DAVISNotaba la tensión de Mía en sus ojos, ambos entramos y rápidamente la agarré la mano con fuerza.
-Veo que Cameron ya se ha presentado, bueno el es Davis, el novio de mi hija.-
Cameron se acercó a mi y me dio un apretón de manos, haciendo que tuviera que soltarla durante unos instantes.
-Vamos a subir un momento a cambiarnos y a ponernos algo más cómodos, enseguida bajamos y os ayudamos a poner la mesa.-Mía me miraba con unos ojitos de cordero degollado deseando que la sacara de ese salón.
Subimos corriendo y cerré la puerta intentando no dar un portazo.
-¿Estás incomoda verdad?, mierda claro que estás incómoda.-Ella sólo se apoyó en la cama y empezó a quitarse la ropa que llevaba.
-Podemos irnos, puedo inventarme cualquier cosa, que mi abuela está enferma o que mi padre se ha roto un brazo... yo que sé pequeña, no tenemos que estar aquí.- La pasé una sudadera de las mias que le llegaba por la rodilla.
-Puedo hacerlo.- se colocó sudadera con unas mallas y se puso en pie.
-No, no puedes Mía, he visto como lo mirabas cuando te ha dicho que eran pareja, estoy seguro que lo has recordado...-
-Davis, joder, puedo hacerlo, solo es una cena. Además han pasado muchos años. Mi madre se merece ser feliz.-Yo la abracé antes de salir de la habitación. Ella me pidió un momento Antea de bajar, y lo entendía, joder claro que lo entendía.
-Mía enseguida baja, no encuentra una sudadera por ningún sitio.-
Colocamos el mantel y los platos y en menos de cinco minutos ya teníamos la cena puesta en la mesa.
La cena fue un poco incómoda, lleno de silencios largos y preguntas muy mal formuladas.
-Y bueno chicos, me ha dicho Stella que ya lleváis bastante tiempo, ¿como os conocisteis?.-
Mientras que apartaba los guisantes del puré de patata conteste a la pregunta.-Mía siempre ha sido una cerebrito y se apuntó a clases de un año avanzado en derecho y bueno, un día me olvidé mi portátil y ella me lo devolvió, supongo que lo demás es muy aburrido por contar.- No iba a contar que luego coincidimos en una fiesta y que casi la desnudo con la mirada allí mismo, que más tarde su novio la pegó y tuve que acogerla en mi casa en plan amigos pero que luego resultó ser mucho y digo MUCHO deseo sexual y ganas de conocernos más, tampoco quería mencionar que en una de muchas fiestas acabamos quitándonos los disfraces en una habitación de a saber quien mientras follábamos como animales y oh por cierto, sin condón. Menos mal que Mía más tarde me dijo que tomaba la píldora y que aunque prefería también utilizar preservativos, no pasaba nada si lo hacíamos sin el de vez en cuando.
-Amor entre aulas entonces.- empezó a reírse, no me gustaba su risa, era muy falsa.
-Mía cariño, ¿estás bien?. A penas has probado la cena.- Dijo si madre.
-Si tranquila, es que en el pueblo no hemos parado de comer durante todo el día y estoy un poco llena.- No levantaba la mirada del plato.
La cena no se alargó mucho y di gracias por eso, solo tenía ganas de entrar en la habitación, echar el pestillo y llenar de besos a Mía por todo el cuerpo mientras que la decía lo increíble que era.
MIA
Cameron se marchó al poco de recoger la mesa y yo ayude a mi madre a meter los platos en el fregadero.
-Se que te ha cogido por sorpresa, si no estás preparada aún mi niña lo entiendo, no tienes que verlo más, hasta que tú te sientas cómoda.- Estaba preocupada, se notaba en su voz.
-Mamá, quiero que seas feliz, no pasa nada de verdad. Tendré que hacerme una idea de que tienes pareja.-
-Pero he visto como lo mirabas, no quiero que te recuerde a nada del pasado.- Me agarro con sus brazos.
-Te vuelvo a decir que no te preocupes, mereces ser feliz y volver a querer a alguien. Así que no te preocupes por mi, que yo estaré bien.-
-Eres la mejor hija del mundo ¿lo sabias?.- me dio un beso en la mejilla.- y tú la mejor madre.-
ESTÁS LEYENDO
Alma Mía
Romance"Mi segunda oportunidad, el amor de mi vida." Davis estaba sumado en la oscuridad desde que su alma gemela lo abandonó hace años. Dos años después, una misteriosa chica aparece en su vida para sacarle de esa oscuridad y darle esa luz que tanto ech...