Nos Pertenecemos©

7.- Presente

Canción: The Same - Ashe

ÉDGAR

Finalice el cuento, ya estaba profundamente dormida, le dí el beso de las buenas noches y con cuidado la arrope, encendí su lámpara de unicornios tenía poco que dormía sola y está era nuestra rutina.

Estaba agotado pero aún tenía trabajo por revisar, a pesar de recuperar la relación con mis padres seguía trabajando con mi suegro, Jade heredaría la empresa a su debido tiempo, al morir paso a mi hija y mientras crecía estaba a cargo.

Resignado arrastre mi trasero hasta la oficina que tenía en casa, el lugar tenía un liberó del lado izquierdo junto al ventanal, del lado derecho dos sillones negros de dos plazas y en el centro un básico escritorio con mi laptop.

Me senté detrás del escritorio y observé los portaretratos que lo adornaban, una foto de mi pequeña sonriendo y llena de pastel, la tomé cuando cumplió un año, otra del día de mi boda la tomé y observé nostálgico.

- No hay día que no te extrañe y nos hagas falta - murmuré, mientras recorria con mi dedo la silueta de mi esposa.

Una pareja feliz y sonriente posaban frente a la cámara, quisiera regresar el tiempo.

Casi cinco años de su muerte y dolía como el primer dia, me refugie en el trabajo y en cuidar de Taiyari que era mi prioridad, siempre encontraba tiempo para estar juntos.

Tai cada día se parecía más a su madre, con esos expresivo ojos verdes, cada que la veía podía notar que una parte de Jade viva en ella, los recuerdos Invadieron mi memoria y sentí cristalizados los ojos.

El celular sonó regresando me al presente, el nombre de mi madre iluminó la pantalla.

📱 Hola cariño, ¿te desperte? - pregunto.

📱No, aún estoy trabajando.

La conocía lo suficiente para saber que sus llamadas, siempre tenían una intención.

📱¿Cómo está mi nieta?.

📱Bien, ¿a qué debo tu llamada?

📱 Tú padre y yo queremos que vengan mañana a comer, hace mucho que no nos visitan.

📱 Mañana tengo un día complicado y Tai se irá de fin de semana con Julia y Víctor.

📱 Entiendo, ¿estarás solo el fin de semana?.

📱Eso parece, ¿porqué no vienen ustedes a comer?.

📱 Otro día será, no queremos incomodarte.

Colgó, decidí no perder más tiempo y ponerme a trabajar, era casi media noche cuando regrese a mi habitación, después de ponerme la pijama me acosté y me quedé dormido.

La alarma me despertó, perezoso me levanté y fuí directo al baño, después de bañarme regrese a la habitación, encontrándome a una pequeña pelirroja recostada en mi cama viendo caricaturas.

- ¡Hola papi! - dijo al verme.

- ¡Buenos días, princesa! - respondí, mientras me acercaba a ella.

La tomé en mis brazos y le llené el rostro de besos, comenzó a moverse inquieta mientras reía, estos pequeños momentos alegraban mis días.

- ¡Basta papi!, ¡me haces cosquillas! - dijo aún riendo.

Le dí un último beso en la frente y la regrese a la cama, terminé de vestirme debia cambiarla y organizar una pequeña maleta, para su viaje de fin de semana a la casa del lago.

Una vez listos fuimos a la cocina a desayunar, nana era quien preparaba la comida, desde que mi esposa falleció se ha convertido en parte fundamental de nuestras vidas.

Estoy seguro que sin su apoyo no hubiéramos sobrevivido, acomode a Tai en uno de los taburetes de la barra, para ayudar con el desayuno a nuestra nana.

- ¡Buenos días Alicia!, Que bien huele - saludé y besé su mejilla.

- ¡Buenos días, mis niños! - respondió alegre y colocó los platos en la barra - ¡Hora de desayunar!.

Taiyari no dejaba de platicarnos todo lo que hacía en el kínder, además de demostrarnos que ya sabía contar del uno al diez sin equivocarse.

Me sentía orgulloso y también nostálgico estaba creciendo muy rápido, en una semana cumpliría cinco años, el loco de su tío Erick con la ayuda de Julia estaban planeado la fiesta, según él superaría a las anteriores.

No se sabía con exactitud a qué se refería, le agradecía el apoyo pero siempre terminaba exagerando, Gael tampoco se quedaba atrás, desde que Tai nació le pidió a su madre hacer una colección exclusiva para niños la musa fue mi hija.

A pesar de los años siguen compitiendo por ser el tío favorito, ella los ama con todas sus locuras, durante este tiempo se han mantenido al pendiente de nosotros más que amigos son familia.

El timbre sonó y Alicia fue abrir, baje a Tai para que fuera a lavarse los dientes mis suegros entraron y los saludé, mi hija se despidió la envolví en un enorme abrazo y llené de besos estaría dos días sin ella.

- No me extrañes, te quiero papi - dijo mientras salía de la casa, tomada de la mano de Julia.

Se despidió de Alicia con un gesto de mano, Víctor la acomo en el asiento para niños, el auto arranco y minutos después los perdí de vista.

Le comenté a Alicia que estaría en mi oficina, quedo de avisarme cuando la comida estuviera lista, agradecí y entre a mi espacio comencé por revisar unos contratos.

Al medio día recibí una llamada de mis suegros avisándome que habían llegado, mi hija estaba emocionada y feliz, me despedí para seguir trabajando.

Estaba leyendo unas propuestas y no me dí cuenta de la hora, tocaron la puerta e indique que pasarán, Alicia se asomo e indicó que era hora de comer, asentí, ordene un poco antes de salir.

El timbre sonó fui abrir y me encontré con una desagradable visita.

- ¿Me extrañaste amorcito? - pregunto Regina con su irritante voz.

Que valor tenía para reaparecer después de lo que hizo.

- ¿Que estás haciendo aquí? - dije entre dientes molesto.

- ¿No te da gusto verme? - pregunto coqueta.

Vaya cinismo.

- Esperaba nunca volverte a ver... ¡¡Lárgate!! - respondí molesto.

Hacía un enorme esfuerzo por controlarme, por mucho daño y dolor que me haya causado sería incapaz de lastimarla.

- Me iré por ahora - se acercó y hablo sobre mis labios - No me rendiré fácilmente.

Dió media vuelta y subió a su auto, cerré la puerta de golpe y estrelle mi puño en la pared más cercana, maldita la hora en la que me involucre con esa mujer. ¿Cómo se enteró que estaba en casa?, Mi madre era la respuesta.

Yuritzin PM