¡OH! Andrés © [PAUSADA]

➿ Capítulo 14 ➿

➿ Reingreso al trabajo ➿

Alerta+🔞

17 Noviembre

¡Joder!

Ya voy tarde

Salí de la universidad sin siquiera despedirme de los demás, corrí hasta la parada del bus y justamente el mismo cerraba sus puertas.

Mierda

—¡Oiga! Señor —grité y justo antes de arrancar, las puertas se volvieron a abrir. Subí sin tardar y el chofer me observó coqueto. ¡Puaj! —Gracias —murmuré con asco al sentir su mirada recorrer sin vergüenza todo mi cuerpo. Sonrió pícaro y me observó el busto sin descaro.

Le pagué el pasaje y avancé por el pasillo, con la mirada logré ubicar un puesto disponible al final del bus y me senté en el. A mi lado había una mujer con su hijo, quién lloraba sin razón aparente y la mujer lo regañó. Rodé los ojos al escuchar el llanto del niño aumentar, lo cual aumentó mi mal humor.

Primero el profesor de arte, llega tarde y hace un exámen sorpresa, el cual espero haber pasado; luego mi jefe me llamó para decirme que debo entrar antes al trabajo, pero salí un poco tarde de la universidad debido al exámen y mi jefe ya está malhumorado por mi tardanza, y ahora este niño anda llora que llora.

Mi día perfecto

Media hora después, el bus se detuvo cuando se lo pedí y frente a mi se encontraba el edificio Diseña Sueños. Corrí al interior sujetando mi mochila al hombro, evitando que se me cayera debido a la corrida. Al llegar al recibidor, pasé mi carnet de identificación por el lector y la pequeña puerta se abrió. Hice la pequeña fila de personas que esperaban por subir en el ascensor. Al menos no eran muchos, sólo seis personas.

Cuando el ascensor llegó, todos nos adentramos y pulse el botón del número quince, es decir, el piso presidencial. Al llegar a ése piso, el ascensor volvió a abrir sus puertas y dos personas junto a mi, salimos. Entré rápidamente a mi oficina, sí tengo una y con vista panorámica; y justamente al entrar, mi jefe hizo su acto de presencia.

Carajo

—Querida Katerina, llegas una hora tarde, ¿No me explique bien cuando te llamé? —trague nerviosa al sentir su mirada interrogante.

—Señor Versteeg, lamento mi tardanza, pero no contaba con que tendría un exámen sorpresa, no volverá a pasar —prometí y espero poder cumplirlo.

—Está bien, te lo dejaré pasar porque estás de reingreso, los estudios para ésta carrera son muy arduos y lo entiendo, yo también pasé por ello, pero no quiero que se vuelva a repetir —asentí —Si te llamé de regreso es porque realmente te necesitamos aquí, aún eres estudiante, pero tienes un gran talento y trabajas muy impecable —sonreí para mis adentros.