43 "I didn't think you would come back"

2.4K 175 291
                                    




La relación entre madres e hijas es un lazo que se nutre de la complicidad y la fortaleza. Pocos vínculos pueden ser tan intensos y complejos a la vez como el de esa mujer que educa a su niña deseando ser su pilar cotidiano, su refugio, su cómplice, pero a la vez esa figura capaz de ofrecerle libertad para que encuentre su propio camino, el que ella desee.

Tener una hija es un regalo, un tesoro valioso al que ayudar a crecer, a madurar en libertad y felicidad, porque ser madre de una niña es descubrir fortalezas que no sabíamos que albergábamos...

Existen muchos tipos de crianza y todas ellas se basan casi siempre en el estilo educativo de las propias madres. Las hay controladoras, narcisistas, asfixiantes, hiperprotectoras...pero también las hay maravillosas, que favorecen al adecuado crecimiento emocional de esas niñas que pueden ver en sus madres un referente al que imitar, en que apoyarse para ser parte del mundo el dia de mañana.

Katie es una de esas madres, quería que su hija avanzara en plena libertad en su vida.

Fallon había llegado a su vida el 20 de septiembre del año 2021. La irlandesa había decidido convertirse en madre, no tenía mucho que pensar tampoco. Lo que le sobraba era amor, y debía darlo, su vida en Irlanda iba de lo mejor, por eso llevó a cabo una inseminación artificial, no se tardó mucho con el tema del papeleo, solo debía escoger a un donante de espermatozoides.

Una vez lo escogió, comenzó el trayecto hasta el dia en que la prueba de embarazo salió positiva. La felicidad que emanaba de Katie, no la tenia hace varios años, definitivamente, convertirse en madre había sido la mejor decisión que pudo tomar en toda su vida.

El embarazo de la irlandesa se conoció públicamente luego del nacimiento de la bebé.

Al dejar Canadá, Katie había dejado todo allí, perdió contacto con Melissa y la mayoría de las personas que la rodeaban, menos Chyler, era la única que mantenía contacto con la irlandesa, como le había prometido, siempre le enviaba videos de sus sobrinos, haciendo que Katie se sintiera mejor sabiendo que ellos estaban bien, pero la que no estaba nada bien luego de su partida era la rubia, claro que la irlandesa no lo sabía.

Melissa había asistido a terapia durante tres años seguidos, para poder recuperarse completamente de todas sus dificultades. Fueron sesiones interminables hablando sobre sus verdaderos sentimientos, sus verdaderos problemas... fue diagnosticada por su terapeuta, había padecido de un trastorno depresivo severo, también del trastorno de ansiedad por miedo al abandono y estrés postraumático, sin contar distintos temas del pasado que había sufrido y los había afrontado apenas hace un tiempo. Ahora, con la muerte de su padre, ya había agendado una cita con su terapeuta, ansiaba contarle sobre el regreso de la irlandesa, quería recuperarla, quería hacer las cosas bien, ya que no pudo desde un principio. Y ahora, con Chris fuera de su camino, no tenía problema alguno en intentar enamorar otra vez a Katie.

La rubia se había divorciado dos años después de casarse con el pelinegro, lo había encontrado siéndole infiel con una compañera de su trabajo, no le importó para nada, pero fue la excusa perfecta para acabar con su terrible relación y matrimonio, asi nadie la juzgaría, no a ella.

Sus hijos crecieron con ella, claro que ven a su padre cuando él está en la ciudad, pero si algo les sobra a Eliza y Ellie es amor, reciben amor por parte de todos. Tambien, se mudaron de su antigua casa a un edificio donde cabían perfectamente ellos tres, y el lugar donde ahora viven en Canadá, tenía un significado especial para Melissa.

Los hijos eran lo más importante que tenía cada persona, al menos para ellas, también cuidaron de su fundación, si bien Katie seguia siendo la fundadora y se fue, nunca descuidó su proyecto, el hermano de Melissa estaba a cargo de todo, claro que continuó asi, ya que es muy bueno en lo que hace.

Mi dulce salvación- MeltieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora