Eran aproximadamente las cinco de la mañana, el sol aún no entraba a la habitación, cuando Jimin escuchó su teléfono sonar, claramente estaba recibiendo un llamada y eso lo sabía por el tono predeterminado que había colocados, pero no sabe de quién sería la persona que llamaba a esas horas.
Con mucha pereza y fastidio, porque se tendría que separar de los brazos y el calor de su alfa, se estiró con mucho cuidado, pues no quería levantar a su novio, logrando así alcanzar su móvil, que reposaba sobre aquella linda mesita de luz hecha de madera que Yoongi había comprado hace varios meses.
Abrió en grande sus ojos al ver que la persona responsable de su despertar era su propio hermano. Con mucha rapidez se sentó sobre el colchón soltando un jadeo por el dolor que sentía en su parte baja, por un momento miro con odio y enojo a Yoongi, para luego darle un golpe en la costilla.
Obviamente el despertar de Yoongi fue debido a ese golpe, que aunque esté de más decirlo le dolió y mucho, cuando estaba a punto de reclamarle a su novio este le hizo un seña para que guardara silencio para luego señalar su móvil demostrando que tenía una llamada y, por la foto sonriente de esa persona, supo que se trataba de Hoseok.
A regañadiente guardó silencio mientras miraba enojado la sonrisita burlona de Jimin. Dirigió su mirada al reloj, el cual era digital, que su novio había comprado hace poco para darle parte de su especial toque a la habitación que ambos compartían para descansar y que ahora Yoongi lo había nombrado su "nidito de amor" un poco cliché al parecer de Jimin, pero aceptable.
Jimin vio como su alfa bostezaba exageradamente para luego volver a recostarse a su lado, no sin ante decirle "Te amo" seguido de un beso. Sin hacer esperar más a su hermano contestó aquella llamada.
-Buenos días, Hoseok- Saludo con mucho entusiasmo el menor.
-Buenos días, Jiminnie- Respondió el saludo sintiéndose extrañado por el entusiasmo de su menor al saludar.
-¿Que pasa?¿Como les va en el viaje?- Preguntó Jimin mientras se acostaba de nuevo al lado de su alfa.
-No pasa nada malo, y adelantamos nuestro regreso- Contestó Hoseok, en ese instante Yoongi maulló como gato para molestar a su lindo novio- ¿Que fue eso, Jimin?- Preguntó al percatarse de aquel ruido.
-Nada solo estoy viendo un video de un feo gato, pero ¿a qué te refieres con que adelantaron su regreso?- Preguntó el menor mientras miraba el rostro fruncido de su novio.
-Oh, sí- Dijo el mayor recordando lo que estaba por decir- Las cosas terminaron más rápido de lo pensamos y ahora nos encontramos en el Aeropuerto Internacional de Gimhae.
-¿Están en Busan?- Jimin trataba de disimular lo más que podía su asombro mientras se colocaba la camisa de Yoongi.
-Si, ¿por que la pregunta?- Hoseok sospechaba que algo estaba pasando, pues tenía claro que su hermano sabía perfectamente donde se encuentra el aeropuerto que mencionó.
-No por nada, ¿tan fácil fue cerrar ese trato con esa clase de gente?- Preguntó mientras se levantaba de la cama.
-Están tan desesperado que aceptaron rápidamente la propuesta- El menor se colocó al lado de la ventana admirando el cielo que aun estaba estrellado.
-Esos chilenos, tienen una mina de oro y no saben cómo utilizarlas- Contesto Jimin-Que lastima- Y en verdad creía eso Jimin.
-Para eso estamos nosotros para "ayudarlos" a progresar- Dijo burlonamente Hoseok.
-Que lindas palabras para ocultar el hecho de que mataras al que esté al mando y nos quedaremos al mando de esa mafia- Dijo Jimin escuchando la risa de Hoseok.
-Oye, que mala referencia tienes de mi, tu propio hermano- DIjo falsamente ofendido el pelirrojo.
-Hoseok, nos conocemos desde que nací- Contestó con ironía.
-Esta bien, te dejo, las camionetas ya estan lista en dos hora o menos estaré contigo- Aviso Hoseok mientras le decía una cuantas palabras a unos guardaespaldas- quiero desayunar juntos.
-Esta bien, nos vemos- Se despidió el rubio.
-Nos vemos, Jiminnie- Luego de decir aquello cortó la llamada.
Tan pronto como corto la llamada sintió como su alfa lo lanzó sobre el mullido colchón y cuando quiso reaccionar era demasiado tarde, ya que su novio se encontraba arriba de el aplastandolo tal como hacía cuando estaba ofendido, enojado o cuando quería mimos de Jimin. Claramente esas tres cosas le estaba pasando a Yoongi.
-¿Por qué me pegaste?- Preguntó enojado el alfa.
-Porque me duele- Contestó Jimin.
-¿Qué cosa?- Esa pregunta sonrojo al menor y con esa acción el alfa supo el porque-Oh, ya entendí.
-Ya levántate, estás pesado- Dijo Jimin tratando de ocultar su sonrojo y vergüenza.
-No, me pegaste y quiero que me lo recompenses- Dijo caprichoso el blanquecino.
-¿Es enserio?- Dijo coqueto el menor-¿Con que quieres que te lo recompense?
-¿Que me puedes dar?- Preguntó sonriente el mayor.
-No lo sé- El menor solo inclinó un poco su cabeza para luego con sus manos acariciar el pecho de su alfa-a ver ¿que te puedo dar en menos de una hora?, puede ser besos, mimos o un rapidin.
-¿Que no era que te dolía?- Preguntó burlón Yoongi.
-Pues ya no- Contestó Jimin.
-Que rapido te dejo de doler y que rápido tomaste confianza, entonces un rapidin será- Dijo el alfa.
Sin desperdiciar el poco tiempo que tenían, ya que el viaje de vuelta a la mansión tardaba una hora y Hoseok volvía en menos de dos hora, el mayor besó los esponjoso labios de su novio mientras este abría sus piernas para darle más acceso a su alfa. A Jimin le había gustado y demasiado sentir al alfa en su interior.
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Un Amor Letal- YoonMin
Short StoryJimin creía que lo peor que pudo pasarle, además de ser un omega, era haberse enamorado de su guardaespaldas.