Amelie siempre había oído, leído e incluso escrito, que despertarse con un mensaje de la persona que te gusta era algo maravilloso. Pero hasta ese momento, no lo había experimentado nunca.
—¡Deja de sonreír tonta! — Se reprendió a sí misma. — Te estás haciendo demasiadas ilusiones, apenas le conoces.
Después de un patético bailecito por la emoción, incluso sin salir de la cama, se relajó un poco y se centró en el mensaje. Por favor, era demasiado temprano para esas cosas.
Nick: Primero que nada, gracias por enviarme esas preciosas pruebas, me preocupaba un poco estar hablando con la Amelie equivocada. Aceptaré encantado más evidencias que demuestren que eres la verdadera, ya sabes... para estar completamente seguro y quedarme tranquilo.
Nick: Me alegró mucho también de que aceptes ese té, aunque solo sea para conseguir información sobre Marte. Te prometo que te será útil, es más, te redactaré un informe detallado para que te lo lleves a casa y puedas consultarlo cuando lo necesites.
Nick: Entiendo que te preocupe un poco que todo se haya dado tan de prisa, también a mí me intimida un poco, aunque también estoy deseando que llegue el día. De todas formas, no pienses más en ello de momento, porque estoy fuera y tardaré al menos un par de semanas en volver, por desgracia.
Nick: Adivina donde estoy...
¿Podía alguien ser más bonito, amable y simpático que él? Pensaba Amelie mientras releía los mensajes y miraba con cara de tonta, la foto que le había enviado.
Sonó la alarma de su teléfono recordándole que tenía que levantarse y comenzar definitivamente el día. Para empezar, subir a su cuenta de Instagram un vídeo que había hecho la noche anterior con Emma y luego una reunión para desayunar con su agente.
Pero primero lo primero, responderle a Nicholas, así luego no se le olvidaba. Claro, como si eso fuera posible...
Amelie: ¡Wow! ¿Eso es Grecia? No es Marte, pero aun así es bastante lejos. Nunca he estado allí ¿Es bonito?
Amelie: Me parece perfecto lo del informe, así puedo leerlo varias veces antes de decidir dejar el planeta definitivamente. Lo cierto es que empiezo a tener dudas sobre irme a tanta distancia, he descubierto que la tierra todavía puede darme sorpresas de las buenas. Además, empiezo a superar mi ataque de vergüenza por haber quedado en ridículo con un famoso, resulta que él es bastante simpático.
Envió el mensaje y dejó de darle vueltas a lo que había escrito. Tenía que dejar de repensarlo tanto, no podía pasarse lo que parecían siglos, decidiendo que poner cada vez que tuviese que responderle algo.
Un par de horas después estaba comiendo con Shondra, su agente, e intentando procesar lo que esta le estaba contando. ¿Cómo podía ser?
— Bueno cielo, en unas semanas quieren presentarte al que será Steve Russell. — Le dijo mientras comía.
Estaba demasiado seria. Esa era una buena noticia y por alguna razón la mujer no parecía muy emocionada, aunque intentara disimularlo. Algo estaba sucediendo y Amelie empezaba a temer que no le gustaría.
— ¿De verdad? ¡Pero eso es genial ¿no? ¿Ya te han dicho quién es?
— No, aun no se lo han dicho a nadie. Tienen miedo de que pueda filtrarse antes del anuncio oficial.
— Ah, que misteriosos. ¿Nosotras lo sabremos antes del anuncio oficial?
— Sí, necesariamente. — Shondra se acomodó mejor en la silla. ¿Qué estaba pasando? — Verás, quieren que tú hagas una especie de "anuncio oficial" en tu cuenta de Instagram. Antes de empezar a lanzar ellos todas las campañas de publicidad que tienen preparadas.
— ¿Qué? ¿Yo? ¿Por qué? No tiene mucho sentido.
— Bueno, han visto toda la expectación que se creó con Nicholas Collins y se dieron cuenta de que tienes bastante popularidad entre los fans. Quieren aprovecharlo para darle protagonismo y notoriedad a la película.
— Eso no es todo, ¿verdad?
— Me temo que no, cielo... También quieren que hagas varias apariciones públicas con el actor, como para demostrar tu apoyo al cast. Es decir, que des a entender que apruebas su elección.
— ¿Qué? No, no pienso hacerlo. — Dijo categórica. — Puedo plantearme hacer el anuncio en mi cuenta, pero no salir con él. Me parece una tontería, además, no soy tan famosa como para que eso tenga alguna importancia.
— En eso te equivocas. Esta gente no deja las cosas al azar, lo han analizado todo. Aunque a ti te parezca que no tiene importancia, tus lectores te siguen mucho y muy de cerca, así que lo que tu digas puede influenciar para bien o para mal en ellos y por tanto en las ganancias de la película. Quieren tener eso controlado.
— Me da igual, no pueden obligarme a hacerlo. Subiré una foto de él, diré que me encanta o algo así y ya está.
— Me temo que, si pueden obligarte, está en el contrato que firmamos. — Contestó Shondra apenada, por no salvarla ni ayudarla en esa situación que sabía de sobra que le desagradaba. — En resumen, dice que tienes que apoyar las elecciones de publicidad como ellos decidan. Lo siento cariño, sabía lo que eso significaba, pero nunca pensé que se les fuese a ocurrir algo así. Creí que te harían poner fotos, llevar alguna camiseta tonta o decir que viste la película y te gustó mucho, no lo sé, cosas así, sencillas.
— ¿Me estás diciendo que tengo que salir con ese señor, sea quien sea?
— Sí. Primero tienen que hacer juntos un vídeo simpático de esos tuyos para presentarlo y luego unas cuantas apariciones. Ya sabes, una comida, algún evento social, ese tipo de cosas. — Volvió a disculparse sosteniendo la mano de Amelie. — De verdad que lo siento mucho cielo.
— No pasa nada Shondra ¿Quién se iba a imaginar que saldrían con algo así? — Aceptó tratando de sonreír, no quería que la mujer se sintiera todavía peor al verla mal. — ¿No se puede hacer nada?
— No, he intentado varias cosas, pero no funcionaron. Está establecido firmemente en el contrato. Tal vez sea un chico simpático, incluso el mismo Nicholas, ¿no crees? — Comentó intentando animarla.
— ¿Nicholas? ¿Por qué lo dices?
—No lo sé, lo estuve pensando y se me ocurrió que tal vez por eso él empezó a hablarte. Para que luego no fuera tan de repente o se viera raro.
— ¿Crees que Nicholas se acercó a mí por eso?
— Tal vez, o a lo mejor solo estoy tergiversando todo. Eres una mujer encantadora, sería totalmente normal que se sintiera atraído por ti. Pero es que justo ahora... no losé, hace que se levanten mis sospechas.
— No puedo creerlo...
Amelie se tapó la cara con las manos y se apoyó en la mesa intentando procesarlo todo.
¿Tenía razón Shondra? ¿Nicholas sólo había mostrado interés en ella por eso? ¿Por un estúpido contrato de publicidad?
Para colmo tendría que lidiar días, tal vez incluso semanas, con él y esas dichosas exigencias del contrato. Ella no era famosa, por favor, apenas tenía un grupo de seguidores, que eran más bien como un grupo de amigos y amigas a quienes les gustaban sus libros.
Y pensar que se había puesto súper nerviosa esperando cada mensaje de Nicholas. No podía sentirse más tonta ni siquiera, aunque lo intentara.
¿Cómo se le había ocurrido que algo así podría ser real? Por Dios, pero si podía tratarse del argumento de cualquiera de sus libros. Ese tipo de cosas no suceden en la vida real y mucho menos a chicas normales como ella.
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¿Me voy a Marte o me quedo contigo? [COMPLETA]
RomanceAmelie Lennox es una escritora novel a la que gusta estar muy cerca de sus lectores y compartirlo todo con ellos y con su amiga Bris, claro. Todo funciona genial en su vida, hasta que conoce a Nicholas Collins, una sensación en Hollywood y el hombre...