En el mundo donde existe millones de personas, en alguna parte de el, viven Xabi y Khea.
Ella tenía muchos problemas y un secreto que no quería dejar salir.
Él no estaba muy seguro de lo que quería, y aunque detestaba la inestabilidad, la quería a...
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•Nombre: Xabi.
•Apellido: Persie.
•Docente: Mónica Rodríguez.
•Fecha de asignación: 29/06
•Fecha de entrega: 1/07
↢ Informe de literatura
La canción elegida: Duelo dulce por Babi.
Esta es una de las canciones que más me han pegado, al escucharla pude sentir el sentimiento y el dolor que quiere transmitir la artista, al contar una pequeña historia.
Es evidente que muchas personas actualmente pasan por problemas, pero muchas de ellas lo ocultan con una sonrisa, o con una vida visiblemente normal.
Babi, cuenta la historia de una chica que en un acto de cobardía se suicida, no sabe el por qué, pero se sentía vacía, no tenía ganas de nada, ni siquiera de tratar de averiguar por qué se sentía así.
En este mundo estamos rodeados de mucha gente, donde no sabemos por lo que han pasado.
Por qué no lo todo lo que por fuera brilla por dentro se mantiene iluminado.
—Esto quedó... —solté con emoción— verdaderamente bello.
Khea y yo nos encontrábamos tendidos en el suelo, alrededor de muchas hojas arrugadas por intentarlo, hasta que Khea decidió mostrarme lo que estaba escribiendo.
—¿Cómo piensas ayudarme tú a mí? —preguntó, sentándose en posición de indio.
Llevábamos casi 4 horas intentando escribir el informe, bueno... yo intentando y ella escribiendo.
—No soy muy bueno escribiendo, pero podría cambiar la canción, y tú eliges si te gusta o no —propongo también, sentándome.
—Dudo que de todo el repertorio de canciones que tienes en tu teléfono, que según tú son buenas porque están pegadas, me gusten, pero nada puedo hacer, habla.
Deslicé por mi teléfono, para encontrar algo bueno para mostrarle, hasta que di con ella, era una canción que me habían pasado hace tiempo, y que no había borrado porque me gustaba.
—La bella y la bestia —declaré, con un poco de duda.
—Porta —añadió— esa me gusta.
—¿Con qué de eso se trata verdad? —Arrugó sus cejas con confusión— te gustan las canciones que cuenten historias —confesé, y ella negó con la cabeza.
—En parte sí, pero no simplemente tiene que contar una historia, me tiene que llegar un mensaje, me tiene que decir: estás pasando esto por alto —explicó— me gusta olvidarme de mi vida para meterme en otra, por eso leo mucho, y escucho música.
