Summer Feelings [pjm]

캠프 16

Las piernas no me daban para más y aún así seguí corriendo de la mano de Jimin hasta que vimos las cabañas. Nos perdimos el desayuno y era un hecho que ya no llegaríamos a la primera actividad, que en ese instante no podía recordar cuál era. En su móvil había mensajes y llamadas perdidas de Jin, Jungkook, de Yoongi... del cual me tocaría aguantarme sus lindos comentarios.

Rodeamos para evitar a los campistas y al resto del personal, por lo que fue mucho más cansado el recorrido. Jimin y yo no nos dijimos nada, solo nos separamos y cada uno se dirigió a su cabaña para ducharse y cambiarse el uniforme, teníamos que estar cuanto antes incorporádonos en nuestras labores.

Antes de entrar en la ducha, puse mi móvil a cargar y cuando salí para vestirme, por fin pude encenderlo, llegaron todos los mensajes pendientes. Salí al pórtico, justo cuando llegó una llamada de Jin. Los nervios me harían vomitar, inspire un par de veces antes de responder.

— ¿Hola? —

— Hannah ¿En dónde estás? —

— Lo lamento mucho, Jin. No... no tengo una justificación válida para mí retraso... — Apresure el paso y vi a Jimin saliendo de su cabaña.

— Ya... por favor, preséntate en las oficinas, he llamado a Park. —

— Bien. — susurré, y Jin colgó sin decir más. El rubio me miraba con expresión seria, aún llevaba el cabello húmedo.

— ¿Era Jin? — me preguntó y asentí. — Diré que es culpa mía. —

— Pero no es culpa tuya. — una vez que estuve a su lado, avanzamos hacia las oficinas. — ¿Por qué piensas que voy a dejar que hagas eso? —

— Deja que lo haga. —

— No puede ser tan grave... eso creo. —

— ¿Estás segura? —

Llegamos a las oficinas, la secretaria nos recibió y nos hizo pasar a una pequeña sala de juntas en dónde algunas veces se reunían los directores y el señor Kim. Al entrar, nos encontramos con Jin que estaba escribiendo algo en un ordenador portátil, Soonjung y Taeri estaban sentadas junto a él, revisando papeles. Los tres nos observaron de arriba a bajo cuando hicimos una reverencia frente a ellos.

— Continuaremos más tarde. — Jin le dijo a sus acompañantes y ellas se pusieron de pie para caminar hasta la puerta.

Tenían una media sonrisa en la cara y las miradas de ambas de nuevo se pasearon de arriba abajo, sobre el rubio y sobre mi. Salieron cerrando la puerta detrás de ellas.

— Siéntense. — pidió y escribió algunas cosas más, antes de cerrar su laptop y mirarnos, una vez que ocupamos un par de sillas no muy lejos de donde se encontraba. — ¿Se puede saber en dónde estaban? No solo se saltaron el desayuno y la primera actividad, sino que ni tuvieron el mínimo interés en comunicarse para disculparse. —

— Lo siento, es mi culpa. — mire con molestia a Jimin.

— No, no lo es. — replique. Jin levantó una mano, pidiendo que nos calláramos.

— Yo no busco un culpable, ambos están en la lista de tareas extras con San. —

— ¿Quiere decir que los dos tenemos que compartir tiempo con él? — note el tono enojado en la voz del rubio.

— No me han respondido ¿En dónde estaban? — preguntó Jin con el ceño fruncido.

— En el claro del viejo cenador... — respondí. — Fuimos a caminar y se hizo realmente tarde. Nos quedamos dormidos... —