Infidelidad || Hinata Hyūga

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—Esto no es nada más que tu culpa, Naruto. Hinata confío en tí para protegerlos y vienes acá con la noticia de que Kawaki ha perdido un brazo.

Sasuke hablaba con dureza, frente a Hinata que estaba en el sofá sentada con la mirada perdida.

—Realmente tu incompetencia me sorprende.—Siguió hablando.

Alrededor de ellos, estaban todos, Kawaki había sido atentido en urgencias, con Sakura. No fue mucho tiempo en el que su brazo quedaría sin herida abierta.

—Lo lamento. Mandaré una órden para recrear el brazo de Kawaki.—Murmuró débilmente con su mirada al suelo.

No quería ver la mirada de Hinata. Nuevamente sería de decepción. Sin embargo, todo quedó en silencio después de que hablara. Boruto, Sarada, Himawari y Kawaki estaban detrás de Hinata. Kawaki intentó calmarla con el hecho de que ya estaba bien.

Pero en ese estado era casi imposible dejarlo pasar. Naruto había jugado con sus sentimientos y preocupación.

Levantándose lentamente y con cuidado, dió unos cuántos pasos para acercarse a Naruto, Sasuke intentó intervenir.

Quería evitar que se estresara pero... Viendo la situación.

Hinata lo detuvo con una señal, seguía en silencio y ahorita estaba frente al rubio que se negaba a mirarla.

—Confié en tí nuevamente.—Habló calmadamente, como si no estuviera enojada.—Pero una vez más, generas desconfianza y dolor en mi familia.—Relajando sus músculos y suspirando, miraba a Naruto con seriedad.—Por la misma razón, te pido que te alejes de mi familia. Si no eres capaz de protegerlos... Lamento decirte que no eres bienvenido, eso era lo último que podrías hacer pero...

—Madre, la villana jugó sucio, alzó a Himawari por los aires al agarrar al séptimo desprevenido. Ella no podía contra él y la batalla ya estaba decidida, pero Delta supo como contraatacar y él Séptimo simplemente pudo hacer de escudo para Himawari. Fuí yo que me puse en medio.

—Silencio, Kawaki...—Dijo Hinata con dureza, ni siquiera lo alzó a mirar.

Kawaki sintió como su corazón dió un vuelco.

—Naruto es capaz de acabar con cualquier amenaza. Si ella no podía contra él, tenía que acabarla, pero dejó que hiciera lo que hizo. Una villana se adelantó al Hokage de la hoja por sucios trucos. ¿Acaso no es trabajo del mismo Hokage volver a contraatacar? ¡Tenía que acabar rápido con ella! ¡Se que eres capaz de eso y más! ¡Eres fuerte! ¡Eres el Hokage de esta aldea! ¡¿Qué no proteges a la aldea?! ¡A tu supuesta familia! ¡Si lo hubieras hecho, esto no habría pasado! ¡Mi hijo no hubiera perdido su brazo!

Sasuke al verla que se había exaltado, tomo riendas en el asunto para sujetarla por la espalda, siendo un apoyo para que Hinata rompiera a llorar.

—Lárgate.

Pronunció palabra hacia un Naruto arrepentido totalmente, tanto que intentó disculparse pero Sasuke negó y no lo permitió. Simplemente quedó con la decisión de irse del hogar de los Hyūga. Boruto y Himawari miraban con pesar al Hokage, Kawaki solo fué en segundos hacia su madre quién al verlo, lo abrazó fuertemente mientras lo acariciaba.

—Lo lamento, Kawaki... Yo... Yo pensé que no sucedería nada malo y... Y...

—Madre... Estoy bien, estoy vivo...

Hinata lloró desconsoladamente mientras parecía perder fuerzas, Sasuke la ayudó a sentarse a la vez que mandaba a Sarada y Boruto a traer cosas que sean de ayuda para calmarla.

Evidentemente, eso no era nada bueno para el bebé. Ni para la familia. Parecía ser la entrada de lo malo que podría suceder de aquí en adelante.

—Disculpen si se ve algo extraño la separación de los párrafos, realmente no sé que sucede.