Infidelidad || Hinata Hyūga

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—¿En serio mamá?—Preguntó, mirándola emocionado.

Madre e hijo mantenían una agradable conversación de hechos o pensamientos, alardeando lo increíble que era y decía ser. Hinata escuchaba atentamente, sonriendo casi enternecida por ver a su hijo de esa manera.

Se sentía con vida al verle tan resplandeciente aún con lo sucedido en la familia.

Sin embargo, eran ellos dos en sus burbujas; solo estaban cuatro en la casa Uchiha/Hyūga, se trataba de Hinata, Boruto, Kawaki y Sasuke. Sarada y Himawari decidieron salir con la intención de divertirse en el día.

—¿Te agrada la idea de cuidar a otros niños que no son tus hijos?—Murmuró Kawaki, alejado la tierna escena de Hinata y Boruto.—No tiene sentido que unieran sus vidas el uno al otro después de lo sucedido.

Sasuke estaba en silencio, a un lado de Kawaki. Para ser sinceros, si que le había tomado sorpresa el que Kawaki iniciara ese tipo de conversaciones, desde un inicio se vió indiferente y ahora...

—No estaría aquí si no me agradara.—Respondió con obviedad, aún sin verlo.

—Chc... Sí, pero sabes a lo que me refiero. Hin- Mamá se cansa muy rápido por la situación del Septimo. ¿No te molesta que siga insistiendo? Se ve comprometido en quererla de nuevo a su lado.—Comentó en un murmuro, mirando a Hinata casi fijamente. Sasuke lo miró de soslayo al percatarse.

—Hay confianza. Sé que ella no lo permitiría.

—¿Por qué creés en ella? Madre es muy linda, tendría oportunidades en irse con alguien más y faltar a su palabra por sus sentimientos...—Habló una vez más, dando fundamentos de lo que creía posible.—Por qué...

—Creo en ella. Eso es suficiente.

Kawaki lo miró, creyendo que no lo tomaba en serio. Sin embargo, Sasuke ni siquiera le miraba, si no que parecía más al tanto de la escena de madre e hijo que en la que estaba. Kawaki alzó una de sus cejas con la intención de averiguar que tipo era.

—Creo que... Ustedes debieron estar juntos desde un principio.

Sasuke le escuchó, girando sus ojos por unos segundos para después nuevamente colocarlos donde estaban mirando.

—¡Oigan, corran! ¡Mamá quiere ver una película romántica con todos! ¡Son aburridas 'ttebasa!

Y en ese instante, todo indicio de contexto reflexión, se esfumó, al igual que ellos. Supuestamente de la vista de la mujer Hyūga.

Corrían aún sabiendo que los encontraría fácilmente.