Sol •[Ron Weasley]•

•[Capítulo 31]•

Después de que el señor oscuro diera sus primeras palabras partió de la mansión Malfoy. El resto de la elite sangre pura seguía en shock, en algunos podías notar la cara de felicidad en otros de miedo pero en todos había sorpresa. Poco a poco comenzaron a retirarse.

─Cissy querida─ habló la madre de Sol─ Ya veras que pronto sacaremos a Lucius de Azkaban.

─Tal vez nuestro señor tenga piedad de él por haber fallado en su misión y le dé otra oportunidad.─ esta vez hablo Bellatrix.

─Papá ─susurró la joven Rosier ─me quiero ir de aquí ─la chica estaba incluso mareada, Evan la tomó de la mano y sin decir nada también se fueron.

Cuando llegaron a su hogar ninguno decía nada hasta que Evan decidió romper el silencio.

─Conocí a tu madre en Hogwarts; para mi era la más bonita e inteligente del colegio. Al quedar en Slytherin nos hicimos amigos y después nos enamoramos─comenzó a contarle con la mirada perdida.─ Los abuelos estaban encantados con la relación, éramos una de las parejas más estables hasta que un día cambió; tu madre, ella hablaba cada vez más de él. En un principio pensé que sólo era algo momentáneo y que con el tiempo pasaría. Pero no fue así.─ guardó silencio─ Seguía tan enamorado de ella que poco a poco fui cediendo en pequeñas solicitudes que me hacía. Y tus abuelos ¿qué decir de ellos? Mis padres murieron arraigados a los ideales puristas así que debo admitir que crecí con ciertas ideas que creía que eran correctas, después de su muerte Mónica era lo único que me quedaba. ─ suspiro una vez más.─Una semana después de que tus abuelos fallecieron Mónica me pidió como acto de amor que tuviéramos la marca tenebrosa y yo simplemente acepte. Cuando me di cuenta en lo que me había metido ya era demasiado tarde. Después tú madre se embarazo.─ Evan se detuvo un segundo y miró a Sol con ternura─Y fue cuando tuve miedo por primera vez. Tiempo después cuando él cayó me sentí aliviado, pensé que Mónica y yo podíamos ser de nuevo lo que éramos antes; y construir una verdadera familia. Pero ella ya no es la mujer de la que me enamore. Y no quiero decir que ya no la ame; porque la amo profundamente pero eso ya no es suficiente.─ concluyó cabizbajo.

─No voy a juzgar tus decisiones, si en algún momento las tomaste fue por algo y aunque fueron equivocadas lo importante es que te diste cuenta─Sol tomó la mano de su padre.─pero ahora hay que enfocarnos en salir de esta situación ¿qué haremos padre?─ preguntó en un tono casi desesperado.─Yo no quiero ser una de ellos... vámonos de aquí, los tres juntos─suplicaba.

─No podemos huir y vivir escondidos Sol.

─¿Entonces qué propones?

─Hay un plan pero tenemos que quedarnos.

─¿Cuál es ese plan?

─No puedo contártelo, lo descubrirás poco a poco. Por ahora mientras menos personas lo sepan es mejor. Confía en mi, hija.