Si les trajo primero a este, les aviso que hay uno antes.JOSHUA
No puedo creer que esto esté pasando. De verdad acabo de besar al amor de mi vida, acabo de declararle mi amor, aun sigo sin reaccionar a todo lo que está pasando.
¿Qué probabilidades existían de que eso pasara? Ninguna, era una posibilidad nula.
Esto no puede estar pasando, no puedo creer que no haya podido hacer nada para evitar eso.
Me estaba limpiando las lágrimas cuando escuché un golpe seco y luego el chirriar de unas ruedas.
Lo vi allí, tendido en el asfalto, sangre sale de su nariz, di un grito que salió de mi interior, me dolió la garganta.
No puedo perderlo, no ahora que me declaré así, no después de nuestro beso. Corro a su lado y lo sostengo.
— ¡Olivia! ¡Quien sea! ¡Llamen a una ambulancia por favor! —grito al aire.
La lluvia apenas me deja ver quienes están a mi alrededor, pero reconozco a Olivia. Sacó su móvil y sus manos temblaban hasta que logró estabilizarse y marcar al 911
—Quédate conmigo, ¿entiendes? No puedes irte así tan fácil —Lágrimas empezaban a formarse en mis ojos—. No puedes dejarme en este momento, no ahora.
La ambulancia llegó y me alejaron de su lado.
No puede estar pasando esto, el día que decido decirle todo lo que siento tiene que pasar esto, por qué soy tan desgraciado.
Olivia me tomó de la espalda para sujetarme y abrazarme.
— Tranquilo Josh, tranquilo— decía mientras me acariciaba la cabeza.
—No puede pasarme esto a mí, Liv ¿Por qué a mí?
—No fue tu culpa amor, nadie sabía que esto iba a suceder.
—Quiero estar con él, ¿crees que me dejen ir con ellos?
—Si no se los preguntas no lo sabrás —mirándome directamente a los ojos—. Vamos, te acompaño.
Nos levantamos del suelo en donde estábamos, no sé en qué momento caímos, pero siento las piernas muy debilitadas. Nos acercamos a la ambulancia.
— ¿Puedo ir con ustedes? – les pregunto sollozando a los paramédicos.
—Solo se permiten familiares, lo siento.
—Por favor, no quiero alejarme de él, no en este momento.
—Está bien —accede el camillero—. Sube, rápido.
Me apresuré a subir a la ambulancia junto a Adrien quien está tendido en la camilla bañado en sangre.
Tomé su mano y no la solté en ningún momento.
—No te atrevas a dejarme, voy a morir si no estoy contigo, esperé demasiado tiempo, no quiero seguir sin ti Adrien, te necesito en mi vida —susurré a su lado.
— ¡Lo perdemos! —dice el paramédico y me aleja.
— ¡Por favor, no te vayas! —digo llorando desconsoladamente— ¡Te necesito!
—Despejen —dijo el paramédico dándole descargas a Adrien—. Pulso regulado —dijo mirándome—. Puedes estar tranquilo.
—No creo poder calmarme —le hago saber con lágrimas cayendo por mis mejillas.
Llegamos al hospital y bajamos lo más rápido posible, iba corriendo al lado de la camilla con los paramédicos.
—Espera aquí, te avisaremos cuando terminemos —me dijo un doctor antes de irse por la puerta de emergencias.

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Extraño
RomanceJoshua estuvo enamorado toda su vida de su mejor amigo Adrien, pero el destino les impedirá obtener su libertad. ¿Qué harías Si el amor de tu vida se olvida de tí?