– ¿Qué estás haciendo?
Miro por encima de mi hombro a mi abuelo asomarse por la puerta y sonreír en cuanto me ve de pie frente a la cama viendo lo que pensaba usar, unos jeans altos, una blusa corta de color rojo y mi chaqueta negra.
– ¿Vas a usar eso? –entra en mi habitación.
– ¿Es demasiado?
Él me pone una mano en el hombro.
– ¿Intentas que todos piensen que vienes de la ciudad?
Junto mis cejas.
–Soy de ciudad pero eso no tiene nada que ver.
Sonríe y me besa la mejilla.
–No llegues tarde.
Se da la vuelta y se va, ahora después de lo que me ha dicho estoy reconsiderando la idea de cambiar de ropa pero opto por usarlo, no tenía muchos ánimos de salir de todos modos así que quería estar cómoda con lo que usara.
Luego de unos minutos después Hannah entra a casa de mi abuelo para saludarlo y decirle que no me traerá tarde a casa, él asiente con más tranquilidad y sigo a la chica rubia hacia la camioneta negra que espera en marcha.
–Has dejado el motor encendido. –digo con un tono acusador a pesar de que trate de que no se notara.
Ella asiente.
–Mi hermano está ahí.
En cuanto nos acercamos puedo ver a un chico atractivo, rubio con ojos del mismo color que Hannah, usa un sombrero café y tiene un cigarrillo apagado entre los labios y estoy pensando en que si ella no me decía que era su hermano de todas maneras lo supondría ya que se parecen.
–Christian, ella es Tamara la nieta de Samuel, de la que te hable el otro día.
No pude pasar desapercibida la manera en que me vio de abajo hacia arriba y me sonrió.
–Christian –saca la mano por la ventanilla y se la estrecho.
–Mucho gusto –digo y la manera en que me sonríe me causa un escalofrió por lo que se la suelto y rodeo la camioneta para sentarme en los asientos traseros junto con su hermana.
–El camino no es muy largo para llegar al pueblo, a lo mucho puedes tardar son unos veinte o treinta minutos en auto.
Asiento y Christian decide arrancar.
No pude evitar ver las estrellas que adornan el cielo esta noche, no sabía que desde aquí del campo se veían más cerca, casi sentía como si pudiera tocarlas.
–Hay dos bares en el pueblo pero siempre vamos a la que esta menos concurrida por borrachos –la miro y ella se encoge de hombros –Tu sabes, la seguridad.
–Suele haber muchas peleas ahí también –interrumpe su hermano mientras sigue conduciendo.
–Creo que quiero regresarme a casa –digo y Hannah se ríe.
–No queremos asustarte pero más vale prevenir que lamentar.
Trago saliva y sigo viendo el camino, justo cuando iba a preguntarles si ya estábamos cerca veo un letrero grande que da la bienvenida al pueblo, las pequeñas casas, la iglesia, las tiendas comenzaron a ser visibles mientras pasábamos, Christian se detuvo justo al lado del parque y estaciono la camioneta para luego ayudarnos a bajar y caminar hacia el bar de nombre la serpiente.
–Vaya nombre –susurro para mí misma y sigo a los hermanos hacia la entrada del bar.
Desde que entramos puedo notar el ambiente relajado, hay música Country de fondo y hay unos cuantos tipos bebiendo en la barra y un grupo de amigas en una de las mesas, de pronto al ver a todos vestidos con botas y sombrero me empecé a sentir fuera de lugar, mi abuelo tenía razón, de inmediato sabrían que soy una chica de ciudad.
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Más Cerca. (+21)
RomanceAl escuchar el nombre de Owen Jones todos saben que significa problemas. Eso es precisamente lo que las chicas quieren evitar pero él es un hombre insistente, testarudo y demasiado atractivo, con la llegada de Tamara al pueblo y un par de copas desp...