"-Es por tú bien- susurró acariciando su cabello mientras veía como ella se desangraba- Todo estará bien amor, dentro de unos años te despertaré.
Tom Riddle estaba loco, obsesionado por Annalise Romanov.
Observó como la sangre de la mujer que amaba...
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Segundo año.
—Entonces, ¿Eres heredero de Salazar Slytherin?— preguntó por décima vez el platinado.
—Por décima vez Abraxas, te he dicho que si, eso fue lo que escuche en los pasillos donde estaba el profesor Dumbledore— aclaró con irritación.
El platinado lo miró con una gran sonrisa en su rostro, la cual desapareció al instante porque no tenían pruebas de que Tom era el heredero.
—¿Cómo puedes probarlo? No hay nada que pruebe que eres pariente de Salazar— atacó entre susurros al ver cómo algunos estudiantes entraban en la sala común de Slytherin.
El azabache lo miró con enojó, odiaba admitirlo pero tenía razón. Solo había escuchado a Dumbledore decir que él era el heredero de Salazar Slytherin, que por eso sabía hablar parsel y tenían que mantenerlo vigilado. Eso molesto a Tom, no era como si fuera a causar una guerra en Hogwarts.
—Podemos buscar el árbol genealógico de mi madre, según sé apellidaba Gaunt— opinó pensativo.
—Y el apellido Gaunt es de sangre pura— dijo sonriente para después ponerse serio— Pero aún así seguirías siendo mestizo Tom, tu madre se casó con un Muggle.
El azabache rodó los ojos con molestia. Odiaba que Abraxas le repitiera que era un mestizo, incluso lo hacia enfrente de Annalise, como si ella fuera dejar de hablarle por su estatus de sangre, mataría a Abraxas si ella alguna vez lo hiciera.
—¡¿Cuál es tu maldito problema?!— casi gritó haciendo estallar su magia.
El platinado hizo mala cara mientras se encogía de hombros.
—No tengo nada en contra tuya amigo, eres el primer mestizo que me caí bien— aseguró con una mueca— El problema son mis padres, si se enteran que soy amigo tuyo, me matarán, literalmente me harán sufrir a Crucios
El azabache suavizó su ceño, ahora entendía la razón por la que el platinado llegó demacrado a la estación, sus padres lo habían castigado a crucios porque había sacado una mala nota. Annalise había estado con él acariciando su cabello rubio, a Tom no le agrado eso, aquello causó una mueca de asco por su parte.
—Cuando todos sepan que soy el heredero de Salazar, no te volverán a castigar de esa manera Malfoy— prometió sin expresión alguna.
