C u a r e n t a

557 59 47
                                    

OPORTUNIDADES

Esto no se ve bien.

—Nosotros estábamos trabajando en nuestro proyecto —respondo rápidamente llenando el silencio—, se entrega esta semana y estábamos demasiado atrasados. ¿Verdad?

Le doy un leve codazo a Khai que no responde probablemente porque esta en un duelo de miradas con Sam, el cual no aparta su vista de él.

—Lo supuse —dice mi abuela y mira a Khai por un momento—. Khassian, querido ¿como te encuentras?

—Perfectamente —responde Khai y a pesar de mi grado de estrés puedo notar lo cauteloso que es al responder, el descubrimiento del ático aun nos tiene estupefactos a ambos, pero por el momento yo solo quiero salir de la situación actual.

Le pido explicaciones con la mirada a mi abuela sobre porque se encuentra Samuel Breslow en la puerta de mi casa, pero me arrepiento segundos después con la respuesta que me da.

—Emma, este joven se acerco hoy a mi ya que estaba preocupado por ti. Quería saber como estabas después de no haber asistido a Hartford el viernes. Le sugerí que viniera a comprobar el mismo ya que yo no me encontraba enterada de nada.

Sam aparta al fin su mirada de Khai para posarse en mi abuela y automáticamente su rostro se llena de culpabilidad.

—Amir me comento que te encontrabas enferma —evita mirarme y ahora la que se siente culpable soy yo—. Quería... yo... quería asegurarme que tu te encontraras bien.

—Un poco tarde, ¿no? —la voz de Khai retumba sobre mi cabeza.

—Se presentaron unos asuntos que no pude evitar —se defiende Sam y después se dirige solo a mi—. Me hubiera gustado venir antes, pero también estaba el hecho de que no quería que te sintieras presionada. De hecho no tienes porque sentirte presionada ahora, no tienes que darme una respuesta aun si no estas lista.

—¿Respuesta? —la curiosidad de la abuela evita que siga lanzándome dagas con los ojos para centrarse en Sam, ahora su rostro se ve el triple de culpable al saber que volvió a decir algo que no debía.

—Me encuentro mucho mejor, solo necesitaba descansar —digo otra mentira que nadie parece tragarse pero no me importa lo único que quiero es que todo esto acabe—. Hablemos afuera por un momento.

Le indico la puerta a Sam para que salga y él asiente rápidamente aliviado, se despide de la abuela educadamente a lo que ella responde de la misma forma. No lo invita a quedarse a comer lo cual agradezco.

Estoy por dirigirme afuera también cuando la fuerte mano de Khai me toma por la muñeca.

—Necesitamos acabar lo que estábamos haciendo.

—Ya lo se —susurro—, pero necesito arreglar esto primero.

—¿Recuerdas lo que dije sobre las cosas importantes?

—Esto lo es —respondo.

Obviamente charlar con Sam no es mas importante que todo lo demas que tengo encima, pero sus sentimientos son importantes. Punto. No puedo seguirlos aplazando. Me mira fijamente y noto como un músculo de su mandíbula salta, pero al final libera mi muñeca.

Prácticamente me lanzo a la puerta, pero la abuela también me detiene.

—Hay mucho que tienes que explicar, señorita.

—Bueno, creo que somos dos —pienso.

—Lo haré —digo en cambio.

Ella posa su mirada en Khai y después en mi.

DARKLIGHTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora