Cuarenta Días

Día 23 (El primer día en la universidad)

La alarma suena, yo lentamente recupero mi conciencia, lentamente voy despertando, respiro profundo pues, hoy sería un volver a empezar, una nueva aventura, hoy sería el primer día de la universidad, veo un mensaje de Liz diciéndome si podía llevarla, obviamente que si, ya que éramos compañeros y futuros colegas, me predispongo a levantarme e ir a ducharme, eran las seis de la mañana, el sol ya iba saliendo, nos encontrábamos en el mes de marzo, un mes agradable, un mes en el que tal vez sea cálido o frío, pues estas últimas semana fue algo fría, ahora el clima estaba cálido, aquí no sabíamos que esperar ya que de la mañana a la noche el clima cambiaba mucho, estés en invierno o verano, todo era muy cambiante.

Una buena ducha siempre anima a las personas, o eso decían, pues a mi me funciona y ahora vamos a ir a preparar un delicioso desayuno para arrancar con todo este nuevo día, le escribo a Liz para que sepa que nos vamos en quince minutos, eran las seis cuarenta y cinto, por lo tanto debíamos de salir a las siete para llegar a hora, pues las clases comenzaban a las siete y treinta, pues mi hogar estaba a unos quince a treinta minutos de la universidad, así que desayuno sin preocuparme, ya que iría en mi vehículo, eso era algo ventajoso que tendría, y feliz por Liz y los que vive en esta cuadra porque no iríamos todos juntos, por cierto Liz me había comentado que más adelante si todo iba bien se mudaría al apartamento universitario, ella era escritora, por lo que publicaba libros y vivía de eso, bueno es lo que me comentaban, yo simplemente espero que sea así y que le vaya todo muy bien, en cuanto a mi, mis suscriptores están muy feliz, YouTube me pagaba súper bien, pero me encanta ayudar a los demás, se que el sueldo de los médicos no es la gran cosa en este país, pero el mayor precio es verle a otros sonreír, verlos feliz, si aquí en mi país quieres ganar dinero fácil, pues debes de estudiar ciencias políticas, pues todos los políticos saben muchas charlatanería, luego suben al mando y roban al pueblo, mientras que otros luchan por cada día ir mejor ellos van sacado al pueblo, sacan salud, bienestar, comercio a lo comerciantes, sacaban hasta la seguridad de los ciudadanos con los recortes que hacían por el simple hecho de que cincuenta millones al mes no alcanzaba para nada, yo en YouTube gano cinco millones y no me quejo, además ya ven como vivo, puede construir mi hogar con el trabajo de entretener a los demás, durante que estaba como programador ganaba unos tres millones, en total ocho millones, pero todo era con el sudor de mis esfuerzos y ahora estaba a punto de ir a la universidad más prestigiosa del país para ser un gran médico, ellos solo ganaban tres millones y ellos son los que arriesgan su vida por los demás, mientras que los parlamentarios sin hacer nada se quejan de sus cincuenta millones por mes.

Bueno dejemos de quejarnos porque debemos partir en una nueva aventura, cierro las puertas de mi garaje y abro la puerta trasera del coche para que entren mis compañeros, todo listo y nos vamos rumbo a la universidad, lo lindo será cuando esté en el segundo curso, porque allí empezaremos a visitar el hospital universitario para ir aprendiendo muchas cosas más.

Mi corazón a mil por hora cuando llegaba en las puertas de la universidad, era un ambiente extraño, todos conversaban amablemente, no se gritaban, todos compartían como compañeros, bueno de segura había quienes eran creídos, pero por fortuna aquí los había en su mínima expresión y si había siempre te ayudan, al cruzar la puerta, allí estaba ella, lucía muy bien con su bata puesta, allí estaba Barbara mirándome y haciéndome señas, ya que hoy me mostraría toda la universidad antes de empezar con las clases, por eso llegue unos quince minutos antes de que empezará, pues eran las siete y quince, la agarro de las manos, ella me mira con ternura y recorremos juntos toda la universidad, pues mis compañeros que vinieron conmigo ya se fueron al salón, yo dejé mis cosas allí y ahora de la mano de mi novia estamos recorriendo la Universidad Nacional de Asunción específicamente en la Facultad de Ciencias Médicas, un sueño una gloria, jamás mie imaginé estar aquí, ahora todo esto es una realidad y lo mejor es que Barbara está conmigo, una gran chica una niña perfecta que Dios me ha enviado para cuidarla, me recuerdo cuando nos conocimos y como había iniciado toda esta relación, era algo que nunca lo pude procesar, pues los hechos fueron de película, así es la vida y así Dios te pone a personas maravillosas.

Después de haber hecho el tur por la facultad, voy a mi salón de clases ya que las clases empezaban en unos cinco minutos, Barbara ya se había ido a su salón, a ellos le tocaba ir al hospital universitario, a mi me tocaba quedarme, la ventaja es que como era el primer día ellos irían en el bus de la facultad, espero que a nosotros no nos maten antes de finalizar con el primer día.

Allí estaba él, daba la bienvenida a la universidad y aquí empezaba la primera clase de microbiología, es una materia en la cuan estudiábamos a la células, a bacterias entre otros con el microscopio óptico, es decir la parte microscópica del cuerpo, ni bien nos saludaron el profesor ya anunciaba nuestra primera tarea, que bonito empezar las clases con las primeras cien páginas para estudiar y aún faltaba otra clase más.

Al finalizar las clases de microbiología mis amigos y yo nos encontrábamos almorzando en el departamento de uno de ellos, pues la próxima clase eran a las trece treinta, así que aprovechamos este tiempo y nos juntamos entre todos para alimentar a nuestra mente, la primera clase no fue tan densa como lo esperaba pero ahora venía una de las materias fundamentales de la carrera.

Todos desperezándonos para volver a la universidad, la segunda y última clase sería en la morgue de la facultad, pues se trataba de la clase de anatomía humana, pues ahora conocería más a fondo cada parte de nuestro cuerpo, y porqué no estudiar con los muertos, bueno era algo grandioso, o tal vez eso lo pensé hasta que entramos al lugar, todo el lugar apestaba a formol, una sustancia química que permite conservar los cuerpos, bueno, formamos grupos y en cada grupo el profesor iba explicando cada cosa y cada función, estuvimos así hasta las cuarto de la tarde, además el profesor dijo que por ser el primer día saldríamos a esa hora y nos dio otros cincuenta páginas para estudiar para la otra semana, eso era fantástico, ahora siento que de verdad estaba aprendiendo.

Al llegar a casa ni siquiera tenía ganas de trabajar, pero si tuve ganas de contar mi primera experiencia en un directo a mis suscriptores, hasta ahora apestaba a formol, así que me puse frente a la pc y emitiendo mi experiencia de este primer día.