Dragon Marked War God

Capítulo 35: Píldora Refinación Alma.

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Todo el mundo se quedó en silencio, mirando a Jiang Chen con expectación. Ahí estaban todos los Guerreros Núcleo Mortal, y sólo una decisión de ellos podría sacudir a Ciudad Roja. Pero ahora todos habían puesto sus esperanzas en un joven que apenas tenía 15 años de edad.

No eran tan arrogantes y tan dignos como antes. Ellos eran sólo algunos ancianos de la familia Yan que querían ver cómo Yan Chen Yu crecía. Ella era linda, inteligente y tan bonita como un angel. Ella era un ángel enviado por los dioses. Todos en la familia Yan desde los ancianos a los jóvenes todos la consideraban como una preciosa princesa, y si ella muriera, todo el mundo entraría en una profunda tristeza.

Cuando en realidad descubrieron que Yan Chen Yu tenía un cuerpo con los Nueve Yin, todos y cada uno de ellos
comenzaron a sentir grandes cantidades de pesar. Lo que Jiang Chen les había dicho todavía resonaba dentro de su mentes. Ellos eran estúpidos. Si Yan Chen Yu muriera, entonces sería su culpa.

Destruir a su preciosa princesa con sus propias manos, la destrucción de un genio sin igual que sólo se ve una vez cada diez mil años ... Si algo malo le pasara a Yan Chen Yu, nadie sería capaz de perdonar a sí mismo. Todo el mundo viviría el resto de sus vidas con remordimiento.

Esta clase de final era algo que no deseaban ver, y el joven delante de ellos era su única esperanza.

La expresión de Yan Zhan Yun era básicamente la de un mendigo. El temía que Jiang Chen le rechazara, porque nadie más excepto Jiang Chen podría salvar a Yan Chen Yu.

"¡Sigh!"

Un suspiro suave resonó por la sala. Yan Chen Yu se levantó lentamente de su asiento y comenzó a caminar con pasos pequeños en la sala hasta que llegó donde se encontraba Jiang Chen.

"Señor Jiang, ahora sé la verdadera raíz de mi enfermedad. Ya no tengo de que preocuparme. Yu'er y el Señor Jiang nunca se han visto antes, no hay razón para que el Señor Jiang se preocupe acerca de mi enfermedad".

Yan Chen Yu dijo a la ligera mirando al igual que alguien que estaba a punto de morir y estaba diciendo su último deseo. Ella habló con un tono tan casual, pero Jiang Chen pudo ver claramente la soledad en sus ojos.

Tal vez Yan Chen Yu realmente no tenía miedo de morir. Ella había estado sufriendo por el frío en su cuerpo todos estos años, y ella estaba bien preparada para el día en el que tendría que enfrentarse a su muerte.

Sin embargo, no tener miedo a la muerte no significaba que quería morir. Nadie querría morir, sobre todo los que todavía eran jóvenes. Pero lo que le pasó a Yan Chen Yu sólo le trajo una sensación de impotencia.

Yan Chen Yu no culpó a su padre, y ella nunca sería culpar a los ancianos tampoco. Ella entiende que todos estaban simplemente tratando de ayudarla, a pesar de que el resultado final fue que habían detenido la construcción de los Nueve Meridianos Yin en su cuerpo.

"Señor Jiang, no importa qué, Yu'er quiere darle las gracias por todo esto."

Yan Chen Yu levantó la cabeza y miró a Jiang Chen con sus bellos ojos.

Claros como el cristal, una mirada a sus ojos haría que cualquiera persona sienta su corazón latir dolorosamente. Era una expresión de desesperación, lucha y falta de voluntad.

La mirada que le dio era como una aguja pinchando en el corazón de Jiang Chen, haciendo que su corazón lata más rápido.

'Tengo que salvarla! Debo salvarla!'

Justo en ese momento, Jiang Chen hizo una firme decisión. Una decisión tan firme que él nunca había hecho nada similar.

"No te dejaré morir."