Día 18 (Una nueva Temporada)

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CROSH:

Eran las siete de la mañana cuando habíamos despertado, parecía todo un suelo, quien lo diría, yo el más grande del Paraguay y porque no del mundo, ya habíamos llegado a los cien millones y lo que me pone más feliz, ver a una gran chica a mi lado, verla dormir con ternura se me abre la mente, el corazón para seguir marcando historia, la amo tanto, a pesar de todas las dificultades, pues pienso prepararle una sorpresa, así que no la despierto y me voy con mi equipo a organizar el evento, le dejo las llaves de la quinta con una nota, para que sepa hacia donde fui, ella aún seguía durmiendo, pues estaba agotada y feliz, termino de prepararle un desayuno para cuando despierte, pues ahora iríamos a la carga para preparar un gran final y un gran especial de cien millones.

Eran las ocho casi las nueve de la mañana cuando llegábamos al local, allí prepararía todo, también le pediría a Barbara frente a todo el mundo que fuera mi novia, ya que aún no lo hemos hecho oficial. Todos ya preparando el escenario, yo practicando lo que iba a decir y preparando un cronograma de lo que haríamos, también estaba emocionado por anunciar mi nueva carrera, como médico, de programador iba a pasar a ser un gran médico, de eso estaba completamente seguro, a veces siento que todo lo que me está pasando solo es un sueño, tengo miedo de despertar y nada de lo que ahora estoy viviendo no exista, o solo sea una imaginación fantasiosa ya habían pasado casi cinco años de haber recibido el botón de plata y casi dos años del botón de diamante, lo genial es que en muy poco tiempo hemos superado una meta que para mi era algo inalcanzable, yo me esperaba menos, pero gracias al señor, al que todo lo ve, gracias a él soy el chico más feliz con a penas veinti y siete años de edad, una buena chica a mi lado y una buena profesión, mejor dicho mejores profesiones, ya que dentro de menos de seis años seré médico.

Todo ya estaba preparado para el gran inicio, para una segunda temporada de mi vida, de todas las maravillas que había pasado, espero llevar a Barbara donde lleve a Liz, donde la depresión me hicieron caer, pero se que Barbara es el amor de mi vida, se que con ella seré más feliz y Liz encontrará a alguien que le guste, por cierto hoy Liz y Jony estaban más tiempo de lo normal juntos, ojalá eso significase algo, porque hacen una buena pareja, ahora ya seríamos un gran equipo, de pronto vibra mi celular, allí estaba ella, bueno, el mensaje de mi princesa diciéndome lo mucho que me amaba y lo tonta que fue, sonrió, pues ambos somos iguales, tan iguales, porque también fui tonto en no haber insistido, ella me volvía loco.


BARBARA:

Al llegar a al parque en donde Crosh me había traído de sorpresa, después de la hermosa sorpresa, nunca nadie me había preparado tanto manjares y escrito una hermosa nota, aquella mañana fue mágica, estoy muy segura de que aquí para mi empieza una segunda temporada de mi vida, él me agarró de las manos, era tan hermoso, romántico, al parecer iríamos a pasear en bote, solo él y yo, solo nosotros, sin que nadie nos molestará, ya que se había escapado  del plantel para darme esta hermosa sorpresa, además él me dijo que era solo la primera parte de las gran sorpresa, ya que algo muy grande me esperaba, pero aún no sabía qué rayos éramos, si éramos solo amigos o algo más, ya que esa noche no quedó nada bien definido, nada había quedado entre nosotros más que alegría, emociones fuertes y un gran recomenzar.

De pronto llegamos a un lugar boscoso, una enorme cascada adornaba mi vista, él no parecía maravillado, simplemente parecía emocionado por estar aquí conmigo, solo sabía que él había traído a este lugar a sus amigos, y se la habían pasado de maravilla, lo bueno es que por si este loco me arroja al agua, pues, traje mi ropa de recambio, para no terminar empapada e incómoda, solo esperaba que no, porque al parecer él también venía preparado, al asegurar el bote en la costa, él me llama, me dice si no quería estar detrás de aquella radiante cascada, pues, como lo suponía, había riesgos de mojarme, simplemente asiento, nos vamos escalado cuidadosamente, al llegar al centro, veo una pequeña cueva, él me extiende la mano para que no caiga, pues sería, mala idea caer, bien, resbale un poco, así que él me estiró hacia la cueva, era una cueva húmeda, se sentía las brisas que producían las aguas, él ambiente era mágico, de pronto él empezó a decirme cosas muy bonitas, cosas que nunca nadie antes me habían dicho, él simplemente me quería mucho, yo también lo quería, lo amaba, pero tampoco sabía lo que éramos, me dice que me siente a su lado, cuidadosamente lo hago, pero resbalo y termino entre sus brazos, termino en brazos de un youtuber muy famoso, en estos brazos que de seguro cualquiera quisiera tomar mi lugar, de seguro soy muy afortunada de que él me haya elegido a mi y no a otras.

De pronto me dice que él estuvo a punto de renunciar a mi, de irse con otra, me cuenta toda la verdad, me encojo de hombros, no puedo culparlo, me daba escalos fríos tan solo pensar de que pude haberlo perdido, de que tal vez se fuera con otra en vez de mi, fui una tonta, no debí dejar que Javier me besara ese día, por fortuna la ayuda de sus amigos, pude recuperarlo, además, él me contó que había traído a Liz a este lugar, no quería que hubiese secretos ocultos entre nosotros, así que decidió contármelo todo, me contó del beso, de lo culpable que se sintió al dar falsas esperanzas a una pobre chica, que ahora solo era su mejor amiga, y también la mía, porque ella se había dado cuenta de que él me quería solamente a mi, de no ser por ese ángel de Dios tal vez a estas alturas yo ya estaría en Asunción y no aquí, no estaría feliz aquí, sino estaría deprimida en un mundo de soledad, gracias a Liz todo salió bien, me alegra de que ella sea de Dios, porque las que son de Dios siempre tienden a hacer  lo correcto para que la otra persona sea muy feliz.

Pasaron casi treinta minutos cundo Crosh me miraba, era tan tierno con esa mirada, luego miraba mis labios y yo los suyos, de pronto él me abrazó, pues el agua era tan perfecta, de pronto sentí sus manos por mis piernas y ya me encontraba entre sus brazos, de pronto el muy confiado loco, saltó de una altura aproximadamente de cinco a cuatro metros, no voy a mentir, me asusté mucho, e incluso se que me orine encima, pero al caer al agua todo era mágico, él sabía que yo sabía nadar, por eso hizo lo que había hecho, todo era perfecto, él y yo ya empapados en el arroyo, eran ya casi las cuatro de la tarde cuando se acerca a mi, y me da un dulce beso, él, sus labios, era tan dulce, tan inexplicable, mariposas en mi estómago, no podía imaginar que algún día me sintiera así, no podía creer que encontraría a mi verdadero amor, él, yo y la naturaleza, de pronto el clima empezaba a cambiar, el sol se estaba ocultando entre nubes grises, sentía todo mi cuerpo helado, por lo que Crosh se había dado cuenta y no tardó en acercarme a la costa, subimos a la canoa, él me estaba pasando unas de sus toallas para secarme, él me pidió que me cambiará, yo abrí mis ojos como platos, pero al verlo él estaba mirando hacia otro lado, además se bajó de la canoa y también fue a cambiarse entre los arboles, yo simplemente me quedé en la canoa bien agachada que nadie me viera y me cambié de pronto escuche su voz gritando si ya estaba lista, yo simplemente asiento, él vuelve como loco, me dice que nos apuremos si no nos queríamos mojar, pues esta vez ya no tendríamos ropa de recambió, inmediatamente la balsa salió disparado la fuerza que hizo, sin momento alguno él se tira a la barca y remando a toda prisa nos volvíamos a nuestro pequeño auto, era un auto eléctrico para dos personas, era una Renault twist, era pequeño pero confortable, además era el único que nos podía llevar de vuelta a casa, y era el único que cabía en el maletero de su buseta, una enorme buseta, era un maletero oculto, justamente para estos casos de escape.

Ni bien llegamos y guardamos nuestras cosas en el pequeño auto, la lluvia comenzó a caer, era una llovizna muy fuerte que él cerró todas las ventanas del coche, yo detrás suyo, cómoda recostada viendo a un auto tan pequeño con tanto poder, con tanta energía y al amor de mi vida concentrado en el camino, él puso música, una música romántica, él me dijo que esa canción era para mi, era una hermosa canción, que yo termine pegando los ojos..........

Abro lentamente mis ojos, todo aún muy confuso, mi mente me decía que tuvimos un accidente o todo había sido un sueño, pero no, no fue eso, él me miraba con ternura, él me miraba con esos ojos que enamora a cualquiera, me dijo que despertará, pues ya habíamos llegado, veo a mi alrededor, habíamos entrado en un cobertizo de la quinta de Jony, la lluvia era intensa, el coche todo mojado por fuera pero por dentro se sentía bien, me incorporo y salgo del vehículo, me dice que me preparará porque el último gran show ya estaba por venirse, estaba a punto de terminar una gira, pero yo le dije, que no había obtenido las entradas, él me dijo que yo actuaría a su lado, yo quedé impactada e inmediatamente fui a cambiarme, prepararme y viendo lo que podía hacer, él me dice que solo debía de presentarme, que la sorpresa era cuando terminara de presentarme, ya estaba ansiosa por la sorpresa y los nervios me invadían a cada minuto que pasaba.

Cuarenta DíasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora