Sangre Fría [+18] | KTH

032 ─ El trato (1)

31 días antes de...

NARRA TAEHYUNG

Horas antes...

El hombre que me había torturado con los baldes de agua, estaba ingresando por la puerta nuevamente.

Es una persona tan alta... y de cierta manera intimidante. Pero jamás dejaré que ocasione temor en mí.

-Taehyung... ¿Conoces el gas narcótico?

Se escucharon sus pasos mientras caminaba con algo en sus manos.

-¿Q-qué?.- susurré de una manera apenas audible.

-Estos últimos días... creo que no has dormido lo suficiente. ¿Quieres que te demos una mano?

Negué con la cabeza.
No necesito eso para tener mi cabeza revuelta.

-No me importa si necesitas esto o no. Te lo pondré de todas maneras.- se acercó a mí.- siendo sincero... te necesito inconsciente.

¿Inconsciente? ¿Qué están tramando?

-N-no...- me sentía y hablaba tan débil. Ya no tenía fuerzas para defenderme.

Se posicionó frente a mí y me colocó una máscara, dejando que inhalara el gas de su interior. No faltó mucho para que mis ojos comenzaran a nublarse.

-Taehyung, considera esto... como un regalo de una antigua amiga.

NARRA T/N

No sé a dónde dirigirme.
He estado caminando por todas partes con una copa de champagne en la mano tratando de encontrar alguna especie de pista que me lleve hacia aquel hombre.

Me encuentro sola, pero Yoongi me ha estado siguiendo desde lejos para protegerme las espaldas.

Jungkook y el chófer llegaron hace unos minutos. La mayoría de todos nuestros hombres ya están aquí.
Solo faltaría el auto donde viene Camila, el cual es el último.

Me detuve en una especie de mesa de postres y comencé a observar todo... y a todos. Pero no me percaté de que alguien se había posicionado detrás de mí hasta que sentí su respiración en mi nuca.

-¿Señorita T/N?

Fruncí el ceño. Esa voz... jamás la he escuchado en mi vida. Giré mi cuerpo algo desconfiada y vi a un hombre desconocido.

-Nuestro segundo jefe está feliz de que haya podido acompañarnos...

Mi corazón se aceleró.
¿Su jefe? ¿Feliz?
...¿Saben que estoy aquí?

-Me mandó para decirle que se divirtiera y que disfrute de la noche.

Chocó ligeramente su copa con la mía. Se acercó lentamente y miró mis ojos.