Lissa
Caigo sobre la silla con las piernas temblorosas.
-Las manos encima de la mesa, por favor.
Ordenó el policía, y subí mis manos atadas por esposas.
-¿Es necesario que me aten? Yo no... -intento decir, pero el jefe de policía aparece por la puerta y me hace callar.
-Sí, es necesario. Estás acusada de asesinato, Myen...
Trago saliva, y cruzo mis manos con nervios.
A Sam se lo han llevado a otra habitación, y me han traído aquí, para interrogarme.
Veo al hombre sentarse al otro lado de la mesa, y apoya los brazos contra ella para mirarme.
-¿Cuál es tu relación con Sam Petterson?
-No tengo... ningún tipo de relación.
El hombre voltea los ojos, y vuelve a hacerme la misma pregunta.
-Mi hija ya me lo ha contado todo. Me gustaría escuchar tu versión del asunto, pero si no hablas tampoco es necesario.
Me extrañé por lo que dijo.
-¿Olivia le ha contado...? -hago una pausa para pensar- ¿Qué es lo que le ha contado exactamente?
El inspector suspira.
-Oh, vamos. Estas cosas pasan con esas edades. No hace falta que sientas vergüenza. Además, cuanto más hables, mejor.
-Yo no... le he hecho nada a su hija, señor...
El inspector frunce las cejas.
-Tanto tú como tu novio estáis acusados de cómplices, y Sam es...
-¿Mi novio? -le interrumpo- No es mi novio, no somos novios.
No estaba entendiendo nada. ¿Qué era lo que se había inventado Olivia?
El señor suspira de nuevo.
-Ese chico ha abusado de mi hija, y le caerán muchos más cargos que a ti. Salvo que nos confirmes lo de los asesinatos.
-Señor, yo no tengo que confirmar nada. ¿Pueden quitarme estas esposas, por favor?
En ese momento, el teléfono del inspector suena, y lo agarra al instante.
-Señor, una mujer está aquí. Es la madre de la chica. Ha pagado la fianza.
En cuanto escucho el nombre de mi madre, un suspiro de alivio sosiega todo mi cuerpo.
-Enseguida vuelvo -dice el hombre, y sale de la habitación, dejándome allí sola-.
Aproveché para pensar en todo lo que ese hombre había declarado. Olivia había mentido, y no había pensado en las consecuencias.
Debería hablar con Mónica acerca de esto, porque estoy segura de que me puede aclarar algunas cosas. Pero lleva todo el día sin contestar a mis mensajes.
Unos minutos más tarde, la puerta de la habitación se abre de nuevo, y el inspector entra con el ceño fruncido. Procede a desatarme las esposas.
Cuando salgo de allí, me fijo en la habitación continua, donde Sam se encuentra sentado en una mesa idéntica a la mía.
Me asomo por el cristal de la puerta, y se percata de que estoy ahí.
Mi expresión de preocupación claramente se hace notar en mi rostro.
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Una Verdad Perfecta [𝘾𝙤𝙢𝙥𝙡𝙚𝙩𝙖]
Fiksi RemajaUna chica drogada en una fiesta. Un culpable que origina toda su pesadilla. Un hermanastro que termina como héroe. Una amiga involucrada de una forma terrible. Un chico como líder de toda la investigación. Una antagonista y exnovia frustrada...