27.

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💥Marcos 💥

Haber hablado con Eva me alivió bastante, aunque no dijo que me disculpaba, me sentí bien en hacerlo.

Reconozco que lo hice porque ella tiene mucha influencia sobre Yuli y si quiero recuperarla debo reconciliarme también con Eva, pero ahora que lo pienso, me siento muy bien al haberlo hecho, tal vez fui honesto.

Me hubiera gustado mucho conocer a su hijo, no me lo permitió y tengo mucha curiosidad por él, en especial por su nombre. "Mateo".

Yuli una vez me habló de ese nombre y conozco su significado, no entiendo por qué Eva llamó a su hijo así.

Se lo preguntaré.

Observo mi reloj para verificar la hora, son las siete en punto  y Yulissa aún no aparece, estoy empezando a desesperarme y creer que no vendrá.

Me levanto de la banca dispuesto a ir por ella al restaurante, cuando de pronto la veo caminar hacia acá despacio,  se ve hermosa con ese conjunto rojo, ese siempre ha sido su color porque resalta su belleza natural. Su cabello ya no tiene sus rizos, esos que tanto me gustaban, reconozco que me gustaba más cuando estaba largo y negro, ahora es liso, castaño y más corto, pero igual se ve hermosa. Vuelvo a sentarme en cuanto llega justo enfrente de mí.

—Ya estoy aquí, ahora dime lo que tengas que decir.

—Hola, yo... Toma asiento por favor. —pido con amabilidad, ella se sienta  a mi lado un tanto nerviosa.

—¿Cómo me encontraste?

—Te seguí. bueno en realidad contraté a alguien para que lo hiciera.

—Claro, debí imaginar qué harías algo así. Es tu estilo, pagar y que otro haga las cosas por ti.

—Yulissa, vine aquí con un solo propósito. Han pasado muchas cosas y yo he cambiado. He reflexionado y... Conseguir tu perdón —Sus ojos se me miran con incredulidad—. Lo que te dije ese día en el cementerio es cierto. De verdad siento todo lo que sucedió entre nosotros. Todo este tiempo te he pensado, Yulissa yo... siento mucho haberte lastimado.

—Hum ya, o sea que viniste hasta aquí solo para decir que lo sientes y que yo te perdone. ¿Perdonarte por qué? —pregunta con sarcasmo.

—Por... Dudar de tí, por haberte obligado a...

—No lo digas, no quiero escuchar esa horrible palabra, menos de tí.

—Yulissa yo solo quiero...

—¿Cómo te diste cuenta que estabas equivocado sobre mí? Recibí el dinero y te digo que lo gasté absolutamente todo, no tengo nada.

—Cometí errores, me dejé llevar por... fui un inmaduro, un cobarde. Tuve miedo Yulissa, no me porté bien contigo por ser un miedoso. Ahora yo, solo lo sé que tú no...

—¿Y qué pretendes? ¿Aliviar tus culpas con mi perdón? —Se levanta—, si es así ya puedes estar tranquilo, te perdoné aquel día, perdiste tu tiempo al venir aquí, no es mi culpa que no lo recuerdes, si lo recordaras te hubieras ahorrado este viaje tan largo Marcos. —Limpia una lágrima que logra salir—. Aquella vez, aunque estaba muy dolida contigo y destrozada, yo te perdoné, te lo dije —Hice memoria y recordé sus palabras.

A pesar de esto yo... Te perdono.

«Te amo, aunque no me creas y dudes de mí, en verdad te amo y te amaré siempre Marcos, recuérdalo. Perdón, perdóname por no ser lo suficientemente digna para ti.

—Lo recuerdo, pero no es igual a que lo hagas ahora, quise y quiero tu perdón sincero, de corazón, por eso vine aquí —Me coloco de pie también e intento tomar sus manos, por supuesto las esconde.

MATEO, La Mejor Decisión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora