Pasado o Futuro

Hey kid, Close your eyes

Me quedé parada viendola a ella ¿De verdad tengo que hacer esto?

-¿No puedes hablar? Solo estás molestando...- Momo giró sus ojos a punto de cerrar la puerta.

-Tenemos que hablar.- Dije mirándola, aunque no sabía cómo debería hacerlo.

-Si es por lo de Sana, dejé en claro mi respuesta, Dahyun.-Soltó molesta.

-No es por Sana, es... Por nosotras, Momo. Quiero arreglar las cosas contigo.- Momo parecía extrañada por mis palabras.

-¿Arreglar qué? No estoy para seguir jugando de esta manera...- me acerqué a ella sin dejar de mirar sus ojos.

-Momo, lo lamento tanto, lamento herirte demasiado... Soy una tonta...- Deseaba que no se separara y no lo hizo, pero su rostro molesto seguía ahí.

-¿A qué viene todo esto, Dahyun? Deberías estar buscando a Sana, solo aléjate y deja de confundirme...- Ella se separó de mí entrando a su casa. La seguí para asegurarme de dejar la puerta abierta.

-No, no me alejaré...- tomé su mano para atraerla a la sala y que ella le diera la espalda a la puerta.
-Momo, ya entendí todo...- dije acariciando su mejilla, obteniendo toda su atención.

No podía despegar mi mirada de Momo pero sabía que Tzuyu todavía no había entrado. Sabía que tenía que besarla o en cualquier momento ella podría voltear.

-¿Qué pasa, Dahyun?- Ella hablaba sin entender algo, sonaba inocente y sus ojos brillaban.

-Cuando te ví mirándome de esa manera tan decepcionada, molesta... No lo puedo soportar...- Ella iba a voltear su mirada pero tomé su rostro con ambas manos.
-Tú haz estado para mí siempre, me haz cuidado, amado y yo solo te he herido, Momo... Todo porque no podía, no quería aceptar... Aceptar que te amo...- dije mirándola. Estábamos cerca, lo bastante cerca para besarnos...

-Dahyun, yo... ¿Qué hay de Sana?- dijo de pronto frunciendo el ceño. Acaricié su rostro para relajarla.

-Ella me ha abandonado por segunda vez, yo ya no puedo seguir huyendo de ti... Todo me trae de vuelta a ti... Perdóname, por favor...-

Nuestras respiraciones chocaban, miraba sus labios y ella miró los míos, tan cerca, solo hacía falta que una de las dos se animará... Ella lo hizo.
Nos estábamos besando, tomé su nuca atrayendo su rostro más cerca. Abrí mis ojos un momento para ver a Tzuyu entrar sin mirarme, ella subió por las escaleras.

La manera en la que Momo me besaba era desesperada, rápida, parecía querer más y todavía no habían pasado ni cinco minutos. Esta tarea era difícil...

Nos separamos por un segundo solo para tomar aire y volver a atacar nuestros labios. Ella tenía sus manos apretando mi cintura y yo acorralé su cuello con mis manos, acariciando su cabello.
Después de un tiempo ella se separó de mi rostro sin soltar mi cintura.

-Dahyun, nunca pensé que esto estaría pasando...- Ella acarició mi mejilla. Me dediqué a mirarla con una sonrisa.

Claro que quería a Momo, lo hacía muchísimo, pero no la amaba como ella quería... Solo esperaba que mi mirada no sea descifrada y pueda pasar como la de alguien enamorada.

-Está pasando, tú y yo estamos juntas...- dije para volver a besarla.

Esta vez el beso duró poco por ella.

-Dahyun... ¡Dios! Me tienes muy feliz... Me alegra que nos hayamos arreglado pero, debes irte...- Momo me soltó yendo hacia las escaleras, me apresuré y tomé su mano.

-¿Por qué?- dije haciendo un puchero. Me acerque poco a poco.
-Quiero seguir contigo, así como estábamos...- volví a tomar su cuello acercándome a su boca. Estábamos en el primer escalón.