MI KARMA ** MI KARMA II

Capitulo 2.1

Han pasado dos años desde que Pete y Ae se vieron por última vez.

La vida no fue tan fácil, pero tenía mucha fortaleza para seguir adelante, por fin se había librado de la pena que le invadía desde años atrás y había decidido darse una oportunidad en la vida.
Su madre lo apoyo en la decisión que había tomado ya que era muy conveniente para ella el que estuvieran juntos, ya que tenía que hacer muchos negocios en Inglaterra, por lo mismo Pete decidió seguir su especialidad en ese lugar. Sabía que era una salida para olvidarse de Ae y de todo lo que alguna vez lo atormento.
Ya no dejaría que todo lo pasado interfiera en su presente, decidió dar un cambio drástico en su vida y ahora tenía la facilidad de hacer más amigos que antes. Vivía rodeado de mucha gente que lo apreciaba y eso le ayudo mucho.
Ahí conoció a una gran persona que siempre estaba con él en todo momento, era un gran amigo y tenían muchas cosas en común siempre estaban juntos de arriba abajo. Al igual que él, también vivía en Tailandia y siempre lo llenaba de detalles. Pero ... Aún no sabía que pensar sobre eso, se preguntaba algunas veces, cuál? era el motivo por el cual lo hacía, no sabía si era hetero o tenía la misma inclinación que él.
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Había pasado mucho tiempo y por fin había decidido que tenían que regresar, la madre de Pete había terminado su trabajo y lo había finiquitado, ya que quería establecerse de una vez por todas en su ciudad natal.
Estaban a dos días de regresar y Pete se sentía un poco impaciente. Tenía que regresar al país y enfrentar todo lo que había dejado en pausa en ese lugar. Sentimentalmente se encontraba bien, podía enfrentar ahora lo que se le presentará.
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Las clases terminarían pronto y su amigo lo invito a ir con él a una fiesta de despedida. Se vistió formalmente y estaba esperando a su nuevo amigo a que pasaría por él.

- Si mis sospechas son ciertas, creó que le gustas.-- decía la madre de Pete con una gran sonrisa.

- No lo creo.

- Bueno, y si algún día te dijera que le gustas.

Antes de que pudiera contestar se escuchó el claxon de un vehículo e inmediatamente bajo, no sin antes despedirse de su madre dándole un beso en la frente. Su madre se quedó observandolos en la puerta, sabía que tanta amabilidad no era por nada.

Llegaron a la gran recepción, todos sus amigos estaban reunidos y el anfitrión salió a saludarlos. Todos sus compañeros llegaron a la fiesta y sabían que estaban prácticamente despidiéndose, algunos eran de otros países y solo habían ido a especializarse ahí. Otros tomarían su rumbo en algunas empresas por lo que el tiempo en el que se verían sería difícil. La reunión era muy amena y todos se encontraban disfrutando el momento incluyendo Pete.

Su amigo ya le había pedido toda su información ya que él tomaría el manejo en la empresa junto a su hermano y su principal objetivo era que Pete entrara a trabajar con él para que fuera su apoyo, ya que sabía toda la capacidad que Pete tenía para manejar los negocios.

Tin le había pedido lo mismo, que se fuera a trabajar con él, a pesar de que no lo había visto durante mucho tiempo se habían mantenido en contacto y a veces se pasaban las horas platicando de todo lo que les pasaba. Él no había quitado el dedo del renglón con respecto a lo he sentía por Pete, solo estaba esperando a que regresará y sí, quería que aceptara su oferta era para que estuviera junto a él. Solo estaba esperando el momento indicado.

Pete se encontraba muy contento ese día, sabía que el cambio le había hecho bien y solo se relajaba en ese momento.
No sabía lo que le esperaba en Tailandia ya que no se dedicaría a la empresa de su madre, porque no pretendía quitarle su único pasatiempo en donde ella se desenvolvía bien. Prefería mejor buscar trabajo en alguna otra empresa y demostrar sus habilidades. Cuando su madre ya no tuviera la edad, ni la fuerza necesaria entonces sería cuando la apoyaría. En cuanto la oferta de Tin hubiera sido buena si no tuviera que ver con los modelos, más que nada, no quería volver a relacionarse con los amigos de Ae o con él mismo. Le agradecía todo su apoyo pero no era su intención volver a pasar por lo mismo, por lo que dejó esa puerta cerrada para no regresar ahí.