Te Necesito

Capítulo LXVIII

Narra Emilio.
Pasamos un tiempo esperando que se nos bajara el dolor de cabeza, tiempo en el que nadie se ha levantado de algún sillón de la sala, ni ha dejado de ver la televisión, ni ha comido nada por el asco que todos tenemos, es hasta pasadas las 6 de la tarde que alguien se digna a hablar.

Max: ¿Alguien tiene hambre? Yo sí.

Todos: También.

David: Pero no quiero salir...

Joaco: ¿Les parece una pizza o hamburguesas?

Emi: Pizza.

David y Max: Hamburguesas.

Después de ponernos de acuerdo, Joaco llama a varios restaurantes de comida rápida, pero, o no contestan, o están saturados, después de varios intentos fallidos nos rendimos.
Finalmente Joaco y yo decidimos salir a comprar la comida, terminamos en un restaurante de comida rápida desconocido para ambos, al entrar vemos el menú y elegimos cada quién lo suyo, nos acercamos a pedir todo lo que acordamos.

Álex: Hola buenas tardes — Dice sin voltear a vernos — ¿Cuál es su pedido?

Joaco: Hola... ¿Eres Álex, el hermano de Tamara?

Álex: ¿Me están investigando? — Pregunta levantando la mirada hacia nosotros, los pocos nervios que tenía desaparecen cuando nos reconocie — A, si, soy el hermano de Tamara, ustedes son los familiares de André, ¿No? ¿Vinieron a pedir algo o a hacerme muchas preguntas raras?

Un hombre que está algo lejos de nosotros lo interrumpe — Álex, por favor atiende bien a la clientela esta vez, no quiero problemas con nadie — Él simplemente se adentra en el lugar, Álex no le dice nada.

Emi: De hecho, solo pasábamos por aquí buscando comida rápida de buena calidad.

Álex: A, bueno están en el lugar perfecto para eso, ¿Qué van a pedir? — Pedimos todo lo que quisimos, lo que pidieron Max y David y pagamos — Si gustan tomar asiento en lo que sale su orden, estará lista en 20 o 30 minutos.

Emi: Gracias — Nos sentamos en una mesa cerca de la puerta de entrada — Toda esa familia es muy... Emmm...

Joaco: Reservada, misteriosa si, ya lo había notado, pero prefiero no preguntarle nada a él sobre su vida si no quiere hablar.

No sentí pasar la media hora de espera, Álex nos pide pasar a la caja para recibir nuestro pedido nombra cada cosa para verificar que no falta nada.

Álex: Si no hay problema con la orden, son $240 pesos — Buscamos el dinero y pagamos, el bote de las propinas está casi vacío, así que dejamos algo más de propina — Wow, muchas gracias y... — Voltea un segundo hacia una puerta entreabierta del lado de los trabajadores, aclara lsu garganta y vuelve su vista a nosotros — Una disculpa por adelantarme y suponer cosas malas sobre ustedes...

Joaco: No, no te preocupes, no hay problema, gracias por la comida.

Álex: Okey, de nada.

Emi: Si necesitas algo, ya sabes, en la escuela, a la hora de entrada o salida, o aquí.

Álex: Si, gracias.

Después de un rato en camino al departamento, llegamos, Max y David rápido se acercan a nosotros.

Max: Muchas gracias por traer la comida pero, ¿Por qué tardaron tanto?

Joaco: Tardamos en encontrar un buen lugar, pero tranquilos, la comida ya está, que es lo que importa.

Emi: Y quien nos atendió fue Álex, el hermano de Tamara.

David: Y se ve que es de familia multimillonaria o por ahí.