The tyrant with the brown eyes [HopeGa]

Otro tipo de Alfa

-HS-

Antes de salir de la habitación de Yoongi pude darme cuenta de que se veía demasiado asustado y no podía negarlo, mi padre realmente lograba dar miedo en ocasiones.

- ¿Qué diablos te pasa papá? - pregunté alarmado por lo que acababa de pasar y ojalá que lo que pasaba por mi mente no fuera así. Por favor Madre Luna.

Hijo de puta, le quiero arrancar la cabeza.

Es mi padre.

Tuyo si, pero mío no lo es.

Alfa rasgaba mi pecho, gruñía y maldecía hacia mi padre por haber entrado a la habitación de Yoongi sin siquiera haber tenido la decencia de haber tocado la maldita puerta y encima de todo eso le había coqueteado estando yo presente.

Mordí mi labio inferior con todas mis fuerzas para evitar que un gruñido se me fuera a soltar. Alfa se encontraba molesto porque lo conocíamos y si le había puesto el ojo en mi Omega sería un gran problema porque intentaría tomarle a como fuera y ahora que Yoongi estaba embarazado mis instintos y lobo tomarían el control de mi cuerpo para protegerles. No iba a permitir que le tocara un solo cabello.

- Hola hijo, ¿cómo estás?, yo estoy bien, gracias. - me sonrió y guiñó un ojo. La impotencia iba creciendo, nunca me gustó la charlatanería de mi padre, bueno, solo cuando fui exactamente igual a él, antes de que Yoongi llegara a mi vida.

Lo miré a los ojos y traté de hallar algo debajo de todo ese cinismo, pero el maldito era muy bueno para ocultar sus pensamientos, o sus emociones, solo dejaba ver lo que le convenía.

Su aroma estaba intacto, tenía muy tenue el aroma de cierto Omega que no quería ver por el momento ni en pintura.

Estuvo con ese maldito Omega loco.

Él le dijo seguramente de Yoongi, solamente espero que no le haya contado sobre el embarazo de nuestro Omega.

Nosotros nos enteramos apenas ayer, no podría saberlo tan rápido.

- ¿Quién es ese Omega? - se atinó a preguntar, alzando una ceja y bebiendo un poco del licor que tenía en su vaso cristalino.

- Nadie que te interese. - sostuve la firme y aterradora mirada de mi padre, lo había desafiado, en otro momento le había dado hasta la fecha de nacimiento del Omega con el que estaba, pero sobre mi cadáver dejaba que mi padre toque a Yoongi, él es mi Omega.

Alzó una ceja al ver la barrera que tenía y vi lo sorprendido que estaba, lo cual me sorprendió a mi también. No era alguien que se sorprendiera fácilmente.

- ¿Acaso no te acuerdas de las veces que compartíamos los mismos Omegas?, es ya una costumbre, no veo por qué la molestia de no querer prestarme a este. - miró la puerta y pude ver el deseo, lo cual me asustó mucho, pero no dejé que se notara. – el aroma que desprende ese Omega es delicioso y por lo que pude ver tiene una silueta perfecta, no veo el problema de que me lo des por unos momentos. Seguro y se mueve muy bien en la cama. - alfa gruñó en mi pecho al escuchar aquello.

- Con este no, papá, y espero que lo respetes. - este sólo sonrió con cinismo.

- Me siento muy ofendido hijo mío, no me digas que ese chiquillo descongeló ese corazón. Eres igual que yo hijo, te enseñé todo lo que sabes, te crie a semejanza mía, no puedes caer tan bajo. - murmuro con su voz ronca. – eres un Alfa puro como yo, mi hijo, mi imagen y semejanza, mi pupilo, mi obra de arte yo te hice así.

- Ya no. – dije.

- ¿Disculpa?

- Papá, soy un hombre nuevo, otro tipo de Alfa, yo lo amo, me enamoré de él. - este me miró como si el poco juicio que tenía se hubiera esfumado y se echó a reír. Negó con su cabeza como si se rehusara a creer aquello que salía de mis labios.