Capítulo 34: Adiós...

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Tal como Shine sugirió, Amai fue a la mansión de Aka Shinju y liberó a los pokémon que Henkan había capturado en lockballs, con la esperanza de encontrarse algún pokémon con habilidades curativas, para su suerte, encontró a una chansey que servía como médico de reserva de su gremio, la cual pudo atender a los miembros de su gremio y al grupo que custodiaba la diamansfera.

— Con esto bastará... — Dijo la chansey terminando de curar a Kinzo, con pulso cura — Bien, creo que ya los curé a todos.

— Me siento raro... — Dijo el lucario para inmediatamente percatarse de que su voz era diferente, un tanto más grave, más adulta — ¿Esa es mi voz?

Inmediatamente Kinzo miró a su cuerpo percatándose del notorio cambio por el que había pasado.

— Soy un Lucario... — Una sonrisa que reflejaba la más pura alegría se formó en el rostro del lucario con la bolsa — ¡Al fin soy un lucario!

— ¡Felicidades Kinzo! — Dijo Mery, quien se hallaba a pocos metros del mencionado lucario, sonriéndole tranquilamente — Aunque no creas que por tener una doble ventaja de tipo me vas a vencer más fácil.

— Se que no, harás algún plan para ganarme, tu plan fue lo que nos hizo ganar contra ese ditto así que sé que no debo bajar la guardia — Kinzo le devolvió la sonrisa a su rival — quizás no eres una riolu o lucario, pero eres la mejor rival que pude tener.

— Gracias — La glaceon soltó una pequeña risa y se sonrojo ligeramente ante el, aunque inusual, de cierto modo tierno cumplido del lucario.

— No entiendo por qué tú voz es diferente... — Dijo el luxio del collar, quien se acercaba a su amigo mientras en su rostro había algo de confusión — La mía no cambió cuando evolucione...

— Porque aún no estás en tu etapa final — Respondió la glaceon aclarando las dudas de su hermano — normalmente esos cambios ocurren en la fase evolutiva final de un pokémon, si un pokémon no tiene evolución, su voz se va agravando con el tiempo.

— Entiendo — Shine había quedado satisfecho con la respuesta de su hermana, después de todo, tenía sentido para él.

— Oye Shine, tu collar está gris otra vez — Mencionó el lucario al notar que el cristal del collar de su compañero había perdido su característico color naranja rojizo — ¿Volviste a hacer eso del movimiento Z?

— Si, bueno... Esta vez fue diferente... — Comentó el luxio aún pensativo respecto a lo que pasó en aquella pelea — Está vez no escuché las voces, pero sentí la energía Z y luego una barrera eléctrica me rodeo y me sentí más rápido y fuerte, pero no podía usar mordisco, cuando lo intentaba se convertía en colmillo rayo, además cuando termino no me dolió tanto como la otra vez... Aunque igual dolió mucho...

— Eso es raro... Por lo que habías dicho antes pensé que un movimiento Z era un movimiento de poder masivo — Comento Mery algo extrañada — pero lo que tú describes suena más como una especie de estado o algo similar.

— Di-disculpen — Dijo Amai, quien se encontraba mirando a los inconscientes Akira y Henkan con algo de miedo, para llamar la atención de su grupo — ¿Qué hacemos con ellos?

— Lo mejor será capturarlos con las lockballs — Dijo la glaceon con seriedad — podemos usar las que Henkan utilizó, mientras no haya un prisionero en una lockball, puede ser utilizada para capturar a cualquiera.

— En ese caso tomen estás — Dijo el gallade que vigilaba la entrada del gremio, quien, por la cercanía del grupo de la diamansfera, había escuchado toda la conversación, y utilizo el movimiento psíquico para recoger del suelo las lockballs en las que él y su compañero habían sido encerrados con anterioridad y pasárselas a la glaceon.

Pokecuento: Cambiar al mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora