Capítulo 28: Tormentoso Pasado

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- ¡KATSUKI! ¡LEVÁNTATE DE UN MALDITA VEZ NIÑO DEL DEMONIO! ¡SE TE ESTÁ HACIENDO TARDE!

Soltó un gruñido cuando escuchó la molesta voz de su madre llamarlo desde la planta baja. Hoy comenzaba con su segundo año de colegio, acababa de cumplir sus 15 años hace unos cuantos meses y lo que menos quería era iniciar con su nuevo ciclo escolar con los berridos de su vieja bruja.

- ¡YA CÁLLATE ANCIANA DE MIERDA! ¡BAJARÉ CUANDO ME VENGA EN GANA!

Tan sólo pasaron unos segundos antes de que la tempestad llegara. Rápidamente se levantó de la cama, poniéndose alerta en el momento en que escuchó unos pesados pasos subir por las escaleras. Ave María purísima, era hora de rezarle al Santísimo.

- ¡¿QUÉ MIERDAS DIJISTE PEDAZO DE BASURA INSERVIBLE?! - sí, esa era su dulce y adorada madre.

- ¡LO QUE OISTE BRUJA DEL DEMONIO!

Sí, así iniciaban absolutamente todas sus mañanas. Con su buena dosis de golpes e insultos que nunca podían faltar en ese cálido hogar. Acostumbrado totalmente a la extraña relación de su esposa y de su hijo, Massaru permanecía en el comedor, sentado y bebiendo de su taza de café mientras leía "pacíficamente" el periódico.

Momentos después, el rubio bajó para desayunar. No quería llegar tarde a clases, podrá ser un desgraciado pero nunca un irresponsable. No señor, si quería ser el mejor, tenía que actuar como tal.

- Compórtate bien Katsuki, no quiero que te metas en problemas desde tu primer día de clases - advirtió Mitsuki a su mocoso, quien ya se estaba preparando para salir.

- Deja de joder bruja, sé lo que hago.

- Más te vale, cuídate mucho.

- ¡Lo que sea! - gritó mientras salía corriendo. Aún quedaban algunos minutos para el horario de entrada, pero sinceramente no quería estar a las prisas a último momento.

Le tomó algunos 25 minutos llegar finalmente al colegio. Podía ver un montón de rostros nuevos, varios extras caminando de un lado a otro, unos más perdidos que otros, pues había quienes parecían que nunca en su maldita vida habían visto una endemoniada escuela.

Soltó un bufido antes de asegurar la correa de su mochila sobre su hombro y comenzar a caminar. Sabía perfectamente a dónde dirigirse, pues necesitaba ir fuera de la dirección para revisar el tablero en el que estaba escrito el salón al que lo habían asignado. Agradeció extremadamente el que no hubiera nadie más ahí, pues hubiera sido una jodida molestia tener que lidiar con molestos estorbos y él no se encontraba de humor. Más bien, nunca lo estaba.

Comenzó a buscar su nombre, encontrándolo rápidamente y verificando el aula que le tocaba.

- ¿Kirishima? ¿Me tocará con el pelo de mierda otra vez? - se quejó en un murmuro, pues eso sólo significaba que tendría que soportar un año más con el jodido dolor de trasero que era su amigo. Simplemente había ocasiones en las que no lo soportaba - Y para acabarla, la maldita alien y el estúpido cara plana también estarán ahí. Me cago en la puta.

- Amm, disculpa.

Una suave voz lo llamó desde uno de sus costados, haciéndolo girar rápidamente la mirada en esa dirección para encontrarse con una linda chica parada a su lado. Parecía ser extremadamente tímida, incluso sus movimientos se veían demasiado nerviosos, tenía la cabeza ligeramente gacha, pero sus brillantes ojos lo miraban de manera fija, bañados en completa pena.

Extraña. Fue lo primero que pasó por su cabeza.

- ¿Qué mierda quieres? - preguntó con voz ronca, lo último que quería era tener que lidiar con mocosas.

💕TE NECESITO (Bakutodo)💕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora