Sin darme cuenta te amé - cap 8

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Buona lettura.

En el capítulo anterior... 

- Mi suegra, me tiene loco -grita- la quiero matar pero, no puedo -cuando va a continuar hablando balbucea y nos mira intercaladamente a ambos.-perdón, ¿Interrumpí algo? 

...............

- No, tranquilo Marcos no interrumpís nada -hablo yendo hasta la sala, Esteban y el me siguen. 

- ¿Qué fue lo que pasó? - decide intervenir Esteban con Marcos. 

- ¿No entendes que mi suegra me vuelve loco? - habla caminando de un lado a otro.

- Eso ya lo dijiste doscientas veces - habla Esteban perdiendo la paciencia, siempre fue igual la relación entre ellos dos. 

- Bueno entonces lo tenés claro, quiero tener intimidad. Se la pasa rezando todo el día, me vuelve loco. Soy la virgen María ya boludo, para. -grita. 

- Bueno, tranquilízate un poco - Esteban lo apunta y yo permanezco a un lado escuchando la conversación de ambos, aguantando la risa

- Quiero tener un hijo, quiero tener familia la quiero poner... entendes? - me enderiezo en mi posición al escuchar las palabras de mi mejor amigo, Esteban se levanta y se dirige hacia él. 

- No, no digas eso. Para - lo toma de los brazos - vamos para casa. 

- ¿Con vos? -pregunta Marcos y me mira de reojo a mi. 

- Si conmigo pero, te callas la boca, la estás volviendo loca a María y necesita un poco de paz ella. 

- Espero que se solucionen todos los problemas que tenes - hablo mirando a Marcos

- Yo también - responde él sin separar los labios. 

- Me estás tomando el pelo.. -responde Esteban mirándolo y yo trato de aguantar la risa. 

- Para, vos me dijiste que me calle la boca - vuelve a apretar sus labios y levanta su mano - ¿Puedo hablar?

- Se lo dijiste -secundo las palabras de mi amigo- yo te escuché. 

- Están los dos contra mi entonces - responde Esteban cruzándose de brazos

- Gracias María siempre con el pueblo vos, gracias beso.-suelta mi amigo y se acerca para abrazarme mientras ríe. 

- Bueno dale Marcos, espérame afuera. -habla Esteban. 

- Y donde te espero, ¿ahí en la puerta? -Pregunta con una sonrisa. 

- No, espérame en la calle. -dice ya nervioso. 

- Ah en la calle, bueno dale...- responde irónico y me da un beso de despedida. 

Cuando mi amigo sale de la casa no puedo aguantar más y suelto una carcajada, pero esta se corta tan rápido como comenzó al sentir el cuerpo de Esteban pegado a mi espalda y sus manos rodeando mi cintura rosando mis pechos. 

- Ah... -suspira en mi oído haciendo que mis nervios estén a flor de piel- mañana seguimos la charla...

-No, yo no quiero seguir hablando, no, no. -respondo asustada. 

Esteban ríe al notar mi nerviosismo - mañana temprano, pasa por casa - dice dándome un beso en la comisura de mis labios. 

- Chau -respondo tratando de ocultar lo bien que me hace sentir sentirlo tan cerca. 

- Chau -me mira mientras se dirige a la puerta y no puedo negar que tan solo con su mirada hace que mi mundo se paralice. 

Fue sin dudas un día demasiado largo para mi gusto. Así que saco un vaso de la alacena y llenándolo de agua, me dirijo hacia la habitación. Es hora de descansar. Me recosté pero, Morfeo estaba en contra mío y no quería hacer su trabajo. Esteban... Sí, él mismísimo Esteban recorre por las calles de mi mente una y otra vez. No sé en qué momento pero me quedo dormida, y despierto con la luz de un nuevo día. Tengo que ir a casa de Esteban, así que me arreglo más de lo normal. Mi atuendo consta de unos pantalones de jeans color negro rasgado en las rodillas, una blusa de tirantes de seda color negra y por encima un blazer color rojo. En mis pies, unos tacos aguja de charol color negro. 

Tome mi bolso y me dirigí a casa de Esteban

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Tome mi bolso y me dirigí a casa de Esteban. Mis nervios me jugaron una mala pasada al llegar a la puerta de la que en algún momento fue mi casa, los recuerdos se agolparon en mi cabeza y como si de humo se tratará los dispersé enseguida. Llame tocando el timbre, y frente a mi apareció el hombre que últimamente se adueño de mis pensamientos. Me invito a pasar pero decidí esperarlo en la vereda. Estaba dándole la espalda a la puerta cuando de repente una voz pegada a mi oído hace que me sobresalte. 

- Estoy listo. 

- ¿Y a dónde vamos? - pregunto al ver que salió con su chaqueta en las manos y cierra su puerta. 

-Eso no importa, lo importante es en lo que vamos -dice con una sonrisa llena de dientes tan blancos como el algodón. 

- No entiendo - respondí. 

-Mirá -apunta hacia la motocicleta que está estacionada y empiezo a negar con la cabeza- te voy a llevar a pasear en mi moto. 

- No, no, no Esteban. Ya sabes que no me gustan las motos -lo miro directamente a los ojos. 

- Sí. Si, si... me dijiste tantas cosas... me dijiste que no te gustaba manejar autos-ríe mientras toma un casco- y te encantó manejar -sonríe y me resulta inevitable no hacerlo yo también - casquito... 

- ¿Vos también vas a usar casco no? 

- Sí... -me responde como si hubiera hecho una pregunta muy estúpida- siempre uso casco. -Vení - se dirige hacia la moto y lo sigo con la mirada y con una sonrisa bien dibujada en mis labios- vení conmigo. -Se pone la chaqueta y tendiéndome la mano me invita a subir toma el casco de mis manos y me lo coloca, para luego proseguir a ponerse el suyo - ¿Estás lista?

- Sí, estoy lista... -Una vez más me doy cuenta que estoy enamorada de este hombre y que pase lo que pase, ese sentimiento no mengua al contrario cada vez se intensifica un poco más. Me abrazo a su cintura, cualquier pretexto es bueno para poder abrazarlo y sentir su perfume. 

Arrancó la moto y la echo a andar, sin dudas una de las experiencias más hermosas, el aire golpeando directamente en tu rostro, ahuyentando cada una de las dudas que se avecinaban, cerré mis ojos y me deje ir, me hundí en el momento y me dedique únicamente a disfrutar de está maravillosa experiencia al lado de él, un Esteban totalmente diferente... 


¡Hola! ¿Cómo están? Bueno principalmente una disculpa por aparecer hasta ahora, la facultad me lleva todo el tiempo y más en estos tiempos utópicos de la virtualidad. Estudiar un profesorado definitivamente es muy complicado y el tercer año aún más jaja, lo único que espero es que mis futuros estudiantes nunca encuentren a su profesora en wattpad jaja. Espero que les guste el cap. El fin de semana vuelvo con otros capítulos. Y por cierto, les paso a comentar para aquellxs que les gusta leer este tipo de historias, tengo una historia aparte en mi perfil donde estoy escribiendo capítulos únicos pero les. Un abrazo enorme y a la distancia. Muchísimas gracias por todo el apoyo que me dan.  



Historia Tekila (ALTO CONTENIDO SEXUAL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora