Pokecuento: Cambiar al mundo

Capítulo 19: Interrogatorio

Después de una noche de plácido sueño para algunos, y pesadillas terribles para otros, la mañana había llegado a la mansión que Aka Shinju usaba como basé, y aquellos que protegían a la diamansfera por consecuente despertaron, cada pareja salió de su habitación, para encontrarse con la visión de 2 platos con abundantes bayas y alguien ya conocido a su derecha.

— Buenos días — Saludo el drapion a los invitados de su gremio... O el que él fingía que era su gremio, mejor dicho — como pueden ver les trajimos el desayuno.

— ¡Son muchas bayas! — A Kinzo se le hacía agua la boca de solo ver la cantidad y variedad de bayas en cada plato.

— Desde luego, nuestro equipo de recolección de comida siempre se encarga de traer una gran variedad de bayas — Dijo Henkan con lo que parecía ser una sonrisa... Era difícil decirlo por la forma de su cara.

Shine miró a los lados del pasillo, percatándose de que sus platos eran los únicos frente a su puerta, ni siquiera el drapion tenía uno, esto le llenó de interrogantes.

— ¿Por qué somos los únicos comiendo aquí? — Preguntó el luxio un poco confundido — ¿Qué pasa con los demás?

— El resto del gremio está desayunando en la sala del comedor — Respondió el drapion con una expresión calmada — Zeitaku-sama me pidió que les trajera el desayuno a ustedes porque... El tener shinies en la mesa podría provocar algo de "incomodidad" entre los miembros del gremio...

— Entiendo... — El luxio comprendía dicha respuesta, sabía cómo la mayoría trataban a los shinies y prefería evitar un momento incómodo, en especial luego de haber visto cómo se sentía su más reciente compañera al respecto.

Amai por su parte comenzó a olfatear el plato de bayas en frente de sí bastante concentrada en percibir su olor, dejando un poco confundidos a sus compañeros y al drapion, luego de un rato dejó de oler las bayas.

— No.... ¿No hay veneno? — Se preguntó la absol algo confundida — Tampoco están rancias... Estas bayas son normales...

— ¿Puedes oler el veneno? — Mery estaba intrigada al oír la reacción de la absol shiny luego de haber olfateando su plato de bayas.

— Si... Las bayas con veneno huelen diferente de las normales... — Respondió la absol de la cicatriz con su nerviosismo característico — Antes no lo notaba, pero luego de unas veces empecé a diferenciarlo...

— ¿Intentaron envenenarte? — Preguntó Shine levemente sorprendido.

— Muchas veces... — Respondió la absol shiny bajando la cabeza con algo de tristeza.

— Vaya que hay pokémon despreciables... — Dijo Shine con un poco de odio en su voz.

— Bueno, al menos ya sabemos que es seguro comerlas — Dijo Kido con una sonrisa despreocupada — así que aprovechen de comer bien porque vamos a entrenar mucho hoy... Tenemos permitido entrenar ¿Cierto?

— Mientras yo los vigile supongo que no hay problema — Dijo Henkan sin darle demasiada importancia.

— ¿Yo también tendré que entrenar? — Preguntó Amai algo nerviosa al respecto, pues jamás había recibido un entrenamiento.

— Bueno... No voy a obligarte, pero creo que deberías hacerlo — Respondió Kido con algo de seriedad — supongo que escuchaste lo que dijo Mery acerca de Mirai no Hikari ¿No?

Amai asintió con la cabeza un tanto asustada al pensar en eso, si bien se sentía segura en compañía de Shine y los demás, pues su vida corre peligro aun estando sola, la idea de que un gremio los persiguiera para matarlos no era mucho más tranquilizante.