Capítulo 43

5.4K 361 61
                                    

A primera hora de la mañana, Lana vino a mi habitación para informarme que viajaríamos a Italia, en sus manos tenia unas prendas dobladas que me entregó y esperó en la habitación mientras me vestía en el cuarto de baño así que fue algo incomodo hacerlo en un espacio tan reducido, mi vestimenta consistía en unos jeans al igual que una blusa, me calcé unos tenis y después salí.

—Nada mal. —dijo Lana levantándose de la cama. —Vamos, tenemos que ir a una reunión.

— ¿Tenemos?

—Si, ahora eres parte de la operación.

Caminó hacia la puerta y yo aproveché que me estaba dando la espalda para tragar saliva.

¿En que carajos me estaba metiendo?

La seguí hacia el elevador y después subimos hasta el piso catorce, a medida que caminábamos por el pasillo podía sentir que las palmas de mis manos sudaban como nunca, tenia el impulso de salir corriendo porque todo esto me daba miedo, pero recordé que lo hacía por Ana así que suspiré y mantuve mis pensamientos en ella para continuar con esto.

—Adelante. —Lana abrió la puerta de cristal para mí.

Cuando entré todos los oficiales que se encontraban en el lugar se giraron para verme, no podía contarlos, pero podían ser más de treinta. Peter se encontraba al frente de todos, delante de la mesa de juntas, con un movimiento de cabeza me indicó que me acercara, pero no lo hice, en cambio me quedé a unos cuantos metros de distancia junto a la multitud de oficiales.

— ¿Nos encontramos todos? —preguntó dando un vistazo alrededor. —Bien, entonces iniciamos.

En ese preciso momento cuando apagaron las luces y encendieron el proyector la puerta se volvió a abrir.

—Lamento la demora.

Mis ojos viajaron hacia el hombre que acababa de entrar, su voz fue como un detonante para que mi pulso se acelerara y de solo verlo sentí un poco de apoyo, me hizo darme cuenta que no estaba sola en esto. Él usaba unos pantalones negros al igual que una camisa de manga del mismo color, por encima tenía un chaleco antibalas con las letras de FBI, su barba parecía recién recortada y no pude evitar notar la placa que tenía colgando en su cuello.

No sabía lo bien que podía verse alguien con chaleco antibalas, él también usaba una muslera táctica donde portaba su arma y aunque jamás lo admitiría en voz alta se veía tan malditamente atractivo.

—De acuerdo, ahora si estamos todos.

Owen se puso a un lado suyo al igual que Lana.

—Como muchos saben viajaremos a Italia para capturar a Michael Neryl, tenemos información valiosa sobre su paradero así que esta es una oportunidad única y hemos estado trabajando mucho para este momento. —señaló el mapa que estaba proyectado en la pared. —La policía y los militares de la ciudad nos respaldarán, esto es un trabajo en conjunto, pero una vez que lo hayamos atrapado lo traeremos al país, será juzgado y sentenciado aquí.

Algunos agentes asentían a lo que Peter decía, yo tenía mis manos en la espalda sin saber muy bien que hacer con ellas, toda esta situación me ponía muy nerviosa.

—El plan es simple. —la imagen cambió y aparecieron los planos de un edificio. —La señorita Ray será nuestra infiltrada, ella se encargará de darnos la señal para entrar e ir a por él ¿de acuerdo?

—Si, señor. —respondieron al unisonó.

—Solo hay una condición, Ana Ray no se toca. —dijo esto último mirándome y agradecí con una suave sonrisa. —Tendremos la táctica de mantener los cuatro puntos del edificio cubiertos, contaremos con francotiradores en cada rincón porque ese imbécil no se andará con rodeos, probablemente vaya a llevar a unos cuantos, de su gente, pero nosotros seremos más, necesito que estén alerta en todo momento, estas no son vacaciones así que despiertos y cooperando, les detallaré el plan en cuanto hayamos aterrizado. -encendió la luz. -Los agentes Jones y Flynn junto con su servidor seremos lo encargados de que esta operación se realicé con éxito y así será.

Más Cerca. (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora