad a su capitán. -Eso tenía calorías suficientes. 

Después de que el cocinero dijera estas palabras y aún teniendo el pie de Sanji en su cara, Luffy estiró sus dos manos hacia los platos de Ace y Andaira para coger unos trozos de carne que estos aún tenían en su plato. 

-¡Luffy maldito! -Zoro giró la cabeza para observar a su capitán con enfado, Andaira por su parte desvió la mirada de donde Ace y Sabo estaban sentados, en la cima de una de las montañas rocosas, para observar a Luffy al ver de reojo como le robaba comida. -¡No le quites comida a los demás!

-¡Maldito! ¡No le quites comida a Andaira-chan! -Sanji retiró la pierna de la cara de Luffy dispuesto a darle otra patada, momento el cual el pelinegro aprovechó para llevarse la comida a su boca y después estirar la cabeza hacia atrás para esquivar la patada de Sanji aún con la boca llena. 

-¿Por qué cada comida tiene que acabar así? -Vivi observó la escena con una pequeña sonrisa nerviosa observando como Sanji y Zoro intentaban golpear a Luffy, quien los esquivaba mientras tenía las manos sobre su boca intentando no expulsar la comida. 

-Ni los mires, pasa de ellos. -Nami suspiró de forma lenta mientras comía con los ojos cerrados. 

-Mira, Ace-san y Sabo-san ya terminaron de comer y están limpiando su tenedor y su plato. -Nami abrió los ojos y pasó la mirada a donde se encontraban los dos hermanos, quienes limpiaban los utensilios con un paño mientras hablaban sobre algo en un tono bajo mientras observaban la escena protagonizada por Luffy. 

-Oye, tienes razón. Son muy diferentes a Luffy. -La princesa asintió con la cabeza ante las palabras de la navegante sin dejar de observar a los dos hermanos. 

-¡Devuélveme la comida! -Zoro, quien había conseguido acorralar a su capitán contra una roca, estaba estirando los mofletes de Luffy, quien ya había conseguido tragarse la comida que había robado. 

-¡Oblígame! -Al escucharle decir esto el espadachín estiró aún más los mofletes de su capitán, haciendo que este cerrara los ojos molesto. 

-De verdad Sanji, no tenía más hambre, no hace falta que cocines más ni que te pelees con Luffy. -Andaira por su parte había tenido que parar al cocinero, quien había dado un par de patadas a su capitán enfadado por que le robara la comida a la pelirroja.

-Bueno, creo que deberíamos continuar. -Nami se bajó de donde estaba sentada y se acercó a todos sonriendo, pero al ver como Zoro seguía peleando con Luffy la navegante no pudo evitar fruncir de forma leve el ceño, cansada de escuchar sus gritos y de verles pelear, Nami se acercó a ellos y dio un puñetazo a cada uno para que así parasen. -¡Dejen de joder! Ahora estamos listos para ir a Yuba, así que ayuden a recoger y no se peleen por idioteces.

Andaira observó a Nami aguantando la risa, había bastado con un golpe de la pelinaranja para dejar a los dos más fuertes de la tripulación sentados en el piso y sobándose la zona en la que habían sido golpeados. Pero algo llamó la atención de la pelirroja, y fue ver como un trozo de carne que había sobrado del plato de Usopp empezaba a levitar. 

-¡Increíble! -Luffy, pasando de la reprimenda de Nami, observó con los ojos llenos de emoción como el trozo de carne se alzaba. 

-¡Oh no, nos vio! -Todos giraron la cabeza hacia donde se encontraba el trozo del carne, desde esa dirección se había escuchado una voz aguda decir esas palabras. -¡Rápido hermano!

Mi aventura (One Piece)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora