Capítulo 6

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Daisy:











El molesto ruido de la alarma me despierta, de apoco comienzo a abrir los ojos sigo en la misma posición que me dormí, el brazo de Layton arde en mi cintura. Levanto mi cabeza del pecho de Reece para mirar la hora y gimo con frustración son pasadas las siete de la mañana, como puedo trato de salir de la cama, me coloco mis bragas y agarro mi top del suelo, ellos se remueven, Layton es quien abraza a Reece ahora, se ven tiernos así juntos. Me acerco a mi bolso porque tendré que cambiarme aquí, ya mis oídos sientes los gritos de Andrew, me cambio rápidamente colocándome mi traje, la coleta de anoche la transformo en un moño alto...el resto de mis cosas se encuentran abajo, con el bolso colgando de mi hombro salgo de la habitación y busco el baño que se encuentra a mitad del pasillo, ingreso y rápidamente me lavo los dientes, el rostro... tienes que apurarte Daisy si no esta tarde encontraran tu cuerpo en una fosa porque tu entrenador te mato, gracias a que llegaste tarde a una prueba para las olimpiadas.

Patsy me dijo que el o alguno de ellos me llevarían a la pista de hielo, cual de todas es su habitación, decido abrir una a una, hasta que llego a su habitación e ingreso, se encuentra acostado boca abajo y sus ronquidos seguramente se escuchan en la Antártida.

-        ¡Patsy despiértate! – le digo mientras lo muevo un poco- llego tarde, por favor levántate- sigo moviéndolo y no se despierta- Mierda prometiste que me llevarías- este hombre se muere cuando duerme.

Mi mirada se dirige a su mesita de noche donde ya se el porque que se encuentra medio muerto.... anoche se drogo hasta olvidarse de su nombre, hijo de puta sin palabra. Me enoja tanto la gente que da su palabra comprometiéndose a algo y después no cumple, mi enojo me lleva a tomar sus llaves de la mesita...si sigo tardándome me descalificaran de las olimpiadas por este estúpido. Salgo de su habitación y bajo corriendo las escaleras para ir a la sala, donde recojo mi teléfono y mi pantalón guardando todo en el bolso, salgo del departamento para dirigirme al ascensor, cuando me encuentro adentro miro la hora en el teléfono...mierda ya son pasadas las ocho de la mañana, tengo diez llamadas perdidas de Andrew. llego al subsuelo donde se encuentra la cochera... desactivo la alarma del Audi y me subo, lo enciendo y saco de mi bolso una toallita desmaquillante para ir sacándome el maquillaje que queda en mi rostro, salgo del edificio para dirigirme a la pista de hielo. Llego cinco minutos antes de las ocho y media, me bajo y coloco la alarma antes de salir corriendo con el bolso colgando de mi hombro a la entrada, sin darme cuenta choco con alguien, cuando alzo la mirada...la cara de Andrew esta frente mío, mierda multiplicada.

-       ¿Por qué has llegado tarde? ¿Dónde mierda estabas Daisy? – me pregunta enojado.

-        Me quede dormida- le contesto rápidamente.

-        Mierda- contesta- menos mal que hable con los superiores que te cambiaran el lugar- me informa- serás la ultima en presentarte- asiento a sus palabra- ve a maquillarte rápidamente y es una suerte que ya estés vestida- ruedo mis ojos, paso por su lado dirigiéndome a los vestuarios.

Odio ser la última en presentarse porque son como treinta chicas así que es una larga espera, saco mi bolso de maquillaje y comienzo rápidamente a preparar el rostro para el maquillaje, hidratante, vitamina c y primer, luego la base, aplico el corrector difuminándolo bien, rubor e iluminador, paso a los ojos donde me realizo un delineado azul, me coloco las pestaña postizas y puntos de pegamento alrededor de los ojos para pegar los strass, en los labios un labial nude. Cuando termino me observo en el espejo, a pesar de no dormir casi nada anoche, no lo reflejo. Fue arriesgado lo que hice anoche porque me podría haber costado mi clasificación a las olimpiadas que es el sueño de toda patinadora, es un buen día para no tomar los putos medicamento... necesito la energía que mi cuerpo genera cuando no estoy medicada, aunque es una mierda lo que me costara la recuperación. Mañana tengo cita con psicólogo, odio a ese ser humano que sabe todo y cada parte de mi vida, lo peor en mi caso es no tomar los antidepresivos. Me coloco los patines y me dirijo a la pista de hielo, justamente se esta presentando Vivian, miro al público, su madre se encuentra en compañía de mi padre, aplauden cada salto que realiza... obviamente han venido a verla a ella, porque mi padre siempre que puede le encanta evitar mis presentaciones, es como si ella fuera su hija. Después de la muerte de mi madre y desde que me diagnosticaron la Bipolaridad mi padre comenzó a alejarse de mí, puede que algunas personas les duela esa actitud, pero por suerte a mi no me afecta o eso creo.

CHOCOLATE SEXUAL (LIBRO ÚNICO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora