•[Capítulo 38]•

1.8K 164 1
                                    

Durante esa noche, la joven estaba más que nerviosa, se rascaba el cuerpo con desesperación y las marcas rojizas no se hicieron esperar, de su boca sólo salían maldiciones, daba vueltas por la habitación tirando de su cabello, mordiendo sus uñas.

─Rosi ¡basta!pidió el rubio con los nervios de punta al igual que ella.

─¡Al diablo! dijo la chica saliendo disparada de la habitación y sin que Draco pudiera hacer algo.

Camino a toda prisa, los pasillos de Hogwarts jamás se le habían hecho tan largos como en esos momentos, por atrás alcanzaba a oír la voz del rubio pero no hizo caso.

─Tú ─ dijo enojado al verla entrar a la enfermería.─ ¿qué estás haciendo aquí?

─¿Cómo está?─ preguntó la castaña ignorando la pregunta de Harry.

Estoy seguro de que tú tienes algo que ver. se acercó amenazante.

─Harry nolo detuvo Hermione─ellos fueron novios es comprensible que preocupe.

─Nadie más lo sabe, ¿qué raro que tú sí verdad Rosier?

─Sol, me alegra que vinieras ante mi llamado, ─ habló Dumbledore quien claramente estaba mintiendo. ─Harry, necesitamos hablar, estoy seguro que Sol cuidará muy bien de él ¿no es así?

─Sí. dijo agradecida.

─No pienso dejar a Ron sólo con ella.

─Es poco educado de tú parte Harry, además yo confío en ella.

─Yo también. ─ apoyo Hermione y Sol les sonrió débilmente.

Muy a su pesar pero Harry acepto y sé fueron no sin antes darle una mala mirada a la chica. Sol se acercó a la cama a paso lento, observando meticulosamente al pelirrojo. Paso saliva y tomó asiento en la silla junto a él. En ese instante la castaña no pudo aguantar más y sus lágrimas comenzaron a caer una tras otra. 

─Lo lamento tanto. dijo con la voz quebrada y tomando delicadamente su mano.─ te aleje de mi para mantenerte a salvo y mira lo que ocasione. 

La joven Rosier paso toda la noche acariciando su rostro, su cabello, tocando sus manos hasta que sus ojos comenzaban a pesar, intentaba mantenerlos abiertos pero el cansancio era notable.

─Deberías descansar en tu habitación─ la despertó la voz de Madame Pomfrey.─te daré una nota para que puedas faltar a tus clases, pasaste toda la madrugada aquí y tienes que dormir como se debe.

─Gracias.lo miro de nuevo y mordió su uña.

─Tranquila, yo lo estaré vigilando. Sol asintió.

Antes de salir de la enfermeria se acerco al chico depositando un beso sobre sus labios─ te quiero.─ finalizó. Cuando esta apunto de salir se dirigió hacia la enfermera.

─Cuando Ronald despierte, podría no mencionarle que estuve aquí... por favor.

─Oh, si así lo desea señorita Rosier, así será.

La chica le agradeció nuevamente y salió de la enfermería, pero no a su habitación como la enfermera le había sugerido. El tiempo se les venía encima y ella tenía que darse prisa. Los días que continuaron fueron bastante duros para Sol, cuando no estaba cuidando al pelirrojo estaba encerrada con Draco intentando arreglar el armario, comía poco y dormía aún menos.

Sol •[Ron Weasley]•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora