Te Necesito

Capítulo LXX

Narra Emilio.
Llegamos al departamento y nos quedamos dormidos, despertamos los dos al mismo tiempo por la alarma.

Joaco: Buenos días precioso.

Emi: Buenos días amor.

Después de darnos un beso, pensé seguir con la plática que quedó pendiente desde ayer, pero preferí esperar a que salga el tema por él, no quiero sonar insistente.

Joaco: A... Ejem... ¿Hola?...

Emi: ¿Hola? — Me quedo pensativo y hasta ahora me doy cuenta — Perdón...

Joaco: Te quedaste en la luna.

Emi: ¿Quién no se emboba viendo tu belleza? — Beso — Hay que movernos o llegaremos tarde a nuestros trabajos.

Primero llevamos a André a la escuela, vemos a Álex dejando también a Tamara en la escuela, nos saludamos y cuando estamos seguros de que los niños están en su salón, intentamos retirarnos pero nos detenemos porque Álex nos habla.

Álex: No tenía idea de que ustedes son famosos, uno diseñador de moda y el otro cantante y actor.

Joaco: Bueno si, también actúo en teatro o en una que otra novela o película cuando tengo tiempo, ¿Cómo te diste cuenta de eso? O bueno, ¿Por qué te enteraste hasta ahora?

Álex: Hay muchas publicaciones en muchos lados sobre un evento que harán ustedes juntos, en las redes y carteles en las calles.

Emi: A si, si quieres ir...

Álex: A, no, gracias, pero yo no he ido nunca a ese tipo de eventos, de hecho creo que para mí es mejor evitarlos — Voltea atrás de nosotros como si estuviera buscando a alguien — Bueno, nos vemos, no quiero llegar tarde al trabajo, adiós.

Cada quién va por su lado, a su trabajo.
Quién lo diría, hace poco pensaba que esa siempre sería mi justificación por dejar ir a Joaquín hace años, "tenemos caminos distintos", pero ahora estamos juntos y cumpliendo nuestros sueños.
Aún con algo de tiempo decido solo vagar por las calles cerca de mi estudio, estar pensando tanto en nosotros me lleva hasta una tienda de anillos de compromiso, solo los veo de fuera y me voy cuando una joven dentro de la tienda se dirige a mí tal vez para invitarme a pasar y comprar, no tengo el dinero en este momento, pero de lo que sí estoy totalmente seguro, es que si tuviera el dinero en este momento, en mi locura habría sido capaz de comprar un anillo para mi amor.

Emi: Ay Joaquín — Susurrando o suspirando — Me traes bien loquito por tí.

Quiero casarme con Joaquín.
Es hasta la hora de ir por André, que dejo de grabar en el estudio, al llegar por él, en la entrada también está Álex otra vez, aún faltan unos minutos para la salida, él se acerca disimulado a mí.

Álex: Es bueno que tengas tiempo para tu hijo siendo un cantante famoso que tiene que hacer giras y todas esas cosas que hacen... Pues los cantantes.

Emi: Aprovecho cada momento que puedo tener con él.

Álex: Eres un buen padre, creo que si necesitara ayuda algún día, sí se la pido a ustedes.

Emi: ¿Tienes algún problema?

Álex: En esta vida, todos tenemos problemas, cada quién los resuelve como puede, o simplemente se rinde y aprende a vivir con ese peso encima de por vida. — Se ríe después de decir eso — No creas que soy filosófico, eso alguna vez me lo dijo mi padre.

Emi: Si tus padres son de mucho dinero, ¿Por qué no trabajas con ellos? Digo, supongo que son empresarios o algo parecido.

Álex: No, eso ni loco, no quiero estar todo el tiempo ocupado en juntas, papeleo, contratos, de aquí para allá, más problemas, no, eso no es lo mío, quiero vivir mi juventud, si llego a tener familia, quiero pasar tiempo con ella, y si te preguntas por qué tengo un trabajo apartado de ellos, quiero ganar mi propio dinero, no vaya ser que después me quieran cobrar hasta por respirar en su casa.