Tres dias después, viernes 25 de octubre...
—¡No quiero estar aquí!— chilló Melissa mirando a su madre y a Chris. —Quiero irme a casa—.
—Hija, entiendo que estés molesta, enojada, pero vas a tener a tus bebés, ponte feliz por eso, ya casi es hora— comentó su madre con toda la emoción en su voz, iba a convertirse en abuela, por primera vez.
La rubia ya se encontraba en la clínica privada, debido a que las contracciones aumentaron y en cualquier hora podría romper bolsa. Los gemelos ya estaban listos para salir, faltaba que la rubia quiera estar lista.
—¡Estoy feliz! Pero, no quiero estar aquí, Katie aún está en esa cárcel— excusó la rubia, había hartado a su pareja con Katie, la rubia se despertaba y pum, Katie. Comía y pum, Katie, dormía y pum, Katie.
Chris salió de la habitación sin decir una palabra, estaba intentándolo todo para que la rubia estuviera bien, pero no era suficiente al parecer.
—Melissa, no eres la única que está mal. Tu papá ahora se está ocupando de Katie. Estás dañando a otros sin darte cuenta, con tanto berrinche—su madre también salió de la habitación, eso dejó pensando aun más a Melissa.
Ella no quería aceptar la probabilidad de que Katie se pierda el nacimiento de los bebés, pero vamos, el dia que las personas aprendan a aceptar y no a esperar, definitivamente serán menos las decepciones que se cause.
Después de almorzar, la rubia comenzó a sentir un dolor nunca sentido, se había levantado para ir al baño y su madre la ayudaba.
—Melissa...¿no aguantaste?—preguntó Julie observando el suelo, el liquido amniótico se encontraba cayendo de la intimidad de la rubia.
—Mamá, los bebés— susurró Melissa. —¡Los bebés!— gritó y Chris entró corriendo a la habitación debido al grito.
—¿Qué paso?— preguntó él mirandolas.
—Rompí.... Rompí...bolsa— dijo Melissa sin poder creerlo.
—Ve por la doctora Chris, rápido— dijo Julie mientras ayudaba a caminar a Melissa de nuevo a la cama.
—¿Vamos controlando las contracciones?— la rubia habló y su madre asintió.
—Si, 3 de 5 segundos cada 30 minutos— dijo su madre, si mal no recordaba así iban. Pero aun faltaba tiempo para comenzar con el parto.
—Estoy aquí. ¿Cómo va?— preguntó Georgia mientras entraba en la habitación y vio a Melissa con cara de sus parada.
—Rompí bolsa, yo... rompí bolsa— luego de decir eso, otra contracción atacó a al rubia.
—Oh bien, respira, ya sabes, respira.— luego de que pasara la contracción la doctora llamó a su equipo de enfermeras.
—Ahora vamos a higienizarte y evitar que tengas una infección por el derrame del líquido amniótico, todavía no iniciaremos con el trabajo de parto debido a que tus contracciones aun son demasiado cortas.— explicó la doctora muy tranquila y Melissa asintió.
—Voy a necesitar que esperen afuera, por favor— pidió la doctora, tanto Chris como Julie salieron de la habitación, para comentarles a Jess y a Kristi lo que estaba sucediendo, ellas esperaban afuera.
Comenzaron ayudando a Melissa a cambiarse de ropa, le pusieron una bata nueva.
Anteriormente ya la higienizaron en toda su zona intima, ahora debían asegurarse de que no se le genere ninguna infección, para esos las enfermeras estaban ahí, mientras la doctora iba haciendo anotaciones.
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Mi dulce salvación- Meltie
FanfictionRememoradas dichas y bellezas que se hicieron amar fervientemente han llegado en el tiempo confidente a parecerse a próximas tristezas... Logrará Melissa sanar sus heridas del pasado contando con el apoyo de su mejor amiga Katie? Quien detestaba a...