Cortos Multishipps ✨

Chris HemsworthxTom Hiddleston

#corto #chrishemsworth #tomhiddleston (porque sí, también me gusta escribir con los actores).

«Después de tu partida no volví a ser el mismo
Te llevaste una parte de mí contigo».

Mientras caminaba por las calles de Australia, Chris no podía dejar de pensar en él. ¿Por qué no se lo podía quitar de la cabeza? ¿Qué había sido de su vida? ¿Lo extrañaba como él lo hacía? Probablemente no. En su mente imaginaba distintos escenarios de lo que podrían hacer juntos. Caminatas a medianoche en la playa, un picnic en el bosque, subirse a las atracciones del parque de diversiones, ir a exposiciones en los museos, llevarlo a conciertos, ir a acampar... En fin, tenía tanto en mente que no le bastaba el tiempo para todo ello.

Por su parte, Tom tampoco pudo dejar de pensar en él. Sin embargo, sus muchos proyectos lo mantenían ocupado y, cuando tenía un momento libre, tampoco estaba tranquilo porque si salía ahí estaban los paparazzi dispuestos a capturarlo en fotos así anduviera en pijama y pantuflas.

Uno de esos días, por motivos de trabajo, Tom regresó a Australia para grabar una película. Justo allí se encontró con Chris, que se encontraba cerca de donde se hallaba el set de grabación. Después de tanto tiempo, ¿cómo le diría que lo había extrañado sin ponerse nervioso y sin que le temblaran las piernas? No podía. Chris tenía una esposa, tenía hijos. Involucrarse sentimentalmente con él sólo dañaría a todos y él no podía hacer eso. No podía ser egoísta y quedarse con Chris.

—¡Regresaste! —escuchó una exclamación de júbilo a sus espaldas.

Al voltear para verlo, el australiano se lanzó sobre él para alzarlo como a un niño y luego abrazarlo, completamente emocionado. Por un momento a Tom se le olvidó todo lo demás y sólo se enfocó en él. Sonrió sin darse cuenta y su corazón latió a mil por minuto. Al parecer sí lo extrañó tanto como él lo hizo.

Cuando lo bajó, los brazos de Tom se envolvieron en su cuello  y no supo qué hacer o qué decir. Simplemente se perdió en su mirada,  igual que Chris en la suya.

—También te extrañé. —habló finalmente. Su voz salió más alegre de lo que hubiera imaginado, por más que intentó controlarse.

—No te vayas de nuevo, por favor. —pidió Chris, sabiendo que era prácticamente imposible. En cuanto las grabaciones terminaran, Tom regresaría a Inglaterra y, nuevamente, cada quien volvería a su rutina.

—No prometo nada. —Tom rió y le dio un pequeño beso en la mejilla, a lo que el rubio le robó el mejor beso que le hayan dado nunca. Sus labios se acoplaban perfectamente y sus lenguas batallaron, sin importarles que estuvieran frente a todos.

No notaron, sin embargo, cuando entraron hasta que se escuchó la voz de una mujer llamando a Chris. Se apartaron y voltearon a verla.

Mierda.

—¡¿Elsa?! —exclamó Chris, pillado in fraganti.

“Tierra, trágame”, pensó Tom.

¿Ahora cómo explicarían esta vergonzosa situación?