Inhalando El Mismo Humo

T R E I N T A

Advertencia :Este capítulo contiene escenas +18.

JEAN'S POV

Estaba mojada, su pelo, lo que veía en sus pechos, sus pies, su piel se alumbraba con cada gota.

Ella estaba hermosa hasta sin maquillaje.

Cuando tomé mi shot, cerré la puerta deje la maleta en la silla el pequeño vasito en una pequeña mesa que había en la entrada y me senté en la cama.

-Estás muy sudado ¿ piensas bañarte cochinito? - dijo burlándose.

-Claro, yo espero a que salgas y entro yo.

-¿Estás seguro?- Y la única toalla que tapaba su hermoso cuerpo cayó al suelo, se volteo y fue hacia la ducha y la abrío, yo aún podía observarla desde la cama.

Sus pechos, monte de venus y nalgas eran una obra de arte, eran lo que necesitaba y quería.

Me quité todo rápido y quedé desnudo, ella me vio acercarme y rió emocionada, el tequila ya había subido, estaba feliz y emocionado.

La abracé, y me metí en el agua, cada gota que pasaba por su piel la miraba caer despacio, cada lunar, vello, grano, todo. Cada detalle lo miraba por más pequeño que fuera.

Abrí un jabón que había del hotel y empecé a estregarlo en su cuerpo, sus brazos muslos, espalda, torso.

Cuando iba por la espalda ella se arqueó quedando de espaldas a mí, yo solo tenía un hermoso paisaje en frente a mi, sus espalda y nalgas tocando mi piel el momento era perfecto, luego ella hizo lo mismo conmigo.

Era el momento, ella lo quería.

Empecé a tocar sus pechos y besar su cuello por detrás.

Bajé mis manos por su abdomen con delicadeza hasta llegar a su entre pierna ella las abrió, ella quería.

Puso su mano encima de la mía haciendo presión. Se arqueó y empezó a hacer pequeños gemidos.

Recordé cuando ella dijo que le gustaba que fueran controladores a la hora del sexo, así que decidí agarrar su cabello mojado desde la espalda y lo baje, su cabeza quedó al contrario de la mía.

-Eres mía - dije en todo de orden.

-soy tuya-dijo gimiendio.

No lo pensé dos veces, cerré la ducha y la lleve a la cama alzada.

Ya había visto todo de ella, ya esa desconfianza que tenía ella de mostrarme su cuerpo desapareció.

Apagué las luces solo dejé una encendida, se que así estaría más cómoda.

Cuando voltee a mirar sus piernas estaban totalmente abiertas, me estaba mostrando todo, no me resistí y solo disfrute de su sabor, de sus labios, de ella.

Ella gemia, me gusta hacerla sentir bien, así duramos varios minutos, no me cansaba de una y otra vez pasar mi lengua por su clitoris, la sentía muy mojada.

Ella apretaba mí cabeza contra ella.

-Je... Jean ahhh espera- hala a las sábanas.

-Sabes delicioso - dije sin parar mi lengua.

-No aguanto metelo, por favor, te lo ruego- dijo desesperada

Fui rápidamente hacia una de mis maletas, saqué un Condón, ella no dejaría que lo hiciéramos sin protección, se que no es lo mismo, pero quiero que este segura.

Ella se seguía tocando.

Me puse encima de ella y la miré.

Ella frunció el ceño con desesperación.