Capítulo 21

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Descenso

Damien

Apresuro al equipo ya que pareciera que se han traído todo el maldito armario pues Melody y Jenna aún no han bajado.

No tenemos tiempo que perder. Los polacos están en Italia y para que todo salga como quiero no podemos fallar.

Recibí un mensaje de Enzo, sus hombres siguen asegurando el área donde se llevará a cabo el trato. Ordené a Dempster que retirará a mis soldados ya que tenerlos vigilando por ahí solo levantaría sospechas y es lo último que quiero.

—Si no bajan en un minuto nos largamos y quedan fuera de la misión —le digo a Scott para que vaya a apresurarlas.

No me molesto en despedirme de nadie pero la inquietud de lo que pasó momentos atrás no me deja tranquilo. Necesito saber que le sucede.

A lo lejos la veo salir, Mitch le ayuda con la maleta y los ojos de Miranda se encuentran con los míos antes de que abrace a su hija y le diga algo en el oído.

Paso por alto todo cuando Scott llega con su novia y su otra amiga, Anastasia llega después y abordan los autos que nos llevarán hasta el aeropuerto.

◇◇◇

Me froto los ojos, estresado, bajo del auto seguido de Scott y el piloto saluda amablemente a las mujeres que suben al avión antes que nosotros.

Una punzada molesta se instala en mi sistema cuando el copiloto no pierde de vista a Anastasia. Dejo que el castaño suba y me detengo en los escalones cara a cara con el imbécil que sigue con la mirada a la chica que se adentra en el avión.

Le doy una palmada en la cara para que me mire y se sobresalta cuando dejo caer mis manos sobre sus hombros con fuerza.

—Si deseas conservar tus ojos cuida lo que ves.

Asiente atemorizado y esbozo una sonrisa complacida por su respuesta. Adoro que me teman.

Me dejo caer en el sillón de color crema a lado de Anastasia. Suelto un suspiro exasperado y tomo las carpetas que contienen la estrategia de la misión.
Scott deja un par de carpetas más, toma asiento en la mesa de a lado junto a su novia y Stephanie mientras Melody se sienta frente a nosotros.

Abro la carpeta para ver la información que llevaba días repasando, lo sé todo de memoria pero necesito dejar las cosas claras.

—Declan nos esperará en Milán —informa mi mejor amigo.

—Quiero que intercepte las llamadas y mensajes de los búlgaros con los polacos —ordeno sin apartar los ojos de los documentos —. Cuando lo haya hecho que se encargue de fijar una hora, debemos estar antes que el clan Ivanov si queremos que las cosas salgan bien.

—La mercancía será entregada en una bodega —puntualiza la castaña frente a mí.

—Y es por eso que nos vamos a infiltrar —dispongo.

—Según la información que tenemos el polaco pretende entregar el cargamento de artillería en una bodega abandonada en los barrios bajos de Milán —Scott habla de nuevo.

—Marek Nowak tiene orden de captura en Barcelona, Francia, Polonia y México —informa Jenna.

—¿Bajo que cargos? —cuestiona Anastasia.

—Tráfico de mujeres, drogas y armas.

—Marek es primo de Zarek Nowak el mismo que tiene tratos con los Ivanov en el club subterráneo en Madrid —continúa Stephanie.

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